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El escándalo en Bruselas que compromete a políticos conservadores

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József Szájer. Créditos: Fidesz
POR Rosario del |

La policía belga desalojó una fiesta donde había encuentros sexuales en que participó el eurodiputado húngaro József Szájer.

En el centro de Bruselas, la capital de Bélgica, había el viernes de la semana pasada 25 personas en una orgía cuando apareció la policía para frenar el encuentro. La inspección se debía a los reclamos de vecinos, dado que quienes allí estaban no respetaban las restricciones sociales y la cuarentena nocturna. Los participantes, en su mayoría hombres, fueron multados. Y resultó que algunos alegaron tener “inmunidad diplomática”.

Entre los sorprendidos en el acto sexual conocido como “Gang Bang” se encontraba un político conservador de Hungría, József Szájer, europarlamentario por el partido conservador Fidesz, quien huyó por una cañería de desagüe. La policía halló pastillas de éxtasis en su mochila, pero el legislador aseguró que no le pertenecían. Por otro lado, lamentó haber violado las restricciones del Covid y se mostró dispuesto a asumir la multa que conlleve. El sábado renunció a su puesto y anticipó su retiro de la vida política. 

Todo el escándalo se destapó este martes, cuando un periódico belga divulgó los primeros antecedentes.

Szájer ejercía desde 2004 como eurodiputado del Parlamento Europeo, y en 2011 participó como redactor de la Constitución húngara que definió al matrimonio como la unión de un hombre y una mujer. El escándalo apunta no solo a este político húngaro cercano al primer ministro de su país, Viktor Orbán, sino en general a otros presuntos participantes de una fiesta que, en sus actividades públicas, promueven reglas opuestas a sus comportamientos privados.

Sobre esto conversó el analista internacional John Müller en Primera Pauta, de Radio PAUTA. Recordó que, además de Szájer, había “diplomáticos polacos, según hemos podido saber, y todos sabemos que ellos obedecen a un gobierno de derecha muy conservador en un país católico donde además las actitudes homosexuales o liberales reciben un reproche social”.

Revise el comentario internacional de John Müller en Primera Pauta