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Soñando con estrellas: el ambicioso futuro de la MLS

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Créditos: @MLS/ Twitter
POR Francisca Vargas |

La liga de fútbol de EE. UU. se ha instalado como una de las ligas con mayor potencial en el mundo. Nuevos equipos, contratos millonarios y mercados atractivos para estrellas del fútbol.

La Major League Soccer, o simplemente MLS, es la liga número uno de fútbol en Estados Unidos. Fue fundada en 1993 con el fin de establecer una liga de primer nivel en el país a cambio de ser sede del Mundial de Fútbol de 1994, gracias a un acuerdo con la FIFA.

Desde ese entonces, los dirigentes del fútbol norteamericano han buscado convertir su competencia en una de las principales y más grandes ligas de fútbol del mundo, con clubes con inversionistas ambiciosos como un exjugador inglés, estadios cada vez de mejor nivel como el Mercedes Benz Stadium y mercados atractivos para cualquier jugador, gracias los buenos salarios y al espectáculo deportivo que rodea a todas las ligas estadounidenses.

Una de las principales distinciones de la MLS es la regla del “Jugador franquicia” o “Ley Beckham”. Faculta a los equipos a contar con tres jugadores que superen el tope salarial de la liga, con el fin de incorporar estrellas del fútbol internacional a las filas de la liga estadounidense.

La ambición norteamericana por contar con el mejor espectáculo y conjunto de estrellas en cada una de sus ligas ha logrado que grandes nombres aterricen en la MLS, muchos de ellos como jugadores franquicia. David Beckham fue el primer astro firmado bajo esta normativa, ganando alrededor de $6,5 millones de dólares por temporada con Los Angeles Galaxy. La condición de jugador franquicia fue replicada por figuras como Gonzalo Higuaín, “Chicharito” Hernández, Nani, Carlos Vela, Jonathan dos Santos y Blaise Matuidi.

Tal ha sido la creciente popularidad del fútbol estadounidense, que el mismo Beckham no dudó en invertir en este mercado y revolucionó la liga con la fundación del Inter Miami FC en 2018, siendo propietario mayoritario  del ambiciosos proyecto que, según reportes, tentaría a jugadores de talla mundial como Lionel Messi, Luis Suárez y Cesc Fábregas. Incluso Cristiano Ronaldo era del interés del exfutbolista inglés cuando se fundó el club de Florida.

Sin embargo, Beckham no ha sido el único que ha decidido invertir en el proyecto de la MLS. Russell Wilson, estrella de los Seattle Seahawks de la NFL, compró parte de los Seattle Sounders; James Harden, estrella de la NBA, compró el 5% del Houston Dynamo; Steve Nash, leyenda de la NBA, es uno de los dueños mayoritarios de los Vancouver Whitecaps; Magic Johnson también es uno de los dueños del LA FC, o Patrick Mahomes, también estrella de la NFL, quien se convirtió en co-dueño del Sporting KC.

La opción de jugar en Estados Unidos ha sido atractiva también para estrellas como Sergio Ramos, quien tendría interés muto con el LA Galaxy, además de Neymar, quien declaró que le gustaría jugar sus últimos años en la MLS, lo que generó una gran polémica ya que una de esos motivos eran sus extensas vacaciones entre cada temporada, dichos que el comisionado de la liga, Don Garber, condenó diciendo que no necesitan “traer a un jugador de renombre al final de su carrera porque decidió que quiere retirarse en la MLS”.

A pesar de ello, leyendas como Zlatan Ibrahimovic, Andrea Pirlo, Thierry Henry, Kaká, David Villa, Didier Drogba, Frank Lampard o Steven Gerrard han tenido pasos por la liga estadounidense

La figura del comisionado en las ligas deportivas estadounidense ha tomado fuerza en los últimos años, pues no es solo la mayor autoridad ejecutiva y cara visible de cada una, sino que también se enfocan en discutir materias como polémicas arbitrales, problemas de disciplina, económicos, sanciones y hasta posibles expansiones de las ligas. Roger Goodell (NFL), Adam Silver (NBA), Gary Bettman (NHL) y Don Garber (MLS) son los cuatro comisionados actuales en las grandes ligas de EE.UU.

El gran crecimiento de la Major League Soccer ha venido de la mano de la llegada de grandes estrellas y la construcción de estadios de talla mundial, tal es el caso del Mercedes Benz Stadium, con capacidad para 71.000 personas, perteneciente a los Atlanta Falcons de la NFL y al Atlanta United de la MLS. Los aficionados de este último han roto cada récord de asistencia en la liga, y en 2021 tuvieron el noveno promedio de asistencia más alto en todo el mundo, con un promedio de 43.964 espectadores por partido, siendo sus competidores más directos el Atlético de Madrid (43,005) y el  West Ham (45,867).

En 2021, los Seattle Sounders también tuvieron un gran promedio de asistencia, aunque lejos del récord de Atlanta, llevaron en promedio a 24.646 personas por partido. La recién comenzada temporada 2022 de la MLS arrancó con números más que prometedores: promediaron un 89% de asistencia en la primera semana, siendo nuevamente el Atlanta United el equipo que rompió el récord para más público en la fecha inaugural de la MLS, con 67.525 fans.

Con nuevas figuras en el radar, millones de dólares invertidos año a año y con la creciente popularidad del fútbol en Estados Unidos, también gracias a la prometedora selección adulta, como a la ya consagrada selección femenina, cuatro veces campeonas del mundo, el mercado futbolístico de la MLS espera seguir creciendo y sumar cada vez más estrellas para llamar la atención del mundo, y replicar en la MLS el espectáculo de estrellas que dominan en la NFL, NBA o MLB.