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Se dispara la reprobación de Bolsonaro por los incendios en la Amazonía

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Bloomberg
POR Maria del |

La crisis en la Amazonía ha disparado los cuestionamientos al mandatario por sus políticas en ámbitos como el medio ambiente, la salud y la educación.

El índice de reprobación del presidente Jair Bolsonaro aumentó en los últimos seis meses dado que los brasileños se oponen a sus políticas ambientales, educativas y de salud, así como a los comentarios ofensivos que forman parte de su estilo de comunicación.

El índice de reprobación personal de Bolsonaro alcanzó 53,7%, según una encuesta realizada por MDA entre el 22 y el 25 de agosto, cuando los incendios de la Amazonía potenciaron un creciente escrutinio nacional e internacional de sus políticas ambientales. Menos de un tercio de los brasileños desaprobaban al presidente en febrero, en una encuesta anterior. El porcentaje de la población que se opone a su gobierno aumentó a 39,5%, desde 19%.

Ocho meses después de su posesión, la popularidad de Bolsonaro se ha visto afectada por un malestar económico prolongado que mantiene el desempleo en dos dígitos. Pero su peor desempeño se registró en las áreas de la salud, el medio ambiente y la educación, según la encuesta. Entre sus peores actos como presidente, los encuestados mencionaron su decreto que facilita la posesión de armas, así como sus comentarios “inadecuados y ofensivos”. La congelación de los fondos para la educación llegó en tercer lugar.

La mayoría de los brasileños desaprobó la reforma pensional que su gobierno impulsa en el Congreso, y 72,7% de ellos considera que es inadecuado que Bolsonaro contemple nominar a uno de sus hijos como embajador en EE.UU.

Entre sus logros, 29,6% de los encuestados citó la lucha contra la corrupción y 27,5%, sus políticas de seguridad. Sin embargo, 22,4% dice que no ha visto ningún desarrollo positivo en absoluto.

“El gobierno de Jair Bolsonaro se enfrenta a dificultades que la población ha percibido, particularmente relacionadas con la lenta recuperación económica”, dijo la Confederación Nacional de Transporte, que pagó la encuesta. “Sin embargo, los brasileños todavía esperan que su gobierno pueda resolver los problemas del país”.