Exdirector de la ANI por juicio del caso Bombas: “El tribunal debiese convertir la pena de 150 años en una de presidio perpetuo”
En Radio Pauta, el abogado y exdirector de la Agencia Nacional de Inteligencia, Gonzalo Yuseff, sostuvo que “el único mecanismo que tienen las sociedades modernas para prevenir estos eventos son las sanciones y su eficacia. Más que una cuestión personal, hay que entenderlo como una función ejemplificadora de la pena”.
Este martes 18 de julio comenzaron los alegatos de apertura en el juicio oral en contra de Mónica Caballero y Francisco Solar, imputados por el envío, colocación y detonación de artefactos explosivos entre 2019 y 2023, en el marco del caso Bombas.
Caballero arriesga una pena 25 años de cárcel por su vinculación con una explosión en Vitacura. En tanto, Solar se expone a una condena de 150 años por tres hechos: la bomba dirigida al exministro del Interior, Rodrigo Hinzpeter, el artefacto que detonó en una comisaría de Huechuraba y un explosivo encontrado en Las Condes.
Exdirector de la ANI por juicio del caso Bombas: “El tribunal debiese convertir la pena de 150 años en una de presidio perpetuo”
En conversación con Pauta Final, de Radio Pauta, el abogado y exdirector de la Agencia Nacional de Inteligencia (ANI), Gonzalo Yuseff, sostuvo que “la pena más alta es el presidio perpetuo. El tribunal debiese convertir esa pena de 150 años en una pena de presidio perpetuo”.
“Yo no sé si sea justo o no, pero creo que el único mecanismo que tienen las sociedades modernas para prevenir los eventos como estos son las sanciones y su eficacia. Más que una cuestión personal, hay que entenderlo como una función ejemplificadora de la pena”, afirmó.
El abogado explicó que “a lo menos desde el 2000 se han ido colocando bombas en Chile. Viéndolo en retrospectiva, se pueden sacar algunas conclusiones. Por ejemplo, que estas bombas urbanas las están colocando sujetos de ideología anarquista e insurreccional, porque lo que hay detrás de estos casos es la intención de producir efectos políticos”.
“En general, lo que se nota en estos casos es un componente importante, además del anarquismo, de conexión profunda con la ideología y muchos tienen un componente familiar complicado. Son personas que han abandonado su hogar a corta edad, que han pasado por instituciones, y han tenido conflictos con sus progenitores o las instituciones”, añadió.
En ese sentido, señaló que “quizás los que han colocado los artefactos explosivos más peligrosos y políticamente más radicalizados sean Solar y Caballero, sobre todo por el ataque al exministro del Interior”.
A juicio de Yuseff, el caso Bombas I fracasó debido a que “se politizó. No faltaban pruebas y se levantaron tesis de montaje. El error fue politizarlo. Ahí se pudrió la cosa, porque evidencia había”.
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