Economía

Banco Central pone paños fríos a trayectoria alcista del petróleo

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POR Marcela Gómez |

En el IPoM de junio, la entidad transmitió mensajes tranquilizadores para el mercado y los consumidores.

Si bien admitió que el precio del petróleo ha tenido un alza “relevante e inesperada” en los últimos meses, lo que incide en la inflación y en la actividad, el Banco Central salió a descartar temores sobre sus efectos adversos. Así, no sólo proyectó bajas en el precio del commodity, sino que además detalló que hoy el impacto del petróleo es menos relevante en la economía respecto de hace algunos años.

El análisis viene luego que esta semana la Empresa Nacional del Petróleo (ENAP) informara que por octava semana consecutiva los combustibles verán un alza en sus precios. Así, las gasolinas se encarecerán en $5,7 por litro, promediando la de 93 octanos un precio de  $727,9 pesos, y la de 97 octanos, $748,7 pesos por litro. El diésel subirá también $5,7 por litro, pero la parafina registrará una caída de $16,2 por litro para llegar a un promedio de $498,2 por litro.

Tranquilos, va a bajar

El Banco Central dedicó un recuadro del Informe de Política Monetaria (IPoM) de junio a analizar qué está pasando con el petróleo, que en el segundo trimestre tuvo una racha que lo llevó en mayo a los mayores valores de los últimos cuatro años. De hecho, el incremento del precio internacional del crudo fue el factor más relevante para que el organismo revisara al alza la estimación de inflación para el 2018, desde el 2,3% previsto en marzo a 2,8%.

En el escenario base para el período 2018-2020, la entidad proyecta que existirán precios promedio para el petróleo Brent y WTI  “algo más de 10% superiores a los de marzo”. Este rango, agrega, provocaría un alza de 0,3-0,5 puntos porcentuales (pp) en la inflación a diciembre del 2018, al mismo tiempo que reduciría el crecimiento de la actividad de 2019 en 0,1/0,3pp.

Pero para calmar los ánimos del mercado y de los consuimidores, el Banco Central entregó también mensajes de tranquilidad. Primero, que proyecta que en el escenario base los precios descenderán tal como ya lo están revelando los transacciones que se realizan sobre futuros del producto.

La irrupción del shale oil en la industria estadounidense aporta en esta dirección, ya que agrega una oferta antes inexistente y que contribuye a limitar las alzas en los precios del petróleo convencional ya que en la medida que los precios suben, más shale oil se produce. No obstante, este ajuste se produce en lapsos de tiempo más extensos, por lo que en el corto plazo dicha contención de precios puede verse entorpecida por problemas de oferta y de distribución de este producto en Estados Unidos.

Pero por otro lado, el organismo también advirtió sobre riesgos geopolíticos en Medio Oriente —particularmente en Irán— y en Venezuela, que “podrían representar un riesgo al alza para los precios, cuyas consecuencias de mediano plazo dependerán de su desarrollo”.

Ya no es tan importante

El Banco Central sostuvo que en un país importador neto de combustibles, como Chile, es esperable que un incremento en el precio del petróleo disminuya la actividad y aumente la inflación. Explicó que un aumento del precio del petróleo encarece la energía, reduce el poder adquisitivo de las personas e incrementa el costo marginal de todos los bienes cuya producción requiere de esa materia prima (especialmente, los asociados a transporte), entre otros efectos.

No obstante, detalló que en Chile la incidencia del petróleo en la producción “se ha reducido considerablemente en los últimos años, lo que acota los efectos del incremento actual”.

Los precios de las gasolinas se han encarecido por octava semana consecutiva, según reportó ENAP.
Crédito: Agecia Uno

Por ejemplo, la relevancia del petróleo y sus derivados en los costos de producción ha disminuido en los últimos diez años y también ha bajado considerablemente su importancia en la generación de energía eléctrica, ya que se ha sustituido por otras fuentes, en particular energías renovables no convencionales. Como resultado de lo anterior, dijo el organismo, las importaciones de petróleo pasaron de representar en torno a 30% de las importaciones totales en el 2003 a 10% en lo que va de esta década.

También se debe considerar que los efectos de las alzas internacionales del crudo se ven amortiguadas para los consumidores por el mecanismo de estabilización de precios de los combustibles (MEPCO), que atenúa las variaciones en los precios internacionales; y las fórmulas de indexación asociadas a las tarifas de suministro eléctrico. Ambos mecanismos aseguran que el traspaso de un alza del precio internacional del petróleo hacia los precios locales de combustibles o las tarifas eléctricas no sea ni inmediato ni directo.