Adriana Valdés: “Sería triste que la gente pensara que yo estoy ahí por ser mujer”
En Un Día Perfecto conversamos con la primera directora de la Academia Chilena de la Lengua.
Por primera vez tras sus 133 años de historia la Academia Chilena de la Lengua tiene como directora a una mujer. Se trata de la ensayista Adriana Valdés, quien, en entrevista en el programa “Un día perfecto”, destaca los desafíos que tendrá al asumir este doble nombramiento que incluye la presidencia del Instituto de Chile que agrupa a otras cinco academias.
“Sería triste que la gente pensara que yo estoy ahí por ser mujer […] estoy ahí por ser académica y no solo por ser mujer”, destaca Valdés en conversación con Maritxu Sangroniz. En ese sentido, haciendo alusión al discurso que pronunció al asumir como directora, enfatiza en la relevancia del cambio cultural del que están siendo protagonistas las mujeres. “Se está dando un paso en una causa en la que creo profundamente, pero el cambio cultural es muy lento […]. No puede ser que todavía estemos defendiendo las mismas cosas”, recalca.
La académica se refiere además a la importancia que le ha entregado la Real Academia Española (RAE) a los matices que tiene la lengua. Respecto del reciente cuestionamiento que generó la palabra “ganarse” en las redes sociales, Valdés explica que “esta polémica llega tarde porque ese diccionario se publicó el 2010. Otra información básica que falta es la anotación que se le puso: “pop”, que significa popular”. En este sentido, precisa que “si se lee bien el diccionario, no está aplaudido, no está recomendado, está reconocido. La RAE no es un policía, es limpia, fija y da esplendor”.
La educación y la convivencia con la tecnología también son profundizados por la ensayista. “Tendremos que hacer una alianza con lo que los niños están viviendo: un pensamiento que tiene que ver con el lenguaje y con su análisis de las imágenes. Eso también son formas de pensamiento”, señala.
La autora de libros como Enrique Lihn: vistas parciales y Redefinir lo humano se ha mantenido cercana a los cambios tecnológicos y ha tenido un rol activo en redes como Twitter. Sin embargo, adelanta que en sus nuevo papel como líder de la Academia Chilena de la Lengua y del Instituto de Chile tendrá que ser “más discreta” en sus comentarios, pese a que se ha sentido cómoda con la comunidad que se crea en torno a Internet.