Economía

La visión del regulador en la postergación del pago para pensiones de independientes

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Superintendente de Pensiones, Osvaldo Macias. Crédito: Agencia Uno
POR Marcela Gómez |

El superintendente de Pensiones informó que priorizar pagos de salud y accidentes en la ley que obliga a cotizar a independientes reduciría levemente pensiones de la mayoría de ellos.

En el debate sobre la ley que modificó la obligación de los trabajadores independientes formales de cotizar para seguridad social, uno de los temas de mayor discusión fue la propuesta del Ejecutivo de alterar el orden de prelación que existía para esos pagos. La información entregada en el Congreso por el superintendente de Pensiones, Osvaldo Macías, pudo ayudar a inclinar la balanza.

Antes del cambio legal, la prioridad en los aportes para seguridad social lo tenían aquellos destinados a financiar pensiones y luego otros pagos como los del Seguro de Invalidez y Sobrevivencia (SIS), Seguro Accidentes del Trabajo y Enfermedades Profesionales (ATEP), Seguro para el Acompañamiento de Niños y Niñas afectados por graves condiciones de salud (ley Sanna) y la cotización para salud, ya sea en Fonasa o en isapres.

El Gobierno propuso invertir el orden y dejar para el final el 10% para pensiones, el mayor monto de todos y con un beneficio que es sólo tangible al final de la vida laboral de las personas.

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Al exponer ante la Comisión Trabajo del Senado en septiembre de 2018, el regulador presentó los resultados de un estudio realizado por la entidad que dirige sobre los impactos del cambio propuesto. Este evaluó qué ocurriría con las futuras pensiones de dos grupos de trabajadores independientes: aquellos que sólo se desempeñan de esta forma y los que además complementan ingresos con trabajos dependientes. Estos últimos constituyen el 93% de quienes serían obligados a cotizar. 

Osvaldo Macías informó a los senadores que dicha simulación permite sostener que el efecto de cambiar el orden de prelación en materia de pensiones es bajo, ya que haría que las pensiones fueran levemente menores (entre 2% y 5%) para independientes que complementan ingresos, que son la inmensa mayoría de los obligados a cotizar.

Precisó que para independientes que solo trabajan de esta forma y que están afiliados al sistema de AFP, que constituyen el 7% del total de los elegibles, este ajuste sería más importante, ya que generaría pensiones entre 14% y 22% menores.