Cómo enfrentar el déficit habitacional: encargados de Vivienda de Jara y Kast exponen sus propuestas en La Mesa de Todos

En Pauta Propia, Iván Poduje y Cristián Castillo presentaron sus planteamientos para abordar la falta de viviendas y agilizar los procesos de construcción. Junto a Claudio Barros, de la Cámara Chilena de la Construcción, analizaron la burocracia, el uso del suelo y los mecanismos de financiamiento que podrían impulsar una mayor oferta habitacional.

A pocos días de la segunda vuelta presidencial, La Mesa de Todos de Pauta Propia reunió a los encargados programáticos del área de vivienda de ambas candidaturas: Iván Poduje por el comando de José Antonio Kast, Cristián Castillo por el de Jeanette Jara, y al presidente del Comité de Vivienda de la Cámara Chilena de la Construcción (CChC), Claudio Barros. El objetivo: discutir cómo enfrentar una paradoja habitacional que combina récords en construcción con un déficit que no cede.

Un déficit que podría llegar a dos millones

Claudio Barros planteó que el país enfrenta una brecha que sigue creciendo: “Desde la Cámara y a través del estudio de Casen, nosotros vemos que hay un déficit actual de cercano al millón de viviendas y proyectando dos millones para el 2035“.

El presidente del Comité de Vivienda de la CChC advirtió que el problema se agrava por la “alta desconexión entre los ingresos de las personas y el aumento de costos de las viviendas”, sumado a las las “múltiples regulaciones y los aumentos de costos en distintos materiales, insumos y mano de obra”. 

Propuestas desde ambos comandos

El encargado de Vivienda del comando de Jeanette Jara, Cristián Castillo, destacó la necesidad de una mayor diversidad en la oferta habitacional, ya que según aseguró, la oferta del Ministerio de Vivienda “está demasiado centralizada y radicalizada en un tipo de sociedad que ya en Chile no existe”.

“Nosotros hemos trabajado la ampliación de nuestra oferta con un sistema muy sencillo que es buscar la diversidad de la oferta de viviendas que el Estado le entrega a la población. Y eso representando lo que la sociedad chilena hoy día es en su tamaño y composición”, explicó el arquitecto. 

“Ya no es la familia del padre, la madre y los tres hijos (…) Nosotros hemos logrado entender que la oferta que teníamos de solución del déficit habitacional para el gobierno de Jeannete Jara, la podíamos aumentar sin necesariamente tener que invertir más dinero. Y en ese sentido nosotros hemos aumentado nuestra oferta de 260.000 viviendas a 400.000 durante el periodo presidencial”, agregó.

El enfoque, explicó, apunta a incorporar soluciones para “parejas jóvenes, familias monoparentales y comunidades de tercera edad”.

Por su parte, Iván Poduje, encargado programático de José Antonio Kast, también señaló que apuestan por aumentar la oferta y enfatizó medidas de desburocratización y eficiencia:

“Tenemos una propuesta para los primeros 90 días que contempla simplificar o modificar 15 decretos y sus cuadros normativos, particularmente el cuadro normativo de la vivienda más barata o la más vulnerable, que es el decreto supremo 49, que exige una locura en materia de tramitación y evaluación”, aseguró 

“La idea es reducir la aprobación de proyectos de 18 a tres meses“, agregó.

Además, propuso crear un “decreto de catástrofe” para responder a emergencias, un “decreto de intervención en barrios críticos” y un “subsidio de terreno” que permita a las familias construir sobre suelo urbanizado, “y sobre ese terreno después un segundo subsidio, ya sea para comprar una vivienda prefabricada o construir”.

El debate por los terrenos fiscales y privados

Otro punto abordado en la conversación fue la discusión sobre cómo aprovechar los terrenos fiscales y privados para enfrentar el déficit habitacional. Mientras el comando de Jeanette Jara propone nuevas fórmulas de colaboración entre el Estado y distintos propietarios, desde el equipo de José Antonio Kast defienden que las viviendas deben mantenerse bajo propiedad familiar y no en régimen de arriendo.

Castillo destacó que Bienes Nacionales posee “una cantidad de hectáreas urbanas enorme”, que según comentó “tiene que estar a disposición no solo de la vivienda sino también de los programas sociales que el Estado tenga”.

Y apuntó a la falta de coordinación estatal: “El Estado no termina de funcionar unido en torno a un proyecto de gobierno. Cada ministro defiende su área, lo cual dificulta muchísimo lograrlo”, aseveró.

Su propuesta: crear sociedades mixtas entre el Estado y los propietarios de suelo —incluidas instituciones como las Fuerzas Armadas o universidades— para desarrollar “proyectos de vivienda de arriendo justo”.

Por su parte, Poduje postuló que los terrenos públicos deben destinarse a propiedad familiar: “Entre instituciones del Estado la transferencia debería ser no onerosa. Estamos de acuerdo con Cristian en hacer alianzas entre, por ejemplo, la Universidad de Chile, pero nosotros no estamos de acuerdo con el arriendo”.

“Queremos que todas las viviendas sean de propiedad, como se están entregando en La Platina, en La Pintana, que son casas y departamentos, un proyecto estupendo, mixto, pero que avanza muy lento”, añadió.

Explicó que lo anterior ocurre porque el Serviu, “está vendiendo terreno a precios de mercado, y tenemos en los bordes de La Platina a la familia, hacinada esperando. Entonces, no tiene lógica eso en terrenos públicos”. 

Financiamiento y reactivación

El debate también abordó cómo financiar el plan habitacional y acelerar la ejecución de viviendas sin comprometer la sostenibilidad fiscal. Los invitados coincidieron en que la burocracia y los tiempos de tramitación siguen siendo uno de los mayores obstáculos para la construcción y la inversión en el sector.

Barros coincidió en que “la burocracia es inentendible” y que la permisología encarece los proyectos hasta en un 15%..

Castillo sostuvo que el programa de su candidatura “es financiable con el presupuesto actual”, pero que solicitarán 1.500 millones de dólares anuales adicionales para impulsar el plan habitacional.

Poduje replicó que “más recursos no hay” y que el desafío no pasa por aumentar el gasto fiscal, sino por hacer más eficiente el sistema. Explicó que lo que pretenden es “generar ahorro en burocracia“, con el objetivo de reducir entre un 12 y un 15% los tiempos y costos de tramitación.

En esa línea, propuso agilizar los procesos de aprobación y recurrir al Fondo de Garantía Estatal (FOGAES) como una herramienta clave para movilizar la inversión privada.

Mira el debate completo en el video adjunto en la nota y conoce en detalle las propuestas de ambos comandos en torno al desafío habitacional más urgente del país.