El Censo 2022 será el primero en preguntar por el género y no solo el sexo de las personas
El INE somete a revisión el cuestionario preliminar. También se solicitó la participación de pueblos originarios y afrodescendientes.
El Censo de Población y Vivienda que se aplicará en 2022 preguntará por primera vez no solo por el sexo, sino también por la identidad de género; es decir, cómo la persona se identifica a sí misma, lo que puede concordar o no con su sexo biológico. Así se desprende de las preguntas preliminares del cuestionario censal preparado por el Instituto Nacional de Estadísticas (INE), con el propósito de recoger visiones de pueblos originarios y afrodescendientes.
“La versión preliminar del cuestionario censal, que será sometido a la revisión de los pueblos y a pruebas en terreno, cuenta tanto con una batería amplia de preguntas de migración (que incluyen nacionalidad), como de identidad de género”, confirmó el INE. Esto como fruto del proceso participativo de construcción del cuestionario que contempló la realización de mesas de trabajo consultivas con servicios del Estado y sociedad civil, agregó la entidad ante las consultas de PAUTA.
Esta medida se aplica además en el contexto de la Ley de Identidad de Género promulgada por el Presidente Sebastián Piñera en noviembre de 2018.
Desde 2015 la Encuesta Casen indaga sobre identidad de género y orientación sexual (la atracción afectiva, física y sexual), las que que se aplican exclusivamente a las personas mayores de 18 años.
“Me parece muy positivo y un avance que se incluyan preguntas sobre la identidad de género en el próximo Censo, porque necesitamos tener más datos sobre la realidad de nuestra población para impulsar mejores políticas públicas”, afirmó la activista trans y presidenta ejecutiva de la Fundación Iguales, Alessia Injoque. Añadió que también es necesario que el Censo consulte sobre la orientación sexual.
Pueblos orginarios
Como parte de la preparación del Censo 2022, las organizaciones de pueblos originarios fueron invitadas por el INE a aportar sus visiones para el cuestionario. El proceso también está abierto a las comunidades afrodescendientes, reconocidas legalmente recién en 2016 aunque tienen presencia en el territorio desde hace siglos.
La directora del organismo estadístico, Sandra Quijada, explicó que de este modo se busca que el cuestionario censal “refleje adecuadamente sus características, y su realidad social y cultural”. La idea es que puedan solicitar la inclusión de nuevas temáticas o preguntas a las ya existentes.
Un buen ejemplo de este proceso es lo ocurrido cuando se preparaba el Censo 2012, donde organizaciones indígenas propusieron la opción “espiritualidad indígena” en el listado de religiones o credos que practica el informante. También se agregó la alternativa “vivienda tradicional indígena (ruka, pae pae u otra)” a las respuestas en materia de vivienda, donde figuraban casa, departamento, mediagua, entre otras.
Los aportes, que se podrán hacer por escrito o en la web, luego serán evaluados técnicamente para revisar su pertinencia y factibilidad “para generar una nueva versión de cuestionario que posteriormente será sometido a diversas pruebas cualitativas y en terreno”.
En el Censo 2017 poco más de 2,1 millones de personas declararon pertener a alguna etnia, lo que equivale al 12,8% de la población.