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El premio más amargo: Luka Modric se quedó con el Balón de Oro

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POR Bruno Sampieri |

Desde 1994 que este premio no se lo lleva un campeón del mundo.

Al menos la FIFA hizo justicia. Luego del triunfo 4-2 de Francia y el título para los galos, la federación entregó los premios individuales a los jugadores más destacados del mundial. El Balón de Oro recayó en el mediocampista croata Luka Modric, un galardón que muchos pedían para un futbolista que fue clave en la histórica campaña de su selección.

El camino fue largo

Con 33 años, Modric consiguió el premio individual más importante de su carrera. Tuvieron que pasar 15 años desde su debut con el H. Š.K. Zrinjski de Bosnia y Herzegovina para que su gran rendimiento fuera reconocido.

El camino para el mediocampista no fue fácil, partiendo por las complicaciones que tuvo durante su infancia y cómo se vio desplazado por la guerra de los balcanes. Recién en 2008 tuvo su primer gran salto desde el Dinamo Zagreb al Tottenham Hotspur y su buen fútbol fue finalmente premiado en 2012 cuando, con 27 años, fue traspasado al Real Madrid.

En el cuadro merengue vivió sus mejores años. Se convirtió en pieza inamovible de un equipo con el que ganó cuatro Champions League, tres Supercopas de Europa, una Liga de España, una Copa del Rey y dos Supercopas de España.

Con la selección de Croacia debutó en 2006, sumando 114 partidos, 14 goles, 18 asistencias y, a pesar de que no ganó títulos, fue pieza clave para que su país se convirtiera en el subcampeón del Mundial, el mejor resultado hasta ahora de los balcánicos en este certamen.

El premio más triste

Pero su cara en la foto lo dice todo. No está feliz, no está conforme, no es lo que buscaba. Hace dos años, en una entrevista con Marca, Modric señaló que quería ganar algo con Croacia. Estuvo cerca, pero no lo logró.

En la previa de la final le preguntaron si se imaginaba rompiendo la dinastía Ronaldo-Messi al quedarse con el premio “The Best” de la FIFA, otrora Balón de Oro que entregaba junto a la revista France Football y que permia al mejor jugador de la temporada. “Lo repito, estoy enfocado solo en el éxito de mi selección. Es muy agradable estar entre los posibles candidatos, pero no me preocupan los premios individuales. Quiero que ganemos la Copa. El resto está fuera de mi control”, señaló.

A Modric no le importaba ningún premio individual, solo quería la Copa del Mundo. Sin embargo, el fútbol dijo otra cosa y tuvo que abrazar con desazón el Balón de Oro, tal vez imaginando que era esa copa que tanto soñó darle a su país.

Se extiende la maldición

Desde 1994, cuando Romario se quedó con el premio al mejor jugador del mundial, todos quienes se hicieron dueños del Balón de Oro no fueron ganadores de la competencia. Quizás, en algún momento se decidió entregarlo como un premio de consuelo.

En tres ocasiones, el premio fue para campeones del mundo: Paolo Rossi (España 1982), Diego Armando Maradona (México 1986) y Romario (Estados Unidos 1994). El resto de los galardones fue entregado a jugadores que no se quedaron con la copa. En dos ocasiones incluso se lo llevaron futbolistas que ni siquiera llegaron a la final: Salvatore Schillaci (Italia 1990) y Diego Forlán (Sudáfrica 2010).

  • España 1982: Paolo Rossi (ITA)
  • México 1986: Diego Armando Maradona (ARG)
  • Italia 1990: Salvatore Schillaci (ITA)
  • Brasil 1994: Romario (BRA)
  • Francia 1998: Ronaldo (BRA)
  • Corea-Japón 2002: Oliver Kahn (ALE)
  • Alemania 2006: Zinedine Zidane (FRA)
  • Sudáfrica 2010: Diego Forlán (URU)
  • Brasil 2014: Lionel Messi (ARG)
  • Rusia 2018: Luka Modric (CRO)