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Alejandro Fernández sobre la economía: “Es bueno estar preocupado”

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POR Francisco Ibañez |

El gerente de estudios de Gemines analiza las claves que explican las malas cifras macroeconómicas de los últimos meses, y proyecta algunas mejoras en el corto plazo.

Las cifras de 2018 no han sido para nada alentadoras. Y los reportes de diferentes indicadores macroeconómicos para los últimos meses hacen prever un cierre de año complejo. 

Algunas de las cifras conocidas recientemente indican un enfriamiento de la economía, y algunos analistas hablan de una clara desaceleración económica. El desempleo para el trimestre julio-septiembre llegó a 7,1%, un alza de 0,4 puntos porcentuales respecto de igual período de 2017. El comercio minorista, en tanto, tuvo durante el mismo trimestre julio-septiembre un crecimiento de 2%, que se compara negativamente con el 5,1% de crecimiento en el segundo trimestre. En septiembre, el crecimiento fue de solo 1,6%, el segundo más bajo del año, luego del 0,1% negativo de julio. 

El Imacec, anunciado este lunes por el Banco Central, creció en septiembre 2,3%, cifra que si bien estuvo por sobre las expectativas del mercado, es la menor del último año. Con esto se completó un 2,9% de crecimiento en el tercer trimestre, por debajo del 4,3% del primer trimestre y bastante alejado del 5,3% del segundo trimestre. 

La minería cayó 1,3%, la manufactura bajó 5,4% y el EGA (Electricidad, Gas y Agua) bajó 1,5%.  Y así las cifras preocupantes suman y siguen. En medio de todo esto, el Banco Central elevó la tasa de interés. ¿Qué explica esto? ¿Hay desaceleración? ¿Qué podemos esperar para los próximos meses?

Para analizar la coyuntura económica, en PAUTA Bloomberg conversamos con Alejandro Fernández, gerente de estudios de Gemines.

Para el economista, hay una conjunción de factores que explican la actual situación económica, principalmente del ámbito interno. “Hubo un repunte de expectativas excesivo cuando se supo que Sebastián Piñera iba a ser presidente, y eso generó una cierta reactivación, un cierto entusiasmo […] y como siempre ocurre, esas expectativas estaban sobredimensionadas”, explica Fernández.

Crecimiento

Fernández profundiza en el problema de las expectativas cuando se trata de analizar la posibilidad de alcanzar en 2018 un crecimiento de entre 4% y 4,5%, según las estimaciones del Banco Central. “Ahí es donde está parte del problema, las expectativas. Creo que el Banco Central fue extraordinariamente optimista, y sobre todo respecto de lo que habían dicho en el IPoM de junio. En el IPoM de junio el rango era 3,25% a 4%, y en el de septiembre pasa a 4% a 4,5%. Es inédito […] Yo creo que el 4% todavía es factible, pero apenas”, dice. Para él, el 4,5% nunca fue razonable.

De todos modos, Fernández considera que hay que poner las cosas en perspectiva. “Hace meses se venía viendo una cierta desaceleración […] El resultado del tercer trimestre marca una desaceleración importante. Yo creo que la tendencia es preocupante, negativa, no hay que ahorrar comentarios en ese sentido, pero al mismo tiempo es razonable pensar que lo que viene hacia adelante va a ser algo mejor”, comenta.

“Es bueno estar preocupado”, sigue Fernández. “Sobre todo para las autoridades es bueno, porque les da un impulso para hacer las cosas más rápido, mejor, pero creo que no estamos en un proceso de desaceleración que vaya a continuar de manera persistente hacia adelante”.

Imacec

Sobre el Imacec de septiembre, conocido este lunes, Fernández puntualiza que aunque es el más bajo en lo que va del año, tuvo un crecimiento respecto del mes anterior que superó lo que se esperaba, y que da una señal de optimismo respecto de lo que puede venir hacia adelante. Sobre las razones del 2,3%, explica la incidencia del gasto público. “Durante el tercer trimestre hubo una contracción del gasto público brutal. El gasto cayó 3,7%, había crecido 5,8% en el primer semestre. Eso no va a seguir así, el gasto público va a crecer en los últimos tres meses del año, y por lo tanto uno esperaría que ese efecto de freno, de bajón que ayudó a generar, debiera tender a revertirse”, afirma.

Desempleo

Otro de los índices que preocupan en el escenario macroeconómico es el del desempleo, que alcanzó un 7,1% para el trimestre julio-septiembre.

“Lo sorprendente fue que el Banco Central, en la práctica, dijera ‘no le creo nada al INE’, porque en el fondo lo que dijo fue ‘mire, los datos de empleo del INE no están buenos, y por lo tanto me voy a guiar por los datos administrativos de las AFP que muestran que los cotizantes están creciendo a tasas altas, que sus remuneraciones están creciendo’. Creo que el Banco Central cometió un error”, dice Fernández, agregando que los datos mostraban señales claras de desaceleración.

Fernández valora la tasa de desempleo como indicador relevante, pero llama a poner atención en el crecimiento de la ocupación. “Alcanzó su nivel más bajo en septiembre desde fines de 2009. 0,5% creció el empleo en los 12 meses hasta septiembre, y eso realmente es muy preocupante, es muy malo”

Para Fernández, es relevante también el rol del sector público en el desempleo. “Hay una parte de la explicación que tiene que ver con el sector público. Recordemos que el año pasado el empleo público creció muy fuertemente, sobre todo en el segundo semestre. Y cuando cambió el gobierno eso se frenó e incluso empezó a revertirse. Parte de este estancamiento que uno ve en el mercado laboral tiene que ver con que el sector público no está contratando. Aunque también es cierto que el sector privado tampoco está contratando”, comenta.

“Eso no es cierto”, responde enfático ante la explicación del Gobierno de que más gente está buscando trabajo y por eso el desempleo subió. “Por lo menos las cifras de INE no lo muestran, el crecimiento de la fuerza de trabajo también alcanzó su nivel más bajo en septiembre en mucho tiempo”, complementa.

Chile y el escenario internacional

En opinión de Fernández, tanto el escenario externo como el crecimiento mundial van a ser peores en 2019 que en 2018. La disputa entre Italia y la Unión Europea por el presupuesto y la concreción del Brexit en marzo pueden tener impacto en el crecimiento económico, afirma.

Respecto de la guerra comercial entre China y Estados Unidos, considera que hay una cierta capacidad de reacción y manejo de China para compensar el impacto de las menores exportaciones a causa de los mayores aranceles establecidos por la administración Trump. Pese a eso, es claro en señalar que China no seguirá creciendo a las tasas a las que nos tiene acostumbrados. “La capacidad de crecimiento de China ha ido disminuyendo, y hubiera ocurrido de todas maneras, independientemente de la guerra comercial”, explica, y agrega que China será capaz de suavizar esta situación.

El mercado del cobre

“El precio, si bien cayó de manera importante a mediados de año, después se ha mantenido bastante estable. Eso lo que está reflejando es que hay una cierta fortaleza en los fundamentos del mercado del cobre, porque los inventarios son bajos, han estado cayendo; la producción en general crece poco”, dice, explicando que el relativo equilibrio entre oferta y demanda permite mantener el precio.

La situación de Latinoamérica

Sobre las posibles repercusiones que pueda tener la situación en Latinoamérica para la economía chilena, Fernández señala que lo más relevante es lo que suceda en Argentina y Brasil. Sobre Argentina es optimista, pese a los problemas recientes que ha tenido. “En algún minuto se llegó a pensar ‘Macri no termina su período’, eso hoy día parece menos probable […] La situación se ve más estabilizada y las medidas muy drásticas que se han tomado están teniendo efecto”, plantea.

En el caso de Brasil, más allá del tema político, Fernández plantea el tema de las expectativas. “A mí me parece que son excesivamente optimistas”, dice, apuntando a la necesidad de que el Congreso apoye las reformas que plantea Bolsonaro, de la mano de Paulo Guedes. Sobre este último, remata: “Creo que es legítimo preguntarse a estas alturas si Paulo Guedes va a ser ministro de Hacienda durante todo el período presidencial de Bolsonaro. Puede que le pase lo mismo que a Alfonso Prat-Gay en Argentina, que cuando empezó con el ajuste más duro y las cosas se empezaron a poner feas, el presidente Macri lo sacó”, finaliza.

Vea el video completo de la conversación en PAUTA Bloomberg acá: