Dictan prisión preventiva para Álvaro Jalaff, mientras que su hermano mantiene arresto domiciliario

La medida surge luego que la Primera Sala de la Corte de Apelaciones estimara que Álvaro Jalaff es un “peligro para la investigación” por lo que volverá a Capitán Yáber.
La tarde de este lunes 3 de febrero, la Corte de Apelaciones de Santiago acogió la apelación de la Fiscalía Metropolitana Oriente y revocó, parcialmente, la resolución del pasado jueves 23 de enero, con la cual los hermanos Jalaff, quienes están siendo investigados por el denominado Caso Audios, quedaron con arresto domiciliario. Álvaro con la medida domiciliaria total, mientras que Antonio con arresto domiciliario nocturno.
Medida que surge luego que el fiscal Miguel Ángel Orellana argumentara que la resolución del Tribunal de Garantía no consideró la totalidad de los antecedentes presentados en la formalización, minimizando la evidencia aportada por el Ministerio Público.
En ese sentido, destacó que no se trataba únicamente de un chat entre Álvaro Jalaff y María Leonarda Villalobos, sino que existía un conjunto de pruebas que incluían declaraciones clave, transferencias de dinero y comunicaciones que corroboraban la participación de los imputados en el esquema delictivo.
Dictan prisión preventiva para Álvaro Jalaff, mientras que su hermano mantiene arresto domiciliario
Además,insistió en que ni Jalaff ni Villalobos han prestado una colaboración sustancial y que, por lo tanto, no corresponde otorgar atenuantes ni modificar las medidas cautelares.
En dicha instancia, el fiscal además enfatizó en el riesgo de fuga de Álvaro Jalaff, subrayando la gravedad de los delitos imputados, la posible condena de cumplimiento efectivo y su condena previa ocurrida en 2002.
Desde la defensa de Álvaro, señalaron que este último argumento es “otro veneno típico de una estrategia no muy sana”, agregando que “ese hecho ocurrió hace 21 años, cuando él tenía 21 años. Porque no es, como dijeron, una persona con las calidades que insinuó la abogada del Consejo de Defensa del Estado. No. Cualquier persona puede haber tenido este problema (…) además, todo eso está prescrito, pues ocurrió hace 21 años”.