Hermann González respalda en parte a Grau, pero advierte: “Donde claramente la economía no está mejor es en el mercado laboral”
El economista de CLAPES-UC coincidió con el diagnóstico del ministro Nicolás Grau sobre una economía más equilibrada que en 2022, pero subrayó que el principal punto débil sigue siendo el mercado laboral, con desempleo elevado y estancado.
En Mercado Central de Radio Pauta conversamos con Hermann González, coordinador del área macroeconómica de CLAPES-UC y miembro del Consejo Fiscal Autónomo, quien analizó el último Informe de Política Monetaria (IPOM) del Banco Central y evaluó las declaraciones del ministro de Economía, Nicolás Grau, respecto del estado de la economía que deja el actual gobierno.
González señaló que es correcto afirmar que la economía chilena se encuentra hoy en una situación más equilibrada que al inicio de la actual administración, marcada por fuertes desequilibrios heredados de la pandemia, el estallido social y los retiros previsionales.
Respaldo con matices al balance económico del gobierno
Recordó que en 2022 la inflación superaba el 14% y el país enfrentaba un elevado déficit en cuenta corriente, lo que obligó a un ajuste económico significativo.
Sin embargo, el economista fue enfático en marcar los límites de ese diagnóstico y apuntó a un ámbito donde, a su juicio, no se observan mejoras.
“Donde claramente la economía no está mejor es en el mercado laboral”, afirmó, destacando que el desempleo se ha mantenido en torno al 8,5%, un nivel superior al observado antes de la pandemia, cuando la tasa era inferior al 7%.
Empleo y crecimiento, los desafíos pendientes
González explicó que el bajo dinamismo del empleo está estrechamente ligado al ritmo de crecimiento de la economía, que sigue siendo insuficiente para absorber la fuerza laboral.
Si bien valoró que el IPoM entregue mejores perspectivas de inflación y crecimiento para el corto plazo, advirtió que el crecimiento potencial del país continúa limitado en torno al 2%, lo que impide mejoras sostenidas en empleo e ingresos.
A su juicio, Chile debería aspirar a tasas de expansión más cercanas al 3%, al menos en línea con el crecimiento promedio de la economía mundial. Crecer más, señaló, no solo permitiría generar más puestos de trabajo, sino también fortalecer las finanzas públicas en un contexto de desequilibrios fiscales persistentes.
Evaluación general y mirada hacia adelante
En ese marco, González respaldó parcialmente el balance realizado por el ministro Grau, pero enfatizó que la normalización macroeconómica no debe confundirse con un avance estructural.
Indicó que parte importante de la mejora responde al ajuste fiscal inicial y a la política monetaria del Banco Central, más que a un impulso sostenido a la inversión y la productividad.
Finalmente, planteó que el próximo gobierno enfrentará un escenario desafiante, con avances en estabilidad macroeconómica, pero con tareas pendientes relevantes en materia de empleo, crecimiento y sostenibilidad fiscal.