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¿Es cierto que la ropa negra absorbe más calor que la blanca?

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PAUTA
POR Andres Sepúlveda |

Efectivamente es el color que más atrae la irradiación solar y, contrario a lo que se cree popularmente, es el más recomendado para usar en verano, ya que se enfría más rápido y produce una sensación de frescura en el cuerpo.

Con las olas de calor reiteradas en el país, las personas buscan diferentes formas de protegerse del sol. Una de las recomendaciones más comunes que se entregan es la de vestirse con ropa blanca o con colores claros, ya que se cree que el negro o los colores oscuros absorben la luz solar y la transforman en calor, por lo que no sería recomendable usarlos en verano. Por esta razón, nuestro Perro de Caza, de Watchdog Pauta, se vistió muy ligero y salió a investigar para responder si efectivamente el negro es el color que más absorbe calor.

En primer lugar es necesario mencionar que los colores tienen la capacidad de absorber energía, lo que recibe el nombre de índice de absorción. El negro, que se define como ausencia de color, tiene un índice de absorción del 90%, mientras que, el blanco tiene un índice cercano al 0%. En este sentido, el color negro es el que más absorbe el calor, pero eso no significa que sea el menos apropiado para usar en días calurosos.

El docente de la Universidad Santa María (USM), ingeniero Civil Eléctrico y especialista en Medio Ambiente Visual e Iluminación Eficiente, Denis Riquelme, comenta que los productos textiles de color negro tienen la capacidad de absorber una gran parte de la radiación emitida por el sol, ya sea ultravioleta, luz visible o infrarroja. “Los objetos negros absorben la energía emitida por el sol y no tienen capacidad de reflejarla al exterior. En situaciones en las que la temperatura del ambiente supera la temperatura corporal, la ropa negra permite una mejor refrigeración”, agrega.

El académico del Instituto de Física de la Pontificia Universidad Católica de Chile y director de Surflab, Ulrich Volkmann, añade que los objetos de color negro ceden más calor, lo que significa que se enfrían de forma más rápida y eficiente. “Por eso los radiadores de calefacción son negros, o los disipadores de calor, que deben enfriar piezas electrónicas, deberían ser de ese color”, enfatiza.

Lo mencionado por los expertos explica el hecho de que los beduinos, acostumbrados a convivir con el calor del desierto, tienen como vestimenta típica una túnica negra que les cubre todo el cuerpo.

Según un estudio de la revista Nature publicado en 1980, si bien las prendas negras absorben 2,5 veces más el calor que las blancas, ayudan también a sobrellevar la temperatura, ya que el cuerpo emite radiación, y lo recomendable es usar ropa que permita eliminarla. En este contexto, cuando una prenda absorbe más la radiación solar, puede expulsar más radiación infrarroja, con lo que se elimina la sensación de calor. 

“La radiación que el cuerpo humano emite es absorbida por la ropa de color negro, y favorece la disipación del calor corporal. Lo contrario sucede con el color blanco, el que tiene la capacidad de reflejar la radiación solar, pero a la vez refleja la radiación emitida por nuestro cuerpo, lo que no ayuda a regular la temperatura corporal”, menciona Riquelme.

Asimismo, también se deben considerar el resto de los colores existentes, ya que solo se suelen tomar en cuenta los dos extremos. En general, se sigue la misma regla: mientras más oscura sea la ropa, más calor absorberá y reflejará menos, por lo que se enfriará más rápido y será más fresca la sensación en la persona. Por el contrario, mientras más clara, se crea el efecto inverso.

Entonces, lo que hace el color blanco y los colores claros, como beige, rosa palo o celeste, es devolver la temperatura corporal hacia la persona y aumentar la sensación de calor. Frente a esto, la encargada de calidad del Laboratorio Lictex de la Universidad de Santiago (USACH) e ingeniera en ejecución textil, Lorena Ramírez, agrega que también es necesario tomar en cuenta el grosor que tenga la tela. “Influye más en la sensación térmica y dependerá del tipo de fibra y tipo tejido. Mientras más liviana y holgada la prenda, la sensación será más fresca. Mientras más gruesa y ajustada, la sensación será más calurosa”, asevera.