Análisis al proyecto de Reglas de Uso de la Fuerza: límites, protocolos e instrucciones
En Radio Pauta analizamos la iniciativa busca regular los protocolos e instrucciones que norman el uso de la fuerza en la mantención del orden público. El proyecto se basa en regulaciones de Naciones Unidas, entre otros organismos, y ha sido criticada por la figura de “proporcionalidad” que plantea.
Las comisiones unidas de Seguridad y Constitución comenzaron ayer, con polémica, la tramitación del proyecto que está con urgencia simple. Esto porque la oposición ha criticado que la norma es “una camisa de fuerza”, un “retroceso” e incluso “una compensación” al Frente Amplio.
Uno de los cinco principios que se incluyen (además de la Legalidad, Necesidad, Responsabilidad y Racionalidad) apunta a la Proporcionalidad y se detalla que “el tipo y nivel de fuerza empleada debe determinarse en atención al grado de resistencia o agresión, la que nunca deberá ser excesiva en relación con el objetivo legítimo que se pretende alcanzar. El tipo y nivel de fuerza empleada deben, en todo caso, asegurar la superioridad del personal y resguardar su seguridad y la de terceros”. Es un término que se puede entender de varias maneras.
Análisis al proyecto de Reglas de Uso de la Fuerza: límites, protocolos e instrucciones
Para el abogado, Ulda Figueroa, coordinador del Área Justicia del Centro de Estudios Justicia y Sociedad UC, “más allá del contenido concreto de este proyecto, es necesaria una regulación del uso de la fuerza a nivel legal por parte de las policías, para promover que estas actúen bajo estándares de calidad”. En conversación con Radio Pauta explicó que “regularlo por vía legal, facilita que el diseño de estos estándares sea construido en conjunto con otros actores expertos, cuya participación se ve obstaculizada cuando se usan normas infralegales (circular) para regular estas materias”.
Guillermo Ramírez, jefe de bancada de diputados de la UDI, respondió que “el proyecto se presentó luego que el ministro (Luis) Cordero se juntara con diputados del FA y, entre otras cosas, vuelve a la lógica de la proporcionalidad de la fuerza en vez de la racionalidad”. Para el diputado RN, Andrés Longton, “esto va a inhibir el trabajo de las policías, esto es un retroceso respecto la ley Naín-Retamal”.
La diputada Alejandra Placencia (PC), interlocutora de su colectividad en esta materia, dijo a radio Pauta que “lo que la derecha está intentando hacer es, por una parte, reafirmar su idea de que el gatillo fácil o la desregulación sea lo que prime, versus lo que las mismas policías nos han planteado que apunta a tener un marco normativo claro para su accionar policial en la calle”.
Este proyecto también establece deberes: identificación, advertencia, gradualidad, reducir al mínimo daños y lesiones, prestar auxilio y reportar. La oposición también recibió críticas por parte del PS. El diputado de ese partido, Marcos Ilabaca, dijo que “si vamos a comenzar a levantar caricaturas respecto este proyecto tan necesario, nos irá mal en la discusión. El también miembro de la comisión de Seguridad invitó a la derecha “a no levantar parodias, ya que es un tema serio que la ciudadanía y nuestras policías nos exigen atender con urgencia”.
El diputado Eric Aedo, jefe de bancada de la Democracia Cristiana, dijo a radio Pauta que “esta iniciativa no puede ser una compensación a sectores de Apruebo Dignidad ni del Frente Amplio. Debe ser una ley que, sin duda, será modificada en el parlamento y le dará certezas y garantías a Carabineros, FF. AA. y Gendarmería”.
Ayer en su presentación, la ministra del Interior, Carolina Tohá, propuso consultar al INDH y a la Defensoría de la Niñez, entre otras organizaciones, antes de actualizar el reglamento de las RUF, lo que abrió un debate entre los parlamentarios. Mientras, Catalina Pérez, de Revolución Democrática, dijo que “se escuchen todas las voces que puedan contribuir a mejorar esta legislación”, para el UDI, Henry Leal, en tono irónico, dijo que “deberían pedir permiso a la ONU también”.
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