La escala inmobiliaria de la arquitecta Cazú Zegers

La artista habla de los espacios que dan un volumen patrimonial en las ciudades y abre las puertas a las visitantes. “Tiene que ser un turismo de escala que permite ir experimentando los lugares”, cuenta.

El lunes 15 de abril un incendio consumió en gran parte la emblemática catedral de Notre Dame en la capital de Francia, uno de los monumentos más importantes y visitados de Europa con alrededor de 13 millones de visitantes al año.

La construcción del monumento -declarado Patrimonio Mundial en 1991- comenzó a mediados del siglo XI y concluyó un par de siglos después. La catedral ha sido restaurada en distintas ocasiones.

En conversación con Cristián Warnken en el programa Desde el Jardín, la arquitecta chilena Cazú Zegers, que obtuvo mención de honor en el Premio ArcVision en 2016, conversó sobre la importancia del cuidado de los patrimonios, sobre todo en Chile.

“Creo que nuestro gran camino de salida es el turismo sustentable. El apellido ‘sustentable’ es clave, porque no es un turismo masivo que apoya los lugares. Tiene que ser un turismo de escala que permite ir experimentando los lugares”, dice Zegers.

Respecto del uso de patrimonios nacionales para otros fines, o el reconstruir obras de gran importancia, señaló que la situación de rentabilidad –”dictadura de algoritmo”– no es arquitectura, sino más bien una fórmula con orientación rentable.

“Es simplemente una fórmula matemática de rentabilidad y que de alguna manera nos está destruyendo las ciudades, que es grave, para mi gusto. Creo que se puede hacer mucho mejor, pero los inmobiliarios tiene que estar dispuestos a perder un poco de ganancia por el bien común, que tiene que ver con la ciudad y el habitante”, comenta.

A pesar del crecimiento sostenido de estructuras en lugares no adecuados, Cazú Zegers sí cree que hay conciencia y se arman desarrollos que tienen valor. “Pero también hay otros que están en su ley, que tiene que ver máxima rentabilidad. El mundo inmobiliario por supuesto es un mundo sumamente rentable y valioso en ese sentido. He pensado mucho en el tema, porque es un tema que me oprime el corazón cada vez que voy por Santiago y veo los guetos verticales”, expresa.

“Yo creo que también tiene que ver con el usuario. Si la gente deja de comprar ese tipo de edificios y se empieza a reciclar el barrio y otros inventos de transformar la ciudad, creo que tendríamos una ciudad mucho más amable. Da pena que vayamos perdiendo estos barrios patrimoniales”, señala.

Revise la entrevista completa con Cazú Zegers a continuación: