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Javier Couso sobre caso Vivanco: ” Si se probara prevaricación en una ministra de la Corte Suprema, sería un hito histórico”

POR María Alejandra Gallardo Contreras |

El abogado constitucionalista analizó en Primera Pauta las aristas del caso Vivanco, el deterioro de la confianza en la imparcialidad judicial y las reformas estructurales que, a su juicio, el sistema político sigue postergando pese a la crisis.

En Primera Pauta de Radio Pauta conversamos con el abogado constitucionalista y director del Doctorado en Derecho de la Universidad Diego Portales,  Javier Couso, quien calificó el momento que atraviesa el Poder Judicial como uno de los más delicados desde el retorno a la democracia.

Aseguró que la seguidilla de episodios que involucran a integrantes de cortes superiores ha generado un clima de desconfianza que se arrastra hace más de un año, con revelaciones periódicas que golpean la percepción de imparcialidad.

Una crisis que desafía la imparcialidad y el funcionamiento del Poder Judicial

Couso advirtió que la situación de la exministra Ángela Vivanco podría marcar un antes y un después. Señaló que la querella de capítulos abre un proceso inédito que podría desembocar en una formalización.

En ese eventual escenario, afirmó que “si se probara prevaricación en una ministra de la Corte Suprema, sería un hito histórico”, y un signo muy triste para la institucionalidad, pues nunca antes un integrante del máximo tribunal ha enfrentado una condena por ese delito.

Aunque enfatizó que la mayoría de los jueces son probos, reconoció que las remociones recientes, los casos de corrupción y los cuestionamientos éticos han tenido un efecto devastador sobre la moral interna: “Es muy lamentable, es como un desangramiento por goteo.”

Relató que magistrados de base se sienten desalentados al ver que quienes influyen en sus carreras están bajo investigación o han incurrido en prácticas que dañan la credibilidad del sistema.

Reformas postergadas y una estructura judicial que ha hecho crisis

El académico también apuntó a fallas estructurales: un Código Orgánico de Tribunales obsoleto, un sistema jerárquico donde la Corte Suprema administra la carrera judicial y una tendencia a refugiarse en legalismos frente a cuestionamientos éticos.

“En Chile tenemos una estructura de gobierno judicial jerárquica que ha hecho crisis” señaló, lo que a su juicio, requiere una reforma profunda, pero el sistema político no ha mostrado voluntad para priorizarla.

En este contexto, la elección de la nueva presidencia de la Corte Suprema adquiere relevancia simbólica. Couso sostuvo que una figura con trayectoria de integridad enviaría una señal necesaria, aunque advirtió que la verdadera solución pasa por modernizar reglas y resguardar la imparcialidad, pilar que considera hoy en crisis.