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El curioso caso de Gerardo Cortés: ¿Qué le pasó al gran talento del sur?

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POR Francisco Gomez |

Seleccionado juvenil en todas las categorías, su carrera se fue desvaneciendo luego de su paso por Colo Colo. Hoy juega en Colchagua, de la Segunda División profesional.

Alexis Sánchez en el norte y Gerardo Cortés en el sur. Ambos con 16 años ya sumaban minutos en Primera División. Ambos fijos en las selecciones chilenas Sub16, Sub17 y Sub20. Ambos con un talento precoz que deslumbraba. Pero uno se disparó y el otro quedó en el camino.

Cortés tiene hoy 32 años. Juega en Deportes Colchagua, de la Segunda División profesional y su gran anhelo es subir a Primera B. Lejos quedaron sus grandes años en la máxima competencia, su traspaso a Colo Colo y su sueño de ir a Europa.

“Esto es fútbol. Uno nunca sabe lo que puede pasar, ya sea con el tema de las lesiones u otras cosas. A mí nunca se me ha olvidado jugar a pelota, pero a veces simplemente las cosas no se dan”, comenta el futbolista.

El gran talento de Cortés empezó a destacar rápidamente. En 2007 hizo una excelente campaña en Deportes Concepción, siendo titular y uno de los mejores jugadores del torneo con 19 años. Sus actuaciones le valieron ser llamado al Mundial Sub20 de Canadá junto con Arturo Vidal, Gary MedelMauricio Isla y Alexis Sánchez. De hecho, ese año, de todo ese grupo mundialista, Cortés fue el jugador que más partidos de titular sumó en la Primera División chilena, con 36 presencias.

“Tuve una gran temporada en Concepción que me permitió ir a ese Mundial. En Canadá jugué en casi todos los partidos y fue una linda experiencia. Luego de eso fiché por Colo Colo, que tenía al colombiano Giovanni Hernández en mi posición. Me mandaron a préstamo a Unión Española y por suerte lo hice bien. Eso me permitió en 2009 regresar a Colo Colo para pelear un puesto”, recuerda.

El fallido regreso a casa que apagó la estrella

Con 21 años y jugando por el equipo más grande del país, comenzó a desvanecerse la figura de Cortés. Primero por una rotura del tendón de Aquiles, que lo tuvo seis meses sin jugar, y luego por problemas sicológicos.

“Ese tipo de lesiones comienzan a afectar tu cabeza lo quieras o no. Además, ese año tuve una oportunidad de partir a Italia que no se concretó. Eso te afecta, porque ves a tus compañeros de toda la vida en las selecciones menores, como Alexis o Isla que ya estaban en Italia, y que a ti se te escape la oportunidad de ir también, obviamente es complicado”, comenta.

Cortés nunca pudo consolidarse en Colo Colo. Tras regresar de su lesión comenzó un periplo en equipos como Palestino y San Marcos. En 2012 tomó la decisión de volver a Deportes Concepción, la que cataloga como el peor error de su carrera.

“Por temas familiares relacionados con mi hijo mayor, decidí volver a jugar a Concepción, pero tuve muchos problemas con Pablo Tallarico (expresidente de la entidad lila). Él me desvinculó del equipo porque supuestamente yo había llegado en estado de ebriedad a entrenar, pero eso nunca pasó. Lo hicieron para no pagarme”, cuenta Cortés sobre el incidente que marcó su carrera.

En esa oportunidad, el DT de Concepción, Germán Corengia, respaldó la decisión de la directiva y el hecho vinculó por varios años a Cortés como un jugador relacionado con actos de indisciplina. “Creo que el tiempo me dio la razón. Todo el mundo sabe qué clase de persona es Tallarico y todas las cosas en las que ha estado metido. Y en mi caso, nunca se ha vuelto a saber de nada parecido en mi carrera, pues nunca fue cierto”, sentencia.

Más allá de esa polémica, la carrera de Cortés fue en picada con irregulares pasos por Santiago Morning, La Serena, Coquimbo y Melipilla, hasta llegar a Colchagua.

Con 32 años es uno de los jugadores más experimentados de ese plantel. Al mirar su carrera y lo sueños que no se cumplieron, el “Cheo”, como le dicen sus amigos, no encuentra una explicación ni las razones por las que no siguió el camino de sus colegas de la “generación dorada”.

“Obviamente tengo esa espinita clavada. Siempre he creído que yo también tenía la capacidad de ellos, mal que mal compartimos años en las juveniles de la selección, pero por diversos motivos a mí no se me dio. ¿Por qué? No sé qué decirte. Evidentemente no fue lo que yo esperaba, pero esta profesión es así, pasan muchas cosas”.