Seis libros para las distintas fases del desconfinamiento

A través de paisajes estadounidenses, librerías controversiales e interpretaciones críticas de la vida humana, el traficante de libros explora los pasos a seguir para salir del encierro.

Leer implica una cierta libertad de lo que significa estar frente al computador. “Se trata de salir de las pantallas con brillo y entrar en las hojas de libros que no brillan, pero que sí tienen su propia belleza”, dice el “Traficante de Libros”, Ernesto Pfeiffer, en Desde El Jardín, de Radio PAUTA.

Es una oportunidad para entrar en diálogo con la opacidad de las materialidades, las ediciones hiladas, y de apreciar las portadas: dejarse seducir por la literatura. 

A continuación, una lista de libros para diferentes edades y gustos, especiales para ir saliendo de casa. 

El ángelus de mediodía (2008)

Eliana Navarro

Una gran escritora de 1920 que vivió poéticamente. Poco se ha dicho de Eliana Navarro. En El ángelus de mediodía, ella formó un hogar dedicado a la poesía junto con José Miguel Vicuña.

Su infancia la pasó en Trovolhue, cerca de la ciudad de Carahue. Y a sus cinco años realizó su primer poema, dedicado a esa laguna.

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“En ese primer bosquejo ya está su capacidad de observar la realidad: las aguas, las aves. Se percibe todo un espíritu y una sensibilidad poética que recomiendo sobre todo para aquellos que se están desconfinando. Es una poesía muy luminosa y angelical. Llena de paisajes”, dice Pfeiffer.

“Amiga poesía. Me preguntan a veces ¿Qué es la poesía? Es una gran amiga. Suele venir por caza. Le encanta alborotar. Ayuda tanto, no puede ver las lágrimas, las recoge por todos los rincones y las cuelga en las lámparas. El ropero guarda mariposas, y en algunas mañanas toca el disco del sol en primavera, y la casa navega agitada por nubes y cigarras”.

– Extracto de El ángelus de mediodía

“Generalmente las convivencias son difíciles con finales trágicos. Pienso en la historia de Ted Hughes. Pero esta fue una pareja armoniosa que formó a muchos hijos poetas, cada uno con su propio universo”, dice Cristián Warnken, el anfitrión.

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“Sí, eso es notable. Y también en el hogar de Navarro y Vicuña, los poetas y músicas siempre fueron esperados con alfombras rojas. Con suculentas onces”, cuenta Pfeiffer.

El gran Gatsby (2013)

F. Scott Fitzgerald

“Se le criticó mucho a Fitzgerald esta novela. El público estaba esperando una historia de campesinos, que eran los personajes de moda. Pero él aparece con esta historia urbana, que retrata el mundo de la bolsa, donde se persigue el sueño americano“, explica el Traficante de Libros.

En ese sentido, cree que se están viendo los Gatsby a la chilena. Andan con mascarilla, pero son los mismos.

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Fitzgerald decidió explorar a los nuevos ricos de la sociedad norteamericana del siglo XX, y al final del libro existe un epílogo donde defiende la autenticidad de tal elección. Además, cuenta con una desgarradora historia amorosa, la cual es acompañada por gratificantes paseos por las costas norteamericanas. “Es un libro que está lleno de vida”, dice.

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“Es un tremendo escritor Fitzgerald. Creo que forma parte de la legión de los grandes narradores norteamericanos, que han podido narrar su mundo, su tiempo. Además, tuvo un destino trágico. Su alcoholismo y sus angustias por intentar ser un gran escritor. Todo eso es la parte más trágica de este mundo aparentemente chispeante y glamoroso. Porque también hay tragedia y decadencia”, comenta Warnken. 

Cartas desde la tierra (2016)

Mark Twain

Fueron cartas censuradas hasta 1962. “Son muy irónicas y creativas. Nos permiten observarnos desde una mirada más crítica. Recomiendo este libro sobre todo a jóvenes y adolescentes”, dice el traficante de libros.

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“Primero nos encontramos con unas páginas donde nos cuenta la historia de la tierra. Pero contada desde un punto del universo. Y ahí está el creador, Satanás y los arcángeles. Ahí se arman unos diálogos muy entretenidos. Finalmente son cartas de Satanás observando el comportamiento absurdo de la tierra. Critica la iglesia, lo complicado que son los seres humanos”, cuenta.

Satanás dice sobre el mundo humano:

“Es un lugar raro. Y extraordinario también e interesante. No hay nada que le parezca en casa. Los hombres están todos locos. Los otros animales están todos locos. La tierra está loca. La naturaleza en sí misma está loca. El hombre es una curiosidad maravillosa. Cuando está en su mejor momento es una suerte de ángel niquelado de baja calidad. En el peor es indescriptible. Inimaginable. Y en todo momento es una sátira”.

– Extracto Cartas desde la tierra

¿Puede aceptarse todo esto? (2017)

Claudio Bertoni

Es una lectura especial para aquellos que continúan en confinamiento. O para los que están en fase 1 como la ciudad de Valparaíso, donde se encuentra el Traficante de Libros.

“Es un conjunto de citas de gran valor, muchas veces metafísicas, acompañadas de anotaciones de Bertoni. La pregunta del título surge cuando uno lee y está de acuerdo o no. Cuando la lectura te provoca un rechazo y te dan ganas de confrontar al autor”, dice Pfeffier.

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“Por ejemplo, unos de los fragmentos que seleccionó es: ‘Roger Bacon sufrió 12 años de cárcel por haber afirmado la primacía de la experiencia de las cosas del conocimiento’. Y Bertoni dice ‘para que aprende po'”, lee Pfeiffer. Porque en este libro se abre el mundo de la libertad del lector.

“Me acuerdo de Michel de Montaigne. Leía los clásicos, a los griegos en latín e iba colocando el margen observaciones. Y de pronto se dio cuenta que esas frases iban construyendo un texto. Y ahí inventó el género del ensayo“, apunta Warnken.

La vida que yo he pasado

Roberto Parra

“Alguien que cantó, bailó, se enamoró, zapateó“, dice Pfeiffer.

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En este libro el lenguaje adquiere distintos matices folclóricos y coloquiales. Quizás una lectura ideal para quienes buscan reír en casa. 

“Yo nací en un conventillo. En siniestro cartucho. Sin ayuda de partera, ni padre pelaba el pucho. Estaba pobretón en aquel año. De uno gangocho viejo me hicieron paño. Me hicieron paño sí. Qué manso tete. No había mamadera, menos chupete. Me quedé macabeo, chupando el deo'”.

-El conventillo 

La librería

Penélope Fitzgerald

Una oda a las personas que se arriesgan y han luchado por mantener a flote una práctica indispensable para reencontrarse con los libros físicos. Se trata de un acto de resistencia.

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“Es una novela liviana. Se trata de una mujer que abre una librería en una localidad bastante inhóspita en Inglaterra. Genera polémica porque es mujer y después porque llega Lolita de Vladimir Nabokov“, cuenta Pfeiffer.

Y para quienes gustan de complementar sus libros con versiones cinematográficas, pueden disfrutar de The Bookshop (2017), disponible en Netflix, con las actuaciones de Emily Mortimer (The Party) y Bill Nighy (Love Actually).

Revise la conversación entre Cristián Warnken y el Traficante de Libros en Desde El Jardín