El plan piloto para erradicar 100 campamentos comienza en Puente Alto
En Los Areneros se inició el “Desafío 100+100”, un programa liderado por el Minvu cuyo objetivo es la habilitación se servicios básicos en estos asentamientos y su posterior erradicación.
Ante el crecimiento dramático de los campamentos en Chile, acelerado por la crisis económica generada por la pandemia, el Ministerio de Vivienda y Urbanismo y el Ministerio de Desarrollo Social y Familia presentaron el “Desafío 100+100”, que busca gestionar el cierre de 100 campamentos durante este año, además de dar habitabilidad primaria a otros cien asentamientos.
Con este plan, impulsado por el Minvu a través de su Programa de Campamentos, se pretende beneficiar a 10 mil familias que viven en situación de campamentos y se busca constituirlo en una política pública que permita la gestión de cierre de 400 campamentos en los próximos cuatro años.
Para tal objetivo, ya se trabaja en un piloto en el campamento Los Areneros, en Puente Alto, que tiene 60 años de vida. Y si previo a la pandemia se encontraban cerca de 97 familias allí, hoy se contabilizan 204, según los datos de la ONG Espacio Lúdico, que trabaja en el piloto junto al Minvu.
Espacio Lúdico es una organización sin fines de lucro cuyo objetivo, desde 2016, es lograr innovación urbana ciudadana, generando transformación social y territorial inclusiva a través de la investigación, el diseño y la gestión de proyectos colaborativos.
En conversación con el programa Plaza Pauta, de Radio PAUTA, su coordinadora social, Macarena Fernández, contó detalles de cómo operan en Puente Alto. “Estamos trabajando en la habitabilidad primaria de este asentamiento precario que es uno de los más antiguos de la Región Metropolitana. Las calles, las aguas y electricidad son soluciones primarias generadas por los pobladores. Tanto el agua como la electricidad son tomas y recién hace un mes los vecinos tienen luz estable. Y el sistema de agua no permite una repartición equitativa, sino que depende del lugar en que se emplaza la vivienda. Son casas muy básicas, caminos de tierra y mucha circulación de camiones”, describió Fernández sobre esta zona de la ribera del Río Maipo, frente a Pirque.
Total vulnerabilidad
Fernández detalló, además, que durante la pandemia los pobladores no han podido salir a trabajar y han subsistido a través de los bonos del Estado. Cuentan con pequeños negocios de verduras, carne y otras provisiones. “Estamos junto a los vecinos trabajando a nivel calle y vamos a intervenir de distintas formas: accesibilidad, una red de seguridad de agua, debido a la cantidad de incendios que se han producido, y vamos a capacitarlos respecto del uso y cuidado del agua. El objetivo es que todas las intervenciones sean sostenibles”.
Otro ítem serán los paneles fotovoltaicos. “Serán 10. Seis en la cancha deportiva y cuatro en los puntos más críticos del campamento”.
Revise la entrevista completa con Macarena Fernández