Deportes

La bomba de tiempo

Imagen principal
POR Andres Sepúlveda |

“Si la bomba de tiempo tiene que explotar que sea después del repechaje. José Letelier se ha ganado el derecho de tener una nueva oportunidad de recapacitar y rever sus decisiones”, dice Fernando A. Tapia.

La selección chilena femenina dejó una triste imagen tras su participación en la Copa América de Colombia. Un quinto lugar que muchos calificaron como un fracaso deportivo, aunque quizás habría que hablar de una decepción, ya que aún quedó abierta la posibilidad de alcanzar por segunda vez consecutiva un pasaje a una Copa del Mundo, a través de un repechaje.

Lo que es una realidad reconocida por todos los actores es que el equipo no estuvo a la altura, y que en relación con los rivales directos en el continente hay un estancamiento desde todo punto de vista. Chile se despidió del torneo de manera prematura, sumando dos triunfos, dos derrotas y un empate. En el último compromiso pudo superar a Venezuela apenas en la definición por penales, lo que le brindará una última posibilidad de asegurar un pasaje al mundial en una repesca que se disputará el próximo año.

En cualquier otra circunstancia nadie cuestionaría la continuidad del proceso que desde el 2016 encabeza el técnico José Letelier. Mal que mal ha sido él el responsable de haber llevado por primera vez a la roja femenina a una cita mundialista y a unos juegos olímpicos, y de tener, aún sin el brillo esperado, la opción de sumar una segunda participación mundialista consecutiva. Sólo desde la perspectiva histórica sus números son incuestionables.

Sin embargo, una vez finalizada la participación de Chile en Copa América, las duras declaraciones de la capitana y máxima referente del equipo, Christiane Endler, en contra de las decisiones del entrenador, han puesto una gran cuota de incertidumbre sobre la sobrevivencia del ciclo de Letelier: “No podemos jugar así”…”nos merecemos más que esto”…”no creo que los resultados pasen por nosotras”…”esperábamos una respuesta distinta desde el banco”, fueron algunas de las lapidarias frases que dejó la que es considerada la mejor portera del mundo.

Endler no se guardó nada, y dejó en evidencia su distanciamiento quizás definitivo con el entrenador, exponiéndolo abiertamente a la crítica y dejándolo vulnerable a la evaluación directiva que tendrá que definir su continuidad. Como en todo grupo humano, la interna de la selección femenina ha tenido que convivir también con divisiones, las que han quedado más que claras con la intervención de Tiane. No lo dijo directamente, pero es un hecho que la capitana no estuvo de acuerdo con la nominación de algunas de sus compañeras, especialmente de aquéllas que pese a no haber tenido continuidad en sus equipos, y no estar en su mejor momento físico, fueron igualmente convocadas. En Santiago, por ejemplo, se quedó la goleadora del torneo local, la jugadora de la “U” Sonya Keefe, cuyo aporte fue desestimado por Letelier. La falta de renovación es también un problema que persigue al equipo femenino, y en este caso se apunta al técnico como el responsable de no ver más allá de la base histórica de la selección.

En el desarrollo del torneo, José Letelier también mostró confusión con sus decisiones , provocando críticas por colocar a futbolistas fuera de sus posiciones naturales y, especialmente, por imponer un estilo considerado defensivo. Todo esto quizás le da la razón al juicio de Christiane Endler. De fondo, pero no de forma. No es la primera vez, es cierto, porque tras el mundial de Francia la arquera también provocó un remezón al cuestionar al técnico por no considerar a otras futbolistas durante el certamen. Podríamos hablar de un estilo frontal de la capitana, un modus operandi que no debiera causarnos sorpresa. Sin embargo ahora, empoderada aún más por su condición de mejor portera del mundo, sus palabras no son otra cosa que un misil para la continuidad de Letelier. Tiane es consciente del peso de su opinión. Sabe perfectamente que nadie se podría imaginar hoy al equipo sin ella. Su poder en relación con todo el resto es desigual, y por lo mismo la forma en la que dejó caer su crítica hacia el entrenador, que por contrapartida ha cultivado el bajo perfil, no es otra cosa que una bomba de tiempo. José Letelier ha sido notificado públicamente.

Su ciclo a cargo de la roja femenina tiene fecha de vencimiento. Los dirigentes tienen la última palabra para resolver cuándo. Deberán sopesar la interna del equipo, donde no todas comparten la opinión de la capitana, aunque, claro, ninguna con el peso específico de la jugadora del Olympique de Lyon. Lo que también debieran considerar es que faltan sólo apenas seis meses para el repechaje, que en el medio especializado no hay unanimidad respecto de un o una posible reemplazante, que traer a un entrenador o entrenadora del extranjero significaría una inversión extra para una ANFP en crisis económica y, especialmente, que el técnico hoy cuestionado es, sin duda, el más exitoso de la historia del fútbol femenino chileno, ganador de diez títulos nacionales, responsable de la única Copa Libertadores que ha ganado el país, y el que ha encabezado la época dorada de la roja femenina. Si la bomba de tiempo tiene que explotar que sea después del repechaje. José Letelier se ha ganado el derecho de tener una nueva oportunidad de recapacitar y rever sus decisiones.

Respeto se llama.

Fernando A. Tapia participa en Pauta de Juego, de Radio PAUTA, de lunes a viernes a partir de las 12:30 horas. Escúchelo por la 100.5 en Santiago, 99.1 en Antofagasta, y por la 96.7 en Valparaíso, Viña del Mar y Temuco, y véalo por el streaming en PAUTA.cl.