Las criptomonedas viven un fin de semana en vilo

Este domingo se cumple el plazo que definió BancoEstado para cerrar las cuentas a los operadores chilenos de divisas virtuales.

Es una carrera contra el tiempo. Este domingo se cumple el plazo que estableció BancoEstado para cerrar las cuentas de Buda y Orionx. El primero, conocido anteriormente como SurBTC, es uno de los jugadores importantes (trader) de criptomonedas en Chile. El segundo, fue creado en 2017 y se promociona como la plataforma “más simple” de todas para invertir en divisas virtuales.

Las cuentas bancarias son elementales para el funcionamiento de las administradoras de criptomonedas. Sin ellas, no podrán recibir ni entregar el dinero para comprar las divisas. Por lo mismo, tanto Orionx como Buda aseguran que si pierden la pelea con las entidades financieras, entregarán los recursos que mantienen en custodia a sus clientes.

Orionx sólo opera con BancoEstado, por lo que si la orden del banco se hace efectiva, se verán obligados a liquidar las posiciones que poseen alrededor de 48 mil clientes, según cifras que entrega la misma compañía.

Buda, en cambio, apuesta a continuar operando con la cuenta que mantienen en Itaú Corpbanca, que pese a haber anunciado el cierre a partir del 3 de abril, todavía se mantenía operativa hasta esta publicación.

CryptoMKT, mercado lanzado a fines de 2016 y que cuenta con cerca de cuarenta mil clientes, ya sufrió el cierre de cuentas que le impuso Scotiabank a fines de marzo y se encuentra operando sólo con BancoEstado. Es decir, está en una posición similar a la que ilustran desde Orionx. Sin embargo, declina comentar sobre la fecha de cierre que le impuso BancoEstado.  

A la venta

No se sabe a ciencia cierta el monto de las inversiones en criptomonedas que deberán liquidar los tres actores si el cierre de las cuentas es definitivo. Ninguno revela a cuánto ascienden los activos bajo administración. Sólo aseguran que, entre los tres, proveen servicios para unos 200 mil clientes.

A nivel de mercado global, el impacto de liquidar los activos que manejan los inversionistas chilenos en Bitcoin, Ether o Ripple -las criptomonedas más populares- debiera ser mínimo, por el gran volumen internacional que poseen estos instrumentos. Solo en el caso de Bitcoin, su capitalización de mercado mundial alcanza los US$ 117 mil millones, cerca de la mitad del valor de mercado de todas las empresas chilenas abiertas en bolsa.

Del mundo virtual a tribunales

La  batalla en Chile comenzó el 13 de marzo. Ese día, un ejecutivo de Scotiabank envió un correo electrónico al gerente general de CryptoMKT, Martín Jofré, para comunicarle del cierre de la cuenta bancaria de la sociedad. Dos días después, Itaú Corpbanca hizo lo mismo con Buda. Y el 29 de marzo, BancoEstado comunicó que seguiría los pasos de sus competidores, tanto con Buda como con Orionx y CryptoMKT.

Los tres fueron a tribunales para intentar frenar la medida mediante recursos de protección. Orionx lo hizo contra BancoEstado; Buda contra Itaú Corpbanca, y CryptoMKT contra Scotiabank.

Buda también tomó el camino extrajudicial. “No nos vamos a quedar de brazos cruzados, estamos revisando todas las instancias que correspondan para que no cierren las cuentas”, aclara el abogado de la firma, Samuel Cañas. Por ahora, eso ha significado tomar contacto con ejecutivos de BancoEstado para persuadirlos de que continúen operando con ellos.

En la misma línea, Orionx también ha realizado gestiones similares ante la entidad estatal. El resultado de esta estrategia se debería ver este viernes, ya que es el último día en que los tribunales pueden analizar esta apelación antes de que venza el plazo del domingo.

En el caso de CryptoMKT, ésta ya sufrió un revés ante la Corte de Apelaciones, cuando se rechazó la petición de no innovar que habían solicitado. Ahora, se debe revisar el recurso de reposición que presentó esta compañía de criptomonedas para revertir el resultado.

Acusaciones cruzadas

En todos las acciones legales, los administradores acusan que las medidas de los bancos son arbitrarias e ilegales. Desde los bancos responden con un argumento pragmático: no se puede mantener una cuenta si no se pueden acreditar los ingresos, asegura Scotiabank. Aquello apunta al corazón del negocio de las criptomonedas. Las divisas virtuales no son emitidas por banco centrales ni respaldadas por autoridades públicas, y su circulación es determinada por la misma comunidad. Aunque las transacciones se encuentran registradas a través de la tecnología blockchain, los bancos no pueden acceder de forma independiente a los datos. Por lo mismo, piden contar con el respaldo de la autoridad.

“A los bancos no les corresponde regular”, responde el abogado de Orionx, Pablo Tromben, socio de Carrasco Contardo y Compañía. Sin embargo, tanto Buda como CryptoMKT sí abordan el tema regulatorio en sus recursos. Ambos, destacan que se encuentran registrados ante la Unidad de Análisis Financiero (UAF), que es la única entidad que se encuentra supervisando actualmente a estas entidades.

Sin embargo, el control de este organismo gubernamental es limitado, debido a que la transacción de criptomonedas no está tipificada como un sector que vigila la UAF. De hecho, esta entidad solo vigila las operaciones sospechosas de lavado de activos y financiamiento del terrorismo.

Tanto Buda como CryptoMKT se registraron como “otras entidades facultadas para recibir moneda extranjera”. Esto quiere decir que la UAF sólo puede comprobar el cumplimiento de la ley antilavado en este rubro y no el negocio principal. “Esto es un problema grave para este Servicio, y así lo hemos representado públicamente desde hace más de un año, ya que no tenemos facultades legales para eliminarlos de los registros de la Unidad”, comenta el director de la UAF Javier Cruz.

Al potencial riesgo de la ausencia de regulación se suma la alta volatilidad que muestran estos activos. Bitcoin, la moneda virtual más líquida, cuadruplicó su valor entre fines de septiembre y el 16 de diciembre. Y tras alcanzar su máximo de US$ 19.343, ha caído 65%, cerrando ayer en US$ 6.789,30. El Consejo de Estabilidad Financiera también ha advertido lo mismo y tras analizar el tema en su última sesión, resolvió crear un grupo de trabajo para abordar el tema.