¿Qué efectos produce el cambio de hora en la salud y por qué se realiza?
En Radio Pauta, te contamos el origen y lo que dicen los expertos de acuerdo al cambio de horario en Chile.
Cada año, Chile realiza el cambio de hora para adaptar sus relojes a las variaciones de luz solar entre verano e invierno. La medida busca reducir el impacto de la poca luz natural en la rutina diaria, aunque no está exenta de críticas: varios expertos han cuestionado su real efectividad y los motivos detrás de estos ajustes.
¿Desde cuándo se hace el cambio de hora en Chile?
El sistema actual de modificaciones —en abril y septiembre— está vigente desde 2019, cuando se fijó un calendario estable de ajustes.
Sin embargo, el origen del cambio de hora en Chile se remonta a 1968, año en que se implementó la medida para ahorrar energía eléctrica y aprovechar más la luz natural. En ese entonces, el objetivo era reducir el consumo de iluminación artificial y entregar más seguridad en las calles, disminuyendo riesgos de accidentes de tránsito y asaltos al contar con tardes más iluminadas.
Beneficios y críticas al cambio de hora en Chile
Entre los beneficios más destacados se mencionan:
- Ahorro energético: menor uso de luz artificial durante las tardes.
- Seguridad pública: reducción de delitos y accidentes gracias a calles más iluminadas.
- Mejor uso de la luz natural en la rutina laboral y escolar.
No obstante, también existen cuestionamientos, pues no todos los especialistas coinciden en que los beneficios compensen los efectos negativos en la salud.
¿Qué efectos tiene el cambio de hora en la salud?
De acuerdo con estudios de la Universidad de Chile y la Sociedad Chilena de Medicina del Sueño (SOCHIMES), el ser humano es una especie diurna que rinde mejor en horarios con abundante luz natural.
El horario de invierno busca que el sol aparezca más temprano, facilitando las actividades escolares y laborales. Sin embargo, la desincronización de los ritmos circadianos que provocan los cambios puede tener efectos adversos:
- Aumento de la presión arterial.
- Incremento de la frecuencia cardiaca.
- Mayor riesgo de problemas cardiovasculares.