Industria del arándano chileno genera cerca de 400 millones de dólares, afirma Ruy Barbosa
En radio Pauta, el presidente del Comité de Arándanos de Frutas de Chile detalló el avance de la industria, la competencia internacional, los cambios genéticos de las variedades y los desafíos laborales del sector, además del objetivo de aumentar el consumo interno.
En Mercado Central de Radio Pauta conversamos con Ruy Barbosa, presidente del Comité de Arándanos de Frutas de Chile y gerente de North Bay, sobre la realidad actual del arándano chileno, una industria que pasó de ser marginal en los años 90 a consolidarse como un actor relevante en el mercado global.
Según Barbosa, el arándano genera hoy ingresos cercanos a 400 millones de dólares y suma alrededor de 90 mil toneladas exportadas cada año.
La evolución del arándano chileno en el mercado global
El desarrollo genético ha sido clave. Barbosa explicó que los arándanos se originan en el norte de América y que se domesticaron sin manipulación genética directa, sino mediante cruces tradicionales. Eso permitió adaptar variedades a climas cálidos y expandir la producción a países como Perú, México o Marruecos, dijo Barbosa.
Chile es actualmente el segundo exportador mundial, superado por Perú, que opera con alta tecnología y ciclos productivos más largos. Aun así, Barbosa sostiene que la relación es complementaria, pues Chile abastece al hemisferio norte en invierno. La mayor parte de la producción local se concentra entre diciembre y enero, con Maule y Ñuble como las regiones más relevantes.
La campaña “Arándanos todo el rato”
El mercado interno, históricamente reducido, comienza a cambiar. Antes casi toda la fruta se exportaba, pero hoy la oferta de alta calidad también queda disponible en Chile, lo que impulsa un consumo que Barbosa busca reforzar mediante campañas como “Arándanos todo el rato”.
Según explicó, la industria enfrenta además desafíos laborales. La demanda de mano de obra en verano es alta y la participación de trabajadores migrantes resulta fundamental para completar la cosecha. El sector, dije Barbosa, opera bajo estrictas certificaciones y con mejores condiciones que décadas atrás.
North Bay, empresa que representa, opera plantaciones en múltiples países para asegurar fruta durante todo el año. El objetivo final, señaló, es sostener el crecimiento mundial del arándano y consolidar su consumo cotidiano en Chile.