La tarea es jugar desde chicos
No en el celular, ni en el computador. Hay que mover el cuerpo. En esta misma linea, en marzo el Ministerio del Deporte comenzará a capacitar profesores con una misión: aprovechar al máximo la hora de educación física.
En Chile, actualmente y según cifras reveladas por la Organización Mundial de la Salud (OMS), la obesidad alcanza a un 15,8% de las niñas de entre cinco y nueve años. En el caso de los niños la cifra es aún mayor: 21,4% de ellos son obesos.
Si a este número se suma aquella población infantil con sobrepeso, el porcentaje alcanza a casi un 45% de los niños en Chile. Esta tasa es considerablemente más alta que el promedio de los países de la OCDE, el cual es de un 25%, aproximadamente, según un estudio de salud pública informado por dicha organización en 2019.
“Los niños obesos y con sobrepeso tienden a seguir siendo obesos en la edad adulta y tienen más probabilidades de padecer a edades más tempranas enfermedades no transmisibles como la diabetes y las enfermedades cardiovasculares”, dice la OMS. En la mayor parte de los casos, las recomendaciones para reducir esos indicadores apuntan a una dieta saludable. Pero hay otro factor que suele estar desatendido: un estilo de vida físicamente activo.
Desde la primera infancia
El presidente del Comité de Medicina del Deporte de la Sociedad Chilena de Pediatría, Francisco Verdugo, cuenta que la actividad física debe estar presente en la vida de los niños desde que son lactantes. “Hasta los cinco años se debe realizar al menos dos horas de actividad física al día. Cuando ingresan a la etapa escolar deben realizar al menos una hora diaria”, explica en un artículo de la Clínica Las Condes.
Dentro del concepto “actividad física” se engloban ejercicios como correr, saltar, jugar en el patio y trepar. El deporte, en cambio, implica cumplir reglas y alcanzar metas. Los especialistas subrayan que en la infancia el foco debe ser recreativo más que competitivo.
La ministra del Deporte, Pauline Kantor, dice a este medio que la habilidad motora de los niños se debiera ejercitar desde el momento en que nacen. “Pero desde la etapa preescolar es clave el trabajo de esas habilidades y que los niños las puedan desarrollar todos los días al menos 30 minutos”, expresa.
La edad clave está a los dos años, aclara la autoridad. Es una edad a partir de la cual los niños tendrían que comenzar el hábito de practicar de forma más consistente y sistemática la actividad física. “Es justamente entre los dos y cinco o seis años que se va desarrollando la base de todo lo que es el desarrollo motor”, comenta. Es decir, desde el nivel Medio Menor de la educación parvularia.
Para niños mayores de cinco años, la OMS recomienda una actividad física diaria de al menos 60 minutos.
Clases de educación física
El Ministerio de Educación (Mineduc) informa a PAUTA que “los establecimientos educacionales deben incorporar momentos en su rutina diaria para que los alumnos practiquen actividad física, así como también para promover una alimentación sana y balanceada”. Algo que ejemplifica esta preocupación es que desde el 2013 esta asignatura dispone de cuatro horas semanales entre 1° y 4° básico (anteriormente eran tres) y su nombre cambió a “Educación Física y Salud”.
Desde ese ministerio agregan que “inculcar hábitos de vida saludable y que comprendan que esto trae beneficios a largo plazo es lo más desafiante con los alumnos de niveles iniciales. También lo es lograr que la práctica de la actividad física sea algo atractivo y estimulante, que hagan con gusto y no solo por obligación y que, al mismo tiempo, se logren desarrollar habilidades motoras, mejorar su condición física y que se alimenten adecuadamente”.
Sin embargo, las bases curriculares para educación parvularia que se encuentran disponibles en la página web del Mineduc son menos claras. En el documento de 136 páginas no aparece la palabra gimnasia. El concepto “educación física” solamente se alude en un anexo, en el cual se especifica que una vez finalizada la etapa preescolar este aspecto adquiere mayor relevancia.
Lo que sí se destaca en el documento son los cambios socioculturales vinculados a fenómenos que afectan a la población y que se empiezan a desarrollar desde la primera infancia. El sedentarismo, la falta de movimiento y la alimentación poco saludable son algunos de ellos.
“Crecer en Movimiento”
Para Cristián Valenzuela, profesor de sicomotricidad y entrenador personal, la calidad de la educación física impartida en los colegios depende en gran medida del nivel profesional de los docentes y el apoyo que entrega el mismo colegio.
En el Ministerio del Deporte este tema se encuentra presente entre las bases del programa “Crecer en Movimiento“. Su foco está puesto en el deporte formativo, para lo cual se dice que se capacitará a los educadores de preescolar para que, en la sala de clases, puedan destinar cierto tiempo al desarrollo de habilidades motrices básicas, describe la ministra Kantor.
La implementación de este punto ya tiene fecha de comienzo. Kantor cuenta a PAUTA que en marzo partirá la capacitación a más de 1.500 profesores para que realicen clases de educación física efectivas a los niños.
La lógica utilizada en el entrenamiento funcional, basada en el trabajo simultáneo realizado mediante estaciones, es una de las que se incluye en el programa. “Ya no va a existir eso de estar en una fila cinco minutos esperando a que le toque el turno”, comenta la ministra sobre el trabajo paralelo y rotativo que realizarán los niños durante el periodo de clases.
La autoridad anuncia que en 2019 se efectuará, por primera vez, una encuesta que mida los hábitos de los niños en cuanto al deporte. En qué horarios lo practican, la influencia de los padres y los lugares más recurrentes para ejercitarse son algunas de las interrogantes que buscará responder el sondeo.
Emparejar la cancha
Cristian Valenzuela, quien por 10 años trabajó dando clases en colegios, observa diferencias según el tipo de instituciones. “Hay establecimientos que le dan mayor importancia al programa de deportes, pero generalmente esto pasa en aquellos que tienen más recursos. En muchos colegios se limita la hora de educación física a la práctica de futbol”, lamenta.
El programa “Crecer en Movimiento” del Ministerio del Deporte apunta a emparejar la cancha. “Que no existan diferencias entre los niños que van a un jardín público y aquellos que van a privados. Desde ahí tenemos que ir eliminando las diferencias”, comenta Kantor.
De esta forma, los niños desde un comienzo podrán ir descubriendo y desarrollando sus talentos y habilidades. “Es la base. Cuando tienes una buena base eso te facilita el día de mañana la práctica de un deporte. Son muy importantes las herramientas que entregamos a los niños, sobre todo en la primera infancia”, dice la ministra.
Entrenamiento en familia
Como suele suceder con diversos temas educacionales, lo que un colegio entrega es una parte. La realidad que cada niño vive en su casa es algo que también influye en que surja un interés hacia el deporte. “Siempre me he fijado que muchos niños son poco activos porque no son estimulados en sus casas”, señala el entrenador físico.
Fue a raíz de esta observación constante que en junio de 2018 comenzó con su emprendimiento, CrissFit Training. Su objetivo es el entrenamiento familiar: los niños realizan actividad física junto con sus padres en espacios como parques y plazas.
Involucrar a la familia en la estimulación física de los niños resulta fundamental para potenciar las capacidades motrices de los pequeños. “En Chile tenemos casi un 90% de sedentarismo en la etapa adulta. Si estos padres son sedentarios claramente no van a motivar a los hijos a ser personas activas”, comenta el entrenador físico cuyas clases admiten a alumnos desde los tres años.
Con esa base en la primera infancia, los beneficios en las etapas posteriores son altos. Se podrían evitar, por ejemplo, problemas ya detectados en adolescentes. Algunos de los resultados obtenidos del último Estudio Nacional de Educación Física, realizado a estudiantes de octavo básico el año 2015, muestran que hoy en día muchos menores no tienen preparado su cuerpo para recibir cargas deportivas.
- 45% de los estudiantes presenta exceso de peso.
- Más de un 90% de los estudiantes necesita mejorar su fuerza de brazos
- Más de un 70% de los estudiantes necesita mejorar su potencia aeróbica.
Por este tipo de antecedentes, la actividad física temprana se ha vuelto un asunto prioritario entre los especialistas sanitarios. Después de todo, la OMS alerta que el sobrepeso y la obesidad infantil constituyen “uno de los problemas de salud pública más graves del siglo XXI“.