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El nuevo límite para las familias haitianas

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POR Rafaela Lahore |

A partir del 2 de julio los haitianos que tengan un familiar en Chile y que quieran venir al país podrán solicitar una visa de reunificación familiar. Reina la confusión.

Lo primero que el haitiano Georges Chedlove, de 28 años, dice al teléfono es: “Las cosas en Chile son muy difíciles. Yo quería hacer mi vida con mi señora, pero Chile está muy lejos, así que tengo paciencia para ver cómo hacer los trámites para que venga. Todavía no tengo la posibilidad, pero quiero que los chilenos me la den”. Lo dice porque aún no puede costear los trámites ni los gastos de su venida, por no tener un buen trabajo. Vive desde hace siete meses en Chile y desde hace una semana trabaja todo el día pintando un galpón. Asegura que por ser haitiano le suelen pagar menos. “Si pagan $25.000 diarios, a nosotros nos pagan $15.000”.

Chedlove es uno de los tantos haitianos que quedó dividido. Su mujer está en Haití y él en Santiago. A partir de este 2 de julio, y si llegara a conseguir el dinero para el pasaje, solo podría traerla a Chile a través de una visa humanitaria de reunificación familiar.

Esta visa está pensada para que los haitianos que viven en Chile, y tienen su cónyuge, conviviente civil, hijos menores de edad y mayores que estudien hasta los 24 años viviendo en Haití, puedan traerlos legalmente. La visa tiene una validez de 12 meses y se puede renovar por una sola vez, lo que posibilita solicitar la residencia definitiva. Para postular a la visa, el familiar que vive en Haití debe presentar, además de su pasaporte, un certificado de antecedentes y una acreditación del vínculo familiar con el ciudadano que vive en Chile, confirman en el Departamento de Extranjería y Migración.

Confusión migratoria

La comunidad haitiana en Chile aún tiene gran incertidumbre sobre cómo se implementará este nuevo visado. Carl Abilhomme, vocero de la comunidad haitiana en el país, no tiene ninguna certeza. Él, que está ayudando a dos de sus compatriotas que quieren traer su familia a Chile, está expectante ante los lineamientos que dé el Departamento de Extranjería y Migración. “Estamos confusos. No sabemos por dónde empezar. Yo trato de reunir papeles para mostrar que están trabajando, que tienen su AFP pagada, todo lo que pudiera pedir”, dijo.

Pablo Valenzuela, director social de Servicio Jesuita a Migrantes, coincidió al cierre de esta edición que aún no existen lineamientos claros sobre cómo funcionará el visado. Durante el 2017 ingresaron más de 110.000 haitianos a Chile, pero según se ha anunciado, el límite de visas será de 10.000 visas anuales. Ante la falta actual de información, Valenzuela se pregunta en base a qué criterio se establecerá la prioridad cuando se otorguen. Cree que el riesgo de que eso no esté definido es que puede llegar a ser discrecional. “Y la discrecionalidad es pariente cercana de la discriminación”, aseguró.

A diferencia de lo que se había anunciado, y de lo que aún aparece en el sitio web de Extranjería, la visa no deberá tramitarse ante el Consulado de Chile en Haití, sino en las oficinas de la Organización Internacional para las Migraciones de Puerto Príncipe. El abogado Mijail Bonito, asesor en temas migratorios de la Subsecretaría de Interior, asegura que este órgano intergubernamental tiene gran experiencia en este tipo de visados. Son, también, quienes en Haití se encargan de preparar las visas para los haitianos que quieren emigrar a Brasil.

Bonito no da por sentado que la cifra de solicitudes sea mayor a la que han estimado. “El Presidente ha indicado que se abran 10 mil cupos y se irá analizando cuál es el flujo real, porque a pesar de que en 2017 superamos los 100 mil haitianos que ingresaron a Chile, cuando abrimos el visado de turismo tuvimos menos de 50 postulaciones”. La cifra, asegura, se ha definido en base a parámetros internacionales en este tema. “Lógicamente, como es una estimación y siempre tienen diferencias, a medida que vaya avanzando se irá analizando”, dijo.