Economía

Corre, retail, corre

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POR Gabriela Villalobos |

La compra de Cornershop puso de manifiesto la importancia que le asigna el retail al área logística y el potencial que tiene el modelo de despacho de última milla en el comercio electrónico.

La compra está a sólo un clic de distancia y podría llegar en una hora a su casa. Esa es la promesa de los servicios de última milla, un modelo de negocios que saltó a los titulares de los medios tras el anuncio de la intención de Walmart de comprar Cornershop. Este último funciona como una aplicación que permite al usuario comprar en diversas tiendas a través de Internet y recibir los productos en un plazo menor a los 90 minutos. 

El mayor retailer de tiendas físicas del mundo adelantó que pagaría US$ 225 millones por adquirir Cornershop, compañía fundada por dos chilenos y un sueco. La transacción todavía está a la espera del visto bueno de la Fiscalía Nacional Económica, pero ya impactó en el mercado. La importancia del servicio logístico para el comercio quedó demostrada por el alto valor que está dispuesto a desembolsar Walmart. Se trata de una cifra mayor a la que pagó Falabella por la plataforma de ventas online Linio (US$ 138 millones) y que equivale -por ejemplo- al 70% del valor en bolsa de Hites.

¿A qué se debe este interés? El origen está íntimamente ligado a la explosión del comercio electrónico. Según cifras de la Cámara de Comercio de Santiago, en 2017 se realizaron compras  por internet equivalentes a US$ 4.000 millones y se espera que el monto crezca a US$5.200 millones este año. Y los productos comprados deben llegar, de alguna manera, al cliente final en un plazo razonable. Los negocios de última milla apuntan justamente a esto.

Cornershop no está solo en la cruzada por este servicio. La española Glovo debutó en el mercado local a fines del año pasado, mientras que la colombiana Rappi llegó a mediados de este año. “Chile, por definición, es la cuna del retail de Latinoamérica. Acá el deporte nacional es comprar, se dan las condiciones y las expectativas de nivel de servicio son bajas. Uno está acostumbrado a pedir sushi y se demora 90 minutos en llegar, o uno pide un refrigerador y te dan un margen de tiempo de 12 horas para la entrega”, dice el country manager de Rappi Isaac Cañas, al explicar el potencial de la industria en Chile.

Las empresas de despacho de última línea compiten con el servicio que ofrece el mismo retail. En el caso de Jumbo, cuenta con un servicio de despacho en menos de 90 minutos, pero implementar el modelo logístico implica una gran inversión. Un monto que los negocios pequeños no pueden financiar, dice Cañas. “Creemos que es una vía complementaria que va a permitir desbloquear un canal de ventas, la barrera logística”, comenta Cañas.

Aunque se espera que el comercio electrónico crezca 30% este año, la penetración todavía es baja. De hecho, este canal representa sólo el 5% de las compras, según la CCS. Por lo mismo, el potencial de crecimiento continúa siendo alto y existiría espacio para las empresas de crecer -y correr- en Chile.