Periferia y ruralidad, los lugares de la ciudad que están en deuda en accesibilidad

En Ciudad Pauta, el presidente de la Fundación Chilena para la Discapacidad, Matías Poblete, sostuvo que “hemos tenido avances en los últimos siete años, porque hay normativa que hoy regula la accesibilidad en las ciudades, que son los espacios de uso público. Sin embargo, todavía queda harto en qué avanzar”.

En junio pasado se lanzó el primer Observatorio Chileno de los Derechos de las Personas con Discapacidad, que busca entregar información sistematizada para facilitar la búsqueda, obtención y la lectura de datos relevantes que permitan conocer la realidad nacional de las condiciones bajo distintas dimensiones en las que viven las personas con discapacidad en Chile.

En conversación con Ciudad Pauta, de Radio Pauta, el presidente de la Fundación Chilena para la Discapacidad, Matías Poblete, analizó los avances y retrocesos de la accesibilidad en las ciudades.

Periferia y ruralidad, los lugares de la ciudad que están en deuda en accesibilidad

A juicio de Poblete, “hemos tenido avances en los últimos siete años, quizás un poco más, porque hay normativa que hoy regula la accesibilidad en las ciudades, que son los espacios de uso público. Sin embargo, todavía queda harto en qué avanzar, porque hay muchas diferencias entre las zonas capitales, las comunas que son aledañas, y cuando nos vamos acercando a la periferia cada vez hay menos accesibilidad”.

“Hay mucho esfuerzo de Senadis en entregar sillas de ruedas a las personas en discapacidad. Lo mismo hacen los alcaldes, les gusta mucho hacer estas gestiones, hay harta foto en redes sociales. Pero si después no puede transitar por las veredas y ni siquiera salir de su casa, eso es poco efectivo”, señaló.

Según el presidente de la Fundación Chilena para la Dispacidad, “las soluciones que se adoptan en materia de discapacidad muchas veces son soluciones aisladas, son ideas de planes de gobierno que nacen de mesas de trabajo entre personas que piensan igual. Y los gobiernos resguardan mucho no mostrar que están tan mal. Desde ahí, muestran una parte o se hacen cargo de una parte de las cosas, y cuesta que se muestre la realidad completa”.

“Nosotros como fundación queremos llevar adelante esta iniciativa de manera público-privada. Hemos recogido información desde instituciones del Gobierno, desde otras instituciones públicas, y estamos trabajando también con la sociedad civil y las universidades. Queremos que toda esta información pueda converger en una respuesta que se pueda dar a la ciudadanía”, agregó.

Para Matías Poblete, “tampoco es que todo esté tan mal. Hay muchas cosas que están bien, pero no se saben. A veces está esa sensación de que no se ha hecho nada, pero se ha hecho bastante”.

“En legislación tenemos cosas muy buenas, muy bien valoradas en la región, pero falta fiscalización. El problema de la fiscalización, eso sí, no es sólo un problema en Chile, y generalmente lo que ocurre es que en los países donde hay una legislación que funciona mejor, tiene que ver con la cultura de ese país que está orientada a cumplir las normas, más que una fiscalización mayor a la que uno conoce en nuestro país”, declaró.

Poblete sostuvo que “cuando miramos la ciudad, donde es más latente la falta de accesibilidad es en las zonas periféricas. Por ejemplo, si miramos el Metro, en las zonas más centrales, hay buena accesibilidad. Pero si te desplazas por la línea 4A, que se aleja del centro, hay muy mala accesibilidad. Las líneas nuevas tienen accesibilidad porque son nuevas”.

“También hay una diferencia muy marcada en los lugares que son más pobres y en las zonas rurales, donde hay menos accesibilidad e inversión pública. Recién estamos viendo muestras muy incipientes, pero a veces son más bien decorativas, en cuanto a la accesibilidad en parques públicos o reservas naturales”, aseguró.

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