Keller y envíos de gas argentino: “Es un primer paso después de una experiencia traumática”
El gerente general de Colbún, Thomas Keller, destaca las claves del acuerdo entre Colbún y CGE para el renacimiento suministro del gas desde Argentina.
El martes 30 de octubre se reinició el envío de gas natural de Argentina a Chile, que había sido restringido en 2004 e interrumpido totalmente en 2007.
El combustible llegó a través del Gasoducto GasAndes, de 463 kilómetros de extensión, que va desde la localidad La Mora, en la provincia de Mendoza, Argentina, y San Bernardo, en la Región Metropolitana de Chile.
El gas será usado en el Complejo Nehuenco de Colbún, ubicado en la Región de Valparaíso, en el marco de un contrato, interrumpible para ambas partes, entre Compañía General de Combustibles (CGE) y Colbún. El acuerdo considera un suministro de hasta 1,3 millones diarios de m3 de gas, con vigencia del 1 de octubre de 2018 al 30 de abril de 2019.
En conversación con PAUTA Bloomberg, el gerente general de Colbún, Thomas Keller, explica cuál es el carácter interrumpible y temporal del suministro actual. De hecho, hay una situación excedentaria de la producción de gas.
Aunque el actual contrato es interrumpible y temporal, es un primer paso que podría dar pie a un suministro más estable, expresa el gerente general de Colbún.
De hecho, actualmente son varias empresas las que están negociando o ya tienen contratos de suministro con productores y comercializadores de gas en Argentina, y están a la espera de las autorizaciones de la autoridad argentina. En el caso de Colbún, dice Keller, además del contrato con CGC tienen otros cuatro a la espera de autorización por parte del regulador argentino.
Todo estos contratos son temporales e interrumpibles. Se trata de importaciones preferentemente entre los meses de octubre y abril, cuando el consumo interno en Argentina es menor, y además pueden ser interrumpidas por cualquiera de las partes, en función de sus necesidades.
Keller valora la flexibilidad que permiten estos contratos para ambas partes, que incluso considera la posibilidad de variar diariamente, en función de las necesidades energéticas.
La integración energética entre Chile y Argentina es prioritaria para los presidentes Piñera y Macri, como ellos mismos lo han manifestado. Keller piensa que hubo voluntad política para reanudar el envío de gas entre ambos países, y califica el intercambio energético entre Chile y Argentina como “natural y obvio”.
La ceremonia de reinicio del intercambio de gas fue encabezada por el Presidente Sebastián Piñera, la ministra de Energía, Susana Jiménez, y el secretario de Energía de Argentina, Javier Iguacel.
Piñera apuntó a lograr un suministro de gas más barato y destacó que “en la medida que tenemos un suministro de energía a gas más económico, esperamos que eso también se traduzca en precios del gas a los consumidores y a los industriales chilenos también más económicos”.
El gas natural argentino ayudaría a las generadoras, como Colbún, a bajar sus costos. “Este suministro de Argentina obviamente que es más económico que el GNL importado […] contribuye a hacer nuestra matriz de generación más costo eficiente”, cuenta Keller.
La ministra de Energía, Susana Jiménez, enfatizó la oportunidad para la descarbonización de la matriz, además de complementar las ERNC. “El gas natural aporta tecnologías flexibles y de bajo impacto en emisiones, lo que representa un buen complemento a la generación en base a sol y viento”, explicó.
Aunque Colbún opera sólo una central a carbón, Keller apunta también al reemplazo de energías más caras, como el petróleo diésel y el GNL importado.
Respecto de las energías renovables, el gerente general de Colbún destaca la matriz energética de la compañía y su plan por expandir la presencia de las energías eólica y solar en su parque generador. Energías que, dice, “llamamos energías renovables no convencionales pero que en realidad de no convencionales no tienen nada, porque hoy ya son tecnologías que son rentables y conocidas”. Racalca en todo caso la necesidad de complementarlas con energías continuas y no intermitentes, para asegurar un abastecimiento constante del sistema.
Revise la conversación completa con Thomas Keller en PAUTA Bloomberg acá: