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John Müller y los 100 días de Donald Trump: “Más que sacar al país de una depresión, lo está llevando al suelo”

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POR María Alejandra Gallardo Contreras |

El periodista comparó el inicio del gobierno del expresidente republicano con el de Roosevelt, apuntando a una gestión marcada por decisiones unilaterales, desinstitucionalización y una peligrosa visión mesiánica del poder.

Cien días han pasado desde el inicio del segundo mandato presidencial de Donald Trump, y mientras el propio mandatario los celebra como “el comienzo más espectacular de la historia“, el mundo mira atento y con preocupación las decisiones que ha adoptado y el impacto que tienen sobre el orden internacional, la democracia en Estados Unidos y la estabilidad de alianzas claves.

A lo largo de este arranque, el gobierno ha intensificado su retórica contra organismos multilaterales, endurecido su política migratoria y emprendido una ofensiva regulatoria que pone en jaque avances medioambientales y de derechos civiles y que ha generado un clima político aún más polarizado.

Estas señales no solo reafirman el sello ideológico de su administración, sino que delinean una presidencia que, lejos de moderarse, apuesta por consolidar una transformación estructural del Estado bajo el lema “América primero”, aún a costa de tensar el equilibrio institucional y la proyección global del país.

John Müller y los 100 días de Donald Trump: “Más que sacar al país de una depresión,  lo está llevando al suelo ”

En Primera Pauta de Radio Pauta, el periodista y columnista,  John Müller, a través de un agudo análisis, trazó paralelos históricos, enumeró medidas controversiales y advirtió sobre el carácter disruptivo, y no necesariamente eficaz, del nuevo ciclo trumpista.

El concepto de los cien días se inició con Roosevelt en 1933, quien dictó 15 leyes importantes para sacar al país de la Gran Depresión. A diferencia de él, Trump está metiendo al país en una recesión. Roosevelt se encontró un país en el suelo, y Trump está llevando al suelo un país que estaba funcionando”, sostuvo Müller.

Órdenes ejecutivas, desinstitucionalización y un liderazgo mesiánico

A juicio del periodista, el inicio del gobierno de Trump ha estado marcado por una preocupante acumulación de poder. “Ha dictado 142 órdenes ejecutivas en este período. No pasan por el Parlamento, se atrinchera en decisiones para soslayarlo”, explicó.

Esto contrasta con sus antecesores; por ejemplo, Joe Biden firmó 42 órdenes ejecutivas en el mismo lapso y Roosevelt optó por la vía legislativa.

Más allá de los números, Müller subrayó una atmósfera de desinstitucionalización. “Ha despedido a cientos de miles de empleados públicos, recortado la ayuda exterior y paralizado programas científicos. Ha purgado el Departamento de Estado, nombrado a aliados en el FBI y el Departamento de Justicia, y ha usado estas instituciones para perseguir adversarios políticos“, denunció.

Uno de los elementos más alarmantes para el analista es la autopercepción casi divina que Trump tendría de su rol. “En la Casa Blanca ha puesto dos fotos suyas,  una de su ficha policial, con el ceño fruncido, y otra tras el atentado fallido donde aparece ensangrentado. Eso demuestra que se siente como una persona iluminada, que cree que Dios le ha asignado una misión“, advirtió.

Crisis internas, políticas polémicas y caída en las encuestas

En esa línea, Müller cuestionó el relato de grandeza que Trump ha intentado instalar. “Él dice que es el mejor gobierno de la historia, pero lo que ha demostrado es que no está claro si es un hombre serio, si está en sus cabales, o si sabe lo que está haciendo”, afirmó.

El balance de estos 100 días incluye también políticas que han generado tensiones globales y crisis internas. Según Müller, Trump “ha sido durísimo con la inmigración, deportando erróneamente a personas inocentes“, y ha mostrado “un uso instrumental de las criptomonedas para enriquecer a su esposa y a él mismo”.

Consultado por el supuesto interés del mandatario en convertirse en papa, una afirmación que Trump deslizó como broma, pero que algunos republicanos aplaudieron, el analista fue tajante y dijo que “esto habla de alguien que vive en un mundo paralelo. El problema es que no hay nadie que le diga ‘deja de decir tonterías’, como cuando una madre corregía con una zapatilla. Hoy falta eso en el mundo”.

Finalmente, Müller sostuvo que aunque Trump mantiene una base leal, los efectos de su gestión ya empiezan a reflejarse en las encuestas. “Ha bajado al 38-39% de apoyo, sobre todo por el tema económico. Incluso sus seguidores más fervientes han empezado a guardar silencio sobre los aranceles, que reconocen como un error“, puntualizó.