7 de cada 10 chilenos declara haber sido víctima de robo y un 35% admite haber robado alguna vez
La encuesta 5C de Cadem reveló un panorama preocupante sobre la normalización de faltas cotidianas, la compra de productos robados y el impacto del delito en las decisiones de consumo.
La última edición del estudio de opinión pública de Cadem, correspondiente a la quinta semana de julio de 2025, arrojó datos reveladores sobre la experiencia de los chilenos con el delito.
Según la encuesta, el 70% de los consultados declara haber sido víctima de algún tipo de robo alguna vez en la vida, mientras que un 35% reconoce haber robado alguna vez, incluso en situaciones aparentemente menores.
Faltas cotidianas: entre la evasión y el “perro muerto”
Entre las prácticas más frecuentes que los encuestados reconocen haber cometido al menos una vez en la vida, el 26% dice haber evadido el pasaje del transporte público, un comportamiento históricamente extendido en el país.
Además, un 16% admite haber consumido alimentos dentro del supermercado sin pagarlos, mientras que un 11% reconoce haber robado un chocolate u otro snack en una tienda o quiosco, y un 7%, haber estado colgado a la televisión por cable o la luz.
También destacan otras acciones, como hacer “perro muerto” en restaurantes (irse sin pagar la cuenta, 5%) o quedarse con pedidos duplicados de delivery (3%). Aunque parezcan menores, estas conductas reflejan una normalización de la transgresión en la vida cotidiana.
La compra de productos robados: 1 de cada 4 lo ha hecho
Uno de los datos más inquietantes es que el 24% de los encuestados admite haber comprado alguna vez un producto que sospechaba era robado.
En cuanto a la percepción sobre qué productos se roban más en Chile, la tecnología lidera con un 53% de las menciones, seguida por carnes y pescados (43%), ropa deportiva (43%) y automóviles (41%).
El delito como factor en decisiones de consumo
El temor al robo también ha modificado el comportamiento de compra de los chilenos. El 40% afirma haber dejado de usar ciertas marcas o productos por sentirse más vulnerable frente a un posible asalto.
Las categorías más abandonadas son joyas de alto valor (35%), celulares de alta gama (29%), relojes o smartwatches (10%) y ropa de lujo o llamativa (6%).
Por otro lado, cuando se les preguntó qué marcas les generan mayor “tentación de robar“, ya sea por su valor, deseo o exclusividad, las más mencionadas fueron Apple, Samsung y PlayStation. También figuran Adidas, Nike y marcas de cosmética como MAC.
Un espejo social preocupante
Respecto a los espacios donde los encuestados creen que más ocurren robos, los supermercados encabezan la lista con un abrumador 91%, seguidos por malls y multitiendas (71%) y calles o espacios públicos (38%). También se mencionan el transporte público (35%) y farmacias (27%).
La encuesta no solo revela una alta percepción de inseguridad, sino también un patrón de transgresiones cotidianas que cruzan clases sociales y edades. Desde prácticas normalizadas hasta decisiones de consumo influenciadas por el temor al delito, el estudio de Cadem muestra cómo el fenómeno del robo, en todas sus formas, se ha instalado en la vida diaria de los chilenos.