Rodrigo O’Ryan (Corma) advierte cierre de empresas ante nuevos aranceles de EE. UU. a la madera
El presidente de la Corporación Chilena de la Madera alertó en Radio Pauta que la medida impuesta por Estados Unidos afectará a parte del sector forestal chileno y pidió acelerar gestiones diplomáticas y reimpulsar el uso interno del material.
En Mercado Central de Radio Pauta conversamos con Rodrigo O’Ryan, presidente de la Corporación Chilena de la Madera (Corma), sobre las nuevas sobretasas que Estados Unidos aplicará a las importaciones de madera y manufacturas elaboradas con este material.
La medida, que entra en vigor este martes, impone un 10 % de arancel para la madera blanda y aserrada y 25 % para productos manufacturados, tasas que aumentarán a 30 % y 50 % respectivamente en enero de 2026.
Rodrigo O’Ryan alerta sobre riesgo de cierres en la industria forestal y llama a impulsar la construcción en madera
O’Ryan explicó que el impacto será inmediato: “Estados Unidos es el segundo socio comercial para el sector forestal chileno, con un 18 % de la exportación total del país. Es una situación bastante complicada que nos tiene expectantes para poder ver cómo revertirla y no perder competitividad”.
El dirigente advirtió que muchas empresas podrían cerrar debido a la imposibilidad de absorber el alza. “Las empresas que marginan más de 10 % y les recortan ese 10 %, es muchísimo en proporción al margen. Por lo tanto, es muy difícil que puedan absorberlo fácilmente; muchas van a tener que cerrar probablemente”.
O’Ryan plantea reimpulsar la construcción en madera para reducir la dependencia externa
Arauco y CMPC, las mayores del rubro, no están afectadas por las plantas que poseen en Estados Unidos, aunque sí por los volúmenes que exportan desde Chile. El resto del sector, dijo O’Ryan, enfrenta una situación crítica tras años golpeado por incendios, violencia rural y mayores costos laborales.
El presidente de Corma instó a intensificar las gestiones diplomáticas con Washington y a acelerar la búsqueda de nuevos mercados para mitigar los efectos del alza arancelaria. Al mismo tiempo, planteó que la coyuntura podría transformarse en una oportunidad para fortalecer el consumo interno.
“Quizás esto debería presionarnos a acelerar el desarrollo de la construcción en madera en Chile. Así podríamos reducir la dependencia externa, avanzar en la crisis de vivienda y en la descarbonización”. indicó.