Ariztía y cierre de planta de Iansa: “Son realidades que ya hemos vivido”
El presidente de la Sociedad Nacional de Agricultura dijo que la crisis de la remolacha es global: “La rentabilidad va a seguir siendo bajísima”.
El directorio de Iansa aprobó cerrar la planta de Linares, que mantendrá su funcionamiento hasta fines de agosto con un plan de cierre gradual. El presidente de la Sociedad Nacional de Agricultura, Ricardo Ariztía, lamentó el cese de la fábrica, aunque señaló que esto se ajusta a la realidad actual del mercado del azúcar.
“Desde hace cinco años viene decreciendo la demanda de azúcar en el mundo. De hecho, Iansa ya había cerrado dos plantas y anunció hace dos o tres meses que ya no podía seguir. Chile es un actor importantísimo en la producción de alimentos y siempre ha existido cultivos que se extinguen y cultivos que aparecen. Son realidades que ya hemos vivido”, dijo a Primera Pauta, de PAUTA100.5.
Según el empresario, la competencia con la caña de azúcar, la política de sellos en la ley de etiquetado de alimentos y la baja de consumo a nivel global del producto han llevado a esta crisis de la compañía.
Eso sí, el dirigente gremial llamó a la calma, a buscar soluciones y a tener la visión para no dejar propiedades improductivas. “Aquí tienen que actuar organismos que permitan la iniciación de nuevas actividades, créditos, pero lo más importante es la tecnología que aplicarán y ahí el Ministerio de Agricultura tiene líneas que podrían ser un aporte importante. (…) A los trabajadores hay que generarles programas de capacitación. En Linares está creciendo mucho la fruta, el arándano, el cerezo, el avellano, en fin”, sostuvo.
La empresa emitió un comunicado donde lamentó los efectos que tiene para los trabajadores y agricultores de remolacha de la región: “Todos hemos sido testigos de la progresiva baja de hectáreas sembradas año a año, y conocemos de cerca la realidad del negocio azucarero. En el contexto actual, no es razonable seguir operando tres plantas”.
Aunque se habla de cuatro mil personas que perderán su empleo, Ariztía aclaró que la cifra es exagerada pues en realidad “la planta tiene 111 empleados que perderán su trabajo en un plazo de un años o dos”. Parte del equipo de la fábrica de Linares será trasladada a la planta de San Carlos, sin embargo, el presidente de la SNA estima que “la rentabilidad va a seguir siendo bajísima”.
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