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Schmidt y Rojas: las nuevas cartas de Piñera para oxigenar su gabinete

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POR Juan Manuel |

El Mandatario optó por personas de confianza para su primer ajuste. Una vez más pasó por alto a los partidos para hacer sus nombramientos.

En su primer cambio de gabinete, a cinco meses de haber asumido su segundo mandato, el Presidente Sebastián Piñera optó por incorporar dos nuevos ministros a su administración para renovar su equipo de gobierno y hacer frente a la caída en popularidad que había registrado su administración en las últimas semanas, según las encuestas.

Para el Ministerio de Medio Ambiente, Piñera recurrió a una carta conocida y probada. Se trata de la exministra Carolina Schmidt, quien durante su primera administración se desempeñó en primer lugar a cargo del entonces Servicio Nacional de la Mujer (Sernam). 

En el Sernam, Schmidt duró tres años y durante su gestión impulsó y logró aprobar la ley que extendió el periodo de postnatal de tres a seis meses, una de las medidas más emblamáticas del primer gobierno de Piñera. En dicha cartera estuvo hasta abril de 2013. Ese año, el Congreso acusó constitucionalmente al exministro de Educación, Harald Beyer, por no haber fiscalizado ni sancionado oportunamente el lucro en las universidades. La movida de la entonces Concertación fue exitosa: el líbelo se aprobó en ambas cámaras y Beyer fue destituido de su cargo.

Carolina Schmidt es la nueva ministra de Medio Ambiente. Crédito: Agencia Uno

Piñera decidió entonces recurir a una de sus mejores cartas y movió a Schmidt desde el Sernam a Educación. Como sucesora de Beyer tuvo que lidiar con el movimiento estudiantil que ya en esos años, post movilizaciones de 2011, significaba un fuerte dolor de cabeza para el gobierno. Lo logró con éxito y consiguió mantenerse en el cargo hasta el fin del gobierno de Piñera.

La exsecretaria de Estado desde julio de 2017 hasta la actualidad se desempeñó como gerenta general de medios del grupo Copesa, empresa controladora de varios medios de comunicación. Durante su gestión en el holding de Álvaro Saieh, Schmidt enfrentó importantes modificaciones del grupo mediático, como el cierre del diario Pulso, la revista Qué Pasa, la revista Paula y el diario La Hora.

Del segundo piso de La Moneda a Cultura

Piñera también decidió reodenar las piezas en el recién inaugurado Ministerio de las Culturas y las Artes, que hasta este jueves 9 de julio era liderado por la ahora exministra Alejandra Pérez.

Pérez no tuvo una gestión fácil. Bajo sus hombros tenía la díficil tarea de echar a andar el ministerio que recién entró en vigencia en marzo de este año. Pero, además, protagonizó varias polémicas en su corta gestión. Algunas declaraciones desafortunadas en medios de prensa y una fuerte rotación en cargo de su exclusiva confianza, como jefes de gabinete y jefes de comunicaciones, habrían marcado su amargo desenlace.

En su reemplazo, Piñera destinó a uno de sus hombres de mayor confianza. Se trata del escritor, filósofo y actual jefe de contenidos y estrategia de La Moneda, Mauricio Rojas.

Rojas se desempeñaba en el segundo piso de Palacio, trabajando junto con Cristián Larroulet, jefe de asesores del Presidente Piñera. Desde ahí estuvo a cargo de la redacción de los discursos del mandatario.

Mauricio Rojas y Cristián Larroulet. Crédito: Agencia Uno

Rojas es un reconocido intelectual de derecha liberal. Es amigo personal del actual canciller Roberto Ampuero, con quien escribió el libro Diálogo de Conversos. Ahí, el escritor relata como pasó de ser mirista en tiempos de dictadura a llegar a ser diputado por el Partido Popular Liberal de Suecia durante su exilio en ese país que comenzó en 1974. También redactó Conversando con Sebastián Piñera, libro que recoge siete conversaciones con el Presidente realizadas entre marzo y septiembre de 2013, en las cuales recoge varios episodios de la vida del Mandatario. 

Además es amigo de Mario Vargas Llosa y pertenece a la Fundación para el Progreso. Rojas además tuvo un importante rol durante la exitosa campaña de Piñera que logró llevarlo de vuelta a La Moneda con una gran votación. En el comando, estuvo a cargo de pensar e idear el relato político desde el cual se redactó posteriormente el programa de gobierno.