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El modelo de TriCiclos que fue premiado como emblema de la economía circular

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TriCiclos
POR Francisco Ibañez |

Reciclaje, cambio cultural y consultoría. Esta es parte de la oferta de valor de esta compañía chilena, que ya está en cuatro países, y que acaba de ser destacada en Davos.

No sólo el ministro de Hacienda, Felipe Larraín, representó a Chile en la última cumbre del Foro Económico Mundial en Davos, Suiza. También lo hizo TriCiclos, empresa dedicada al reciclaje, y que recibió el premio “The Circulars”, el reconocimiento más relevante a nivel mundial en la economía circular, en la categoría “Dell4Good”.

En PAUTA Bloomberg, la gerente general de TriCiclos en Chile, Verónica De La Cerda, explica la importancia de este reconocimiento, cuál es el modelo de negocios de la empresa, sus planes de crecimiento y la importancia de la economía circular.

“TriCiclos es una empresa que lo que trata de hacer es corregir un error de diseño en nuestra manera de producir y consumir. Ese error es el que genera la basura”, plantea De La Cerda, aunque reconoce que la empresa es más conocida por gestionar el reciclaje de los recursos una vez que ya se produjeron, un ámbito en el que vienen trabajando hace años.

El trabajo en el reciclaje, cuenta De La Cerda, le ha traído a TriCiclos conocimiento y datos que han utilizado para generar un software y otro tipo de herramientas para tratar de corregir el problema antes de que se genere.

The Circulars

Fueron más de 450 empresas de todo el mundo las que postularon a este reconocimiento, cuenta De La Cerda sobre el premio The Circulars, que destaca a las compañías que ofrecen productos y servicios que ayudan a la transición hacia una economía circular.

“Hoy nuestra economía está anclada en un modelo lineal. ¿Qué quiere decir? Que nosotros extraemos recursos naturales, que en su mayoría son finitos, no infinitos, y no renovables, y producimos, consumimos y desechamos. Y cuando desechamos no pensamos qué va a pasar con eso, por lo tanto lo enterramos o lo quemamos”, explica De La Cerda. “Para países como Chile resulta crucial empezar a cambiar este paradigma de producción, y desanclarse del uso de recursos naturales y de la contaminación o la contribución a un cambio climático”, añade.

La economía circular busca minimizar la extracción y mantener en la economía lo que ha sido extraído y que no es propio de la naturaleza. La idea, explica De La Cerda, es diseñar y construir de manera que las partes y piezas sean reutilizables y no generen desechos, o que generen lo menos posible.

En 2015 se empezó a posicionar el problema de los plásticos, cuenta la gerente general de TriCiclos. “Fue precisamente en Davos que se lanzó uno de los estudios que llegó a la conclusión de que en el año 2050 iba a haber igual cantidad de toneladas de plástico que de peces”, afirma.

TriCiclos hoy

En la actualidad TriCiclos está en Chile, Brasil, Colombia y Perú. En 2018 hicieron un levantamiento de capital, en el que ingresaron fondos colombianos y chilenos, lo que permitió la expansión y el fortalecimiento del área de innovación, cuenta De La Cerda. “Estamos digitalizando muchos de los productos que nosotros vendemos en esta corrección del diseño”, señala sobre su oferta a las empresas para rediseñar sus productos para generar menos impacto ambiental. “Tenemos ahí una serie de conocimientos y de tecnología para aportarle a esa empresa de manera de hacer su producto más circular”.

Esta ronda de levantamiento de capital es la segunda en la historia de la compañía. En 2014 realizaron la primera, liderada por un fondo brasileño, que les permitió realizar la expansión a Brasil. ¿Por qué ahí? “Es un país con esta misma problemática [pero] a nivel magnificado, con un nivel de población enorme, además con un desafío gigante, que tiene que ver con los recicladores de base”, explica De La Cerda.

¿Qué hace TriCiclos?

La empresa tiene fundamentalmente dos líneas de negocios, que ellos definen como “aguas arriba” y “aguas abajo”.

Aguas abajo se refiere a la gestión de residuos reciclables, donde cuentan con clientes como retailers o marcas de consumo masivo que financian las operaciones de puntos limpios, y donde tienen contacto con los consumidores y usuarios, y con todos quienes quieren instalar un cambio cultural. También en esta área tienen como clientes a municipalidades, para las cuales gestionan sistemas de reciclaje.

“Gran parte del valor que podemos crearle a las empresas está en lo que llamamos ‘aguas arriba’, y son proyectos de consultoría o de desarrollo de tecnología […] de tal manera de ayudarlos a prevenir la generación de residuos”, cuenta De La Cerda. Las posibilidades de mejora de los productos pasan, por ejemplo, por el empaque, donde se puede reducir impacto, hacerlo más reciclable o incluso replantearse la necesidad de la existencia de un empaque.

De La Cerda destaca la importancia de la trazabilidad en el reciclaje, y explica que en TriCiclos los materiales se enfardan y se codifican, para poder ordenar rutas por materiales y hacer seguimiento. La idea, dice, es poder hacerse cargo realmente de la disposición final de esos desechos, y que no vayan a parar a un vertedero en vez de la planta de reciclaje.

Vea el video de la conversación completa en PAUTA Bloomberg acá: