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Argentina se esfuerza en reducir la brecha entre sus tipos de cambio

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Bloomberg
POR Francisca Rivera |

Hasta ahora han empleado una combinación de medidas ortodoxas e inusuales para recuperar un desequilibrio monetario que ha llegado a niveles récord.

Argentina está acudiendo a todos los medios necesarios para reducir la brecha entre sus tipos de cambio oficial y paralelo.

La segunda economía más grande de Sudamérica ha empleado una combinación de medidas ortodoxas e inusuales para recuperar un desequilibrio monetario que ha llegado a niveles récord. Los métodos más tradicionales incluyen la desaceleración de la emisión de dinero, elevar las tasas de interés y la promesa de no financiarse con avances del banco central. El gobierno también ha presionado a operadores para que limiten sus movimientos y vendió sus propias tenencias de bonos en dólares para afectar el peso.

Hasta ahora, la mezcla de medidas parece estar funcionando. La brecha entre la tasa oficial y la tasa paralela, conocida como contado con liquidación, se ha reducido a 87% después de que alcanzó un máximo de 130% el 22 de octubre.

“La brecha continúa disminuyendo como resultado de una combinación de presión y ortodoxia”, dijo Fernando Marull, economista y director de FMyA, una firma consultora en Buenos Aires. “El gobierno está enviando señales y al mismo tiempo está interviniendo en el mercado, a través de la venta de bonos, pero de manera muy moderada”.

Parte de ese esfuerzo ha sido la venta por parte del banco central de sus propias tenencias de bonos en dólares. La autoridad monetaria vendió cerca de US$ 100 millones en bonos en dólares locales desde el 22 de octubre y todavía tiene la capacidad de vender otros US$ 7.700 millones, según estimaciones de Marull.

Creciente presión

El gobierno ha estado bajo una presión creciente para cerrar la brecha entre las tasas. La brecha había aumentado a su nivel más amplio en más de 31 años después de que los controles de capital diseñados para proteger las decrecientes reservas extranjeras de la nación solo aumentaron la demanda de dólares. Si bien analistas han dicho que la brecha sugiere que una devaluación de la tasa oficial es inminente, el presidente, Alberto Fernández, ha dicho públicamente que se opone a dar ese paso.

La gran cantidad de restricciones restantes también fija un umbral en la reciente apreciación del peso, dicen operadores. Los límites a las operaciones y un impuesto a las compras de dólares figuran entre las medidas que podrían frenar el reciente repunte, según Carolina Schuartzman, directora de ventas y corretaje de Columbus Zuma en Buenos Aires.

“A pesar de algunos pasos en la dirección correcta en las últimas semanas, no veo mucho espacio para que el contado con liquidación se siga fortaleciendo”, dijo. “No hay espacio para eliminar las restricciones restantes, y el mercado tardará un tiempo en recuperar su confianza en el equipo económico”.