Valle Nevado en el tiempo: pasado, presente y futuro del centro de esquí más joven de Santiago

Valle Nevado es uno de los centros de esquí más nuevos de Santiago. El complejo, ubicado a 64 kilómetros de la ciudad, nació en los ’80 de la mano del arquitecto y esquiador Eduardo Stern que, junto a un equipo de franceses, vieron en los faldeos del cerro El Plomo una oportunidad de replicar lo que habían visto en los Alpes.

En conversación con Ciudad Pauta, de Radio Pauta, el gerente general de Valle Nevado, Ricardo Margulis, se refirió al pasado, presente y futuro del centro de esquí y su aporte en la ciudad.

Valle Nevado en el tiempo: pasado, presente y futuro del centro de esquí más joven de Santiago

Respecto al origen de Valle Nevado, Margulis comentó que durante un postgrado en Grenoble, Francia, Stern “se contactó con arquitectos que habían hecho centros de esquí. Él tenía esta visión de un valle que siempre tenía nieve. Con eso, contactó a franceses que eran dueños de centros de esquí cerca de Grenoble, los dueños de los terrenos e hizo también el match con una empresa que vino a construir una represa”.

“Él vio que desde los centros vecinos se podía ver este valle con mucha nieve, y ve una oportunidad ahí de crear un destino de turismo internacional, y hace los contactos para hacer un centro de esquí a una escala distinta de lo que había en ese momento en Chile, y particularmente en las cercanías de Santiago, donde el único centro de esquí que tiene hotelería es Valle Nevado”, recordó.

En ese sentido, detalló que el complejo cuenta con tres hoteles para distintas categorías de público. El más exclusivo de ellos es el Hotel Valle Nevado. Lo sigue el lugar de hospedaje más grande, el Hotel Puerta del Sol, que cuenta con 125 habitaciones y está orientado hacia familias. Y para el público juvenil, existe el Hotel Tres Puntas. En relación a este último, relató que “inicialmente era alojamiento para el personal cuando se construyó el centro. Se dieron cuenta de que había una oportunidad y lo transformaron en un hotel porque había una demanda que no estaba tan satisfecha”.

Sobre el presente de Valle Nevado, el gerente general remarcó que “ofrece la mejor escuela de esquí y snowboard que hay en Chile. Tenemos 140 instructores de diferentes edades, de muy buen nivel de esquí. También tenemos un rental de equipos y ropa. Tenemos cuatro o cinco restaurantes, bares y distintos panoramas para quienes no esquían”.

Según Ricardo Margulis, el espacio, que tiene pistas para principiantes, principiantes más avanzados, para los intermedios y para los más expertos, recibe comúnmente a huéspedes hoteleros, “que van entre los 30 y los 65 años. Van familias, grupos de amigos, de un perfil socioeconómico equivalente al ABC1 chileno. Son principalmente brasileros y de Estados Unidos”. Pero también existe “un esquiador extranjero que aloja en Santiago y sube por el día. Sea porque no tienen la plata para quedarse arriba, o porque vienen a conocer Chile y quieren esquiar”.

En relación al vínculo con Santiago, el ejecutivo destacó que “no es común tener en una ciudad centros de esquí tan cercanos y tampoco que la capital de un país esté a una hora en auto de tres centros de esquí. Normalmente los centros están cerca de pueblitos de montaña o ciudades más pequeñas. Esto es extraordinario”.

“Hay gente que esquía en Valle Nevado y vuelve a dormir a Viña, se puede hacer esa combinación que es bastante única en el mundo”, agregó.

A juicio de Margulis, “la montaña es muy bonita en invierno y verano” y no ha sufrido cambios en el paisaje con la sequía. “La montaña que tenemos es una que una vez que se va la nieve, aparece una floración amarilla, naranja, roja, rosada, blanca. La verdad es que es un paisaje maravilloso. Esto pasa en primavera, desde octubre a diciembre. Después están los colores de los cerros, que como hay minerales, hay cerros verdes, cerros naranjos”, expresó. 

Gerente general de Valle Nevado y ruta a la montaña: “Lamento mucho que la empresa constructora haya desistido”

Cada invierno se reabre el debate en torno a las condiciones de la Ruta G21, que conecta Lo Barnechea con los centros de esquí. Existía un proyecto de mejora aprobado en 2019, que fue adjudicado a una empresa constructora, que al tiempo desistió de ejecutarla.

Para el gerente general de Valle Nevado, “esa ruta es una vergüenza para el desarrollo que ha tenido el turismo en Chile. Cada vez hay más gente que va a conocer la nieve, pero el camino colapsa. El país no se merece ese camino”.

“A la playa, donde el mar no es muy atractivo turísticamente, tenemos unas rutas estupendas, y a la montaña tenemos un camino que no merece”, recalcó.

Ricardo Margulis sostuvo que “lamento mucho que la empresa constructora haya desistido de construir. El tema ambiental aparentemente demoró más y había una cláusula que les permitía salir. Creo que entre que se adjudicó y hoy, con la pandemia entre medio, los costos de construcción subieron bastante, así que probablemente ya no era tan rentable para ellos ejecutar la obra”.

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