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“Masacre” y “crímenes de guerra”: el mundo reacciona a ataques en Bucha

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Михайло Подоляк, Twitter
POR Manuel Izquierdo |

La ONG Human Rights Watch denuncia que las tropas rusas han cometidos actos de “una crueldad y violencia deliberadas e indescriptibles contra los civiles ucranianos”. Líderes internacionales han condenado los ataques a Bucha, pero Rusia niega su responsabilidad.

La ONG Human Rights Watch (HRW) aseguró este domingo 3 de abril que ha documentado varios casos en los que demuestra que las fuerzas militares rusas han cometido crímenes de guerra en las áreas ocupadas de las regiones de Jarkóv, Chernígov y Kiev.

Entre esos casos, se incluyen un caso de violación repetida; dos casos de ejecución sumaria, uno de seis hombres, el otro de un hombre; y otros casos de violencia ilícita y amenazas contra civiles entre el 27 de febrero y el 14 de marzo de 2022. Los soldados también estarían implicados en el saqueo de bienes civiles, incluidos alimentos, ropa y leña.

“Los casos que documentamos equivalen a una crueldad y una violencia deliberadas e indescriptibles contra los civiles ucranianos”, ha asegurado el director para Europa y Asia Central de Human Rights Watch, Hugh Williamson, que cree que deben investigarse todos los crímenes de guerra.

Human Rights Watch ha entrevistado a diez personas, incluidos testigos, víctimas y residentes locales de los territorios ocupados por Rusia, en persona o por teléfono. Algunas personas han pedido ser identificadas solo por su nombre de pila o por seudónimos para su protección.

Por otra parte, el 4 de marzo, las fuerzas rusas en Bucha, a unos 30 kilómetros al noroeste de Kiev, reunieron a cinco hombres y ejecutaron sumariamente a uno de ello, según ha asegurado un testigo dijo a HRW.

Además, varios soldados habrían obligado a los cinco hombres a arrodillarse a un lado de la carretera, les habrían quitado las camisetas y habrían disparado a uno de ellos en la nuca. “Se cayó y las mujeres [presentes en la escena] gritaron”, ha detallado el testigo.

HRW ha recordado a las dos partes del “conflicto armado” que “están obligadas a cumplir el Derecho Internacional”, incluidos los Convenios de Ginebra de 1949. Además, ha subrayado que Rusia “tiene la obligación legal internacional” de investigar “imparcialmente” los presuntos crímenes de guerra cometidos por sus soldados.

“Las leyes de la guerra prohíben el homicidio intencional, la violación y otros tipos de violencia sexual, la tortura y el trato inhumano de los combatientes capturados y los civiles bajo custodia. (…) Cualquiera que ordene o cometa deliberadamente tales actos, o los ayude e instigue, es responsable de crímenes de guerra”, ha detallado la organización, que ha asegurado que las personas que los cometan serán “penalmente responsables”.

Líderes internacionales reaccionan a “masacre” en Bucha

Este domingo 3 de abril, el ministro de Exteriores de Ucrania, Dimitro Kuleba, ha acusado a las fuerzas rusas de orquestar una “masacre” en Bucha -una ciudad recientemente liberada que se ubica al norte de Kiev- y ha pedido al G7 que emita una serie de “nuevas sanciones devastadoras” contra Moscú, con carácter inmediato.

“La masacre de Bucha ha sido deliberada. El objetivo de los rusos es el de eliminar a todos los ucranianos que puedan. Tenemos que detenerles y echarles a patadas”, ha declarado a través de su cuenta de Twitter.

“Demando nuevas y devastadoras sanciones del G7 ahora”, ha añadido el ministro, antes de proponer un embargo sobre el petróleo, el gas y el carbón rusos, el cierre de puertos a todos los barcos y bienes de Rusia, y la desconexión de todos los barcos rusos del mecanismo de intercambio financiero SWIFT.

Uno de los asesores de la Presidencia de Ucrania, Mijailo Podoliak, había acusado este sábado a Rusia de maniatar y asesinar a los civiles que las tropas ucranianas han encontrado sin vida tras recuperar la ciudad, al noroeste de Kiev.

“Los cuerpos de personas con las manos atadas, que han sido asesinadas a tiros por soldados rusos, yacían en las calles. Estas personas no estaban en el Ejército. No tenían armas. No representaban ninguna amenaza. ¿Cuántos casos más están ocurriendo ahora mismo en los territorios ocupados?”, ha expresado Podoliak en su cuenta de Twitter.

Entrevistado por CBS, el presidente de Ucrania, Volodimir Zelenski, calificó el hecho como un “genocidio”. “Se trata de la eliminación de una nación entera y su pueblo. Somos ciudadanos de Ucrania. Tenemos más de cien nacionalidades. Esto va de la destrucción y exterminación de todas estas nacionalidades”, ha afirmado. 

El presidente del Consejo Europeo, Charles Michel, ha prometido nuevas sanciones de la Unión Europea tras acusar al Ejército ruso de cometer “atrocidades” en Bucha.

“Consternado por las espantosas imágenes de las atrocidades cometidas por el Ejército ruso en la región liberada de Kiev”, ha hecho saber Michel en un mensaje en Twitter, acompañado del hashtag “Masacre en Bucha”.

Michel ha prometido al Gobierno ucraniano y a las organizaciones el comienzo de una “recopilación de las pruebas necesarias para perseguir el caso en los tribunales internacionales” antes de prometer que “ya están en camino nuevas sanciones de la UE y más apoyo”.

El ministro de Finanzas alemán y miembro clave de la coalición de Gobierno, Christian Lindner, ha anunciado que convocará este 4 de abril a sus aliados europeos para discutir un endurecimiento de las sanciones contra Rusia tras denunciar “crímenes de guerra” cometidos por las tropas rusas en las zonas próximas a Kiev, de las que se han retirado en las últimas horas, empezando por la ciudad de Bucha.

“A partir de mañana [lunes 4 de abril] discutiremos con nuestros socios cómo podemos endurecer aún más las sanciones contra el presidente de Rusia, Vladimir Putin“, ha hecho saber Lindner en su cuenta de Twitter. “Las imágenes de Bucha demuestran el carácter criminal de la guerra contra Ucrania. Es insoportable”, ha añadido.

El vicecanciller alemán Robert Habeck, y la ministra de Exteriores, Annalena Baerbock, se han sumado a Lindner en su condena y confirmado la convocatoria. “Este terrible crimen de guerra no puede quedar sin respuesta”, ha declarado Habeck al diario ‘Bild’.

Por su parte, el presidente de Francia, Emmanuel Macron, declaró en su cuenta de Twitter: “En las calles, cientos de civiles asesinados cobardemente. Mi compasión por las víctimas, mi solidaridad con los ucranianos”. “Las autoridades rusas tendrán que responder por estos crímenes”, aseguró el mandatario en la publicación.

El ministro de Exteriores francés, Jean-Yves Le Drian, ha condenado también “en los términos más enérgicos tales actos que constituyen, si se confirman, crímenes de guerra”.

“Trabajaremos, junto con nuestros socios, las autoridades ucranianas y las jurisdicciones internacionales competentes, en particular el Tribunal Penal Internacional, para garantizar que estos actos no queden impunes y que los responsables sean juzgados y condenados”, ha hecho saber en un comunicado.

En el ámbito de las sanciones, el ministro de Exteriores francés ha apostado por “mantener y reforzar la presión económica e internacional sobre Rusia” para “obligar a las autoridades rusas a poner fin a la guerra de agresión que lanzaron el 24 de febrero contra Ucrania y cuyo precio humano e impacto humanitario es cada día más alto”.

El Departamento de Estado norteamericano ha anunciado que impondrá un nuevo paquete de sanciones económicas a Rusia “muy pronto” en respuesta a las denuncias de Ucrania.

“En lo que respecta a nuestras sanciones, siempre hemos dicho que seguiríamos aplicando presión al presidente [Vladimir] Putin, sobre el Kremlin, sobre todos los que están a su alrededor, incluidos los oligarcas y los compinches políticos que están alimentando esta guerra contra Ucrania”, ha afirmado el portavoz del Departamento de Estado, Ned Price, en declaraciones a la cadena MSNBC.

Rusia niega tajantemente las acusaciones

El Ministerio de Defensa ruso ha desmentido que sus fuerzas hayan cometido crímenes de guerra durante su ocupación de la ciudad de Bucha.

En un comunicado recogido por TASS, el Ministerio asegura que, durante el tiempo que Bucha estuvo bajo el control de las Fuerzas Armadas Rusas, “ni un solo residente local sufrió acciones violentas”.

El Ministerio asegura que “todas las unidades rusas abandonaron por completo Bucha el 30 de marzo” tras varios días de bombardeos de las fuerzas ucranianas. Asimismo, Moscú recuerda que, un día después de la retirada, el alcalde de Bucha “confirmó que no había militares rusos en la ciudad sin mencionar nunca la existencia de residentes acribillados en las calles”.

El Ministerio asegura a este respecto que “todas las fotos y secuencias de vídeos” sobre la existencia de cadáveres en la ciudad no son más que una “puesta en escena del régimen de Kiev para los medios occidentales” y que todas estas “pruebas de delitos” han aparecido días después, con la llegada a la ciudad de la prensa.