Tomás Bercovich, cofundador y CEO de Global 66, comenta sobre la postergación del fin de las tarjetas de coordenadas para transferencias, y el debate que ha generado este tema en cuanto a la seguridad y experiencia de usuario. Además, se refiere a la Ley Fintec en Chile.

“Yo no estoy de acuerdo con postergarlo“, dice Tomás Bercovich sobre el reciente anuncio de que el uso de la tarjeta de coordenadas se mantendrá hasta agosto del año 2026. Y explica que “lo que está haciendo la CMF es algo que va en pos de la seguridad de todos nosotros”. 

“Como industria financiera tenemos que privilegiar la seguridad. Pero tenemos el desafío, además de prevenir fraude, de comunicar”, por lo que piensa que eso fue lo que faltó en este caso, el “empezar a comunicar con más anticipación las cosas que van a pasar, pero creo que no podemos transar la seguridad”.

“Si se hubiera coordinado bien, si hubieran estado todos claros en cuál eran las reglas, y hubieran partido comunicando un año antes que se iba a acabar un año después, no habría pasado lo que pasó ahora”, piensa Bercovich. 

“Desgraciadamente, creo que es una mala noticia para todos que se haya postergado esto” y hace un llamado a que las personas desde ya no utilicen más la tarjeta para que puedan aprender cómo hacer las transacciones por la aplicación o en la web, ya que “esa capa antifraude dejó de ser efectiva”. Además, Bercovich da cuenta de que la mayoría de las instituciones financieras tienen más de una capa de seguridad.  

Pero el CEO de Global 66 también está al tanto de los riesgos: “hoy día con la inteligencia artificial y otras tecnologías, esto avanza muy rápido (…) y como instituciones financieras tenemos el deber de avanzar lo más rápido posible e ir visualizando por dónde estos tipos quieren atacar e ir previniendo esto”.

Sobre la Ley Fintec en Chile, piensa que “es una ley que abarca muchas verticales diferentes dentro de la industria financiera. Tienes trading, tienes cripto, tienes enrutamiento de orden, y cada una tiene sus particularidades dependiendo de la naturaleza del negocio. Entonces, digamos, difícil hablar en general de lo que exige porque a cada una le exige cosas diferentes”.

“Hoy día las personas tenemos una responsabilidad de educarnos y de, aunque sea incómodo, tratar de aprender los nuevos métodos de seguridad”, finaliza Bercovich.