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Alternativas al cigarrillo no logran convencer a los fumadores

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Agencia Uno
POR Gabriela Villalobos |

British American Tobacco redujo su pronóstico de ventas para su línea de cigarrillos electrónicos y no combustibles ante una menor demanda por este tipo de productos.

British American Tobacco (BAT) anunció que los ingresos provenientes de las alternativas al cigarrillo no alcanzarán las expectativas este año y publicó una perspectiva más pesimista para los nuevos productos de la industria tabacalera que la de su rival Philip Morris International Inc.

El fabricante de los cigarrillos Lucky Strike redujo en 10% su objetivo de ingresos por cigarrillos electrónicos y no combustibles para este año. Ahora, BAT pronostica ingresos por 900 millones de libras esterlinas (US$ 1.200 millones) tras retirar del mercado de Estados Unidos uno de sus dispositivos. Además, la empresa ha sufrido porque se ha estancado la demanda japonesa del llamado tabaco para calentar sin quemar. Las acciones llegaron a caer 1,3% y rondaban su cotización más baja en cuatro años.

La llamada tecnología para “calentar sin quemar”, comercializada bajo la marca Glo de BAT, “no es un sustituto completo del acto de fumar”, dijo Ben Stevens, director financiero de BAT, en una entrevista telefónica. “No va a conquistar el mundo, como dicen algunos de nuestros competidores”.

Las evaluaciones contrastantes sobre las perspectivas de las alternativas a los cigarrillos subrayan el giro volátil de la industria. Las grandes tabacaleras enfrentan su mayor cambio en años en medio de una gran cantidad de alternativas al hábito de fumar, y los fabricantes de cigarrillos están descubriendo que ya no pueden contar con un crecimiento predecible y constante ya que la nueva categoría de productos tropieza con problemas como los retiros del mercado y la represión de los entes reguladores.

Las acciones de BAT, que casi se han triplicado en los últimos 10 años, van camino a su primer descenso anual desde 2008.

Pronósticos divergentes

La incertidumbre que enfrenta la industria ahora es evidente: ni siquiera las tabacaleras más grandes pueden ponerse de acuerdo sobre dónde se encuentra su futuro. Philip Morris, que está expandiendo su dispositivo IQOS para calentar sin quemar en todo el mundo, pronosticó que algún día la demanda de alternativas para fumar será tan fuerte que dejará de fabricar cigarrillos tradicionales.

Si bien es más bajo que antes, el nuevo objetivo de BAT para la venta de nicotina de próxima generación es duplicar los ingresos, tanto en bolígrafos para vapear como en calor sin quemar, dijo Stevens. BAT ha pronosticado que el segmento generará más de 5.000 millones de libras (US$ 6.550 millones) en ingresos para 2022.

Ese tipo de crecimiento rápido ha generado entre los entes reguladores el temor a que los nuevos productos estén atrayendo a consumidores menores de edad. La semana pasada, la Administración de Medicamentos y Alimentos de EE.UU. envió cartas a 21 fabricantes de alternativas para fumar, entre ellos BAT, exigiendo más información y amenazando con prohibir sus dispositivos si no cumplen con las normas estadounidenses.

Japón es el mercado donde los dispositivos para calentar sin quemar han tenido el mayor éxito y la cantidad de cigarrillos vendidos allí ha disminuido cerca de 20% en dos años. Ahora, sin embargo, cada vez es más difícil convencer a los consumidores más tradicionales para que adopten nuevos hábitos, como recargar un dispositivo electrónico que calienta tubos pequeños de tabaco reconstituido.

Sin embargo, como el caso de Japón ha demostrado que los cigarrillos tradicionales pueden estar en riesgo, la canibalización se ha convertido en un problema mayor.

“Seguimos preocupados por la transición de ingresos y beneficios desde los productos combustibles a los de vanguardia”, escribió Richard Taylor, analista de Morgan Stanley.