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La otra presión de la COP 25: sacar adelante la agenda legislativa de Schmidt

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Agencia Uno
POR Gladys Pierola |

La ministra del Medio Ambiente apuesta a que la Cumbre ayude a movilizar el Congreso y con ello, destrabar al menos dos de sus propuestas.

Para este jueves en la mañana, se espera que el Presidente Sebastián Piñera dé a conocer el calendario de la Conferencia Internacional para el Cambio Climático, denominada COP25, y los detalles del lugar donde se realizará el evento. En La Moneda, y con una extensa lista de invitados que incluiría a expresidentes, embajadores, diputados, senadores, representantes del mundo “sustentable” e incluso rostros de televisión, el Mandatario dará el puntapié oficial a uno de los temas que se tomará la agenda del 2019.

De hecho, este lunes hubo un adelanto de aquello, con la presentación del Consejo Presidencial para COP 25, que colaborará en planificación de la conferencia que se realizará entre el 2 y el 13 de diciembre en nuestro país. Encabezados por la ministra de Medio Ambiente, Carolina Schmidt, el grupo de 27 integrantes compuesto, entre otros, por los expresidentes Ricardo Lagos y Eduardo Frei, además de representantes del mundo científico, social, empresarial y judicial, se reunirá una vez al mes con Piñera para avanzar en los principales lineamientos del evento. La primera reunión de trabajo ya está agendada para el próximo lunes al mediodía.

En esta nómina también estuvieron convocados cinco parlamentarios de las comisiones de Medio Ambiente de ambas Cámaras, lideradas hoy por el Senador Guido Girardi (PPD) y la diputada Catalina Pérez (RD). Pero la inclusión en el selecto grupo asesor no fue casualidad, pues al llamado transversal para ser parte del evento se suma una señal más: aprovechar la tracción de la COP25 para destrabar y avanzar en la agenda legislativa de la ministra Schmidt.

La plataforma de COP25 para la agenda de Schmidt

Al menos son cinco los proyectos que la titular de Medio Ambiente tiene en la mira: la modernización al Servicio de Evaluación de Impacto Ambiental; el proyecto que sanciona los delitos medioambientales; la propuesta de protección de humedales y la Ley de Cambio Climático, que ingresaría a mitad de año. Sin embargo, lista la encabeza el proyecto de ley que crea el Servicio de Biodiversidad y Áreas Protegidas (SBAP) que está desde el 2010 en su primer trámite constitucional en el Senado.

“Todos tenemos que ver cómo vamos a ir avanzando en una institucionalidad ambiental mejor. Lo que estamos viendo es cómo la COP25 actúa como un ente catalizador que nos permita avanzar más rápido en sacar adelante esos proyectos, pero pensar que en seis meses vamos a sacar cinco proyectos es desconocer la realidad del Congreso”, dijo la titular de la Medio Ambiente a PAUTA.

La ministra incluso sinceró sus pretensiones y aseguró que espera “tener uno o dos de esos proyectos terminados” y entre ellos el SBAP, que pese a los esfuerzos del Gobierno para que pasara a la siguiente etapa, la sala del Senado decidió a mediados de marzo que la propuesta siguiera en la Cámara Alta. Esta vez, la iniciativa pasó a la comisión de Trabajo para un segundo informe complementario, debido a que el proyecto coincide en materias laborales con otra discusión clave: la creación del Servicio Nacional Forestal y el traspaso de los trabajadores de la actual Conaf.

“Me encantaría poder terminar y sacar adelante el principal faltante de la institucionalidad que es el SBAP. El corazón de la institucionalidad ambiental del país hoy no lo tenemos. Si logramos llegar a la COP25 con este proyecto siendo un hecho real, sería un tremendo logro para país”, dijo Schmidt.  

Los nudos medioambientales

Otro tema que está en la mira de la ministra es la Ley de Cambio Climático. La propuesta que ha sido anunciada como la estrella de esta administración, debería ingresar al Congreso, en el segundo semestre de 2019. De hecho, en la cartera de Medio Ambiente están preparando las consultas ciudadanas del proyecto, las que deberían estar en marcha durante este mes. 

“Esperamos que el Gobierno presente rápidamente la Ley de Cambio Climático (…) La COP25 es una gran oportunidad para limar asperezas. Creo que estos diálogos que está construyendo el Gobierno con la oposición deberían incorporarse estas materias”, dijo a PAUTA el senador (UDI), David Sandoval, quien además se sumó al equipo asesor presidencial de la Conferencia.

Sin embargo, en tabla hay otros proyectos que hoy le provocan más de un dolor de cabeza a Schmidt, entre ellos, la reforma al SEIA que ingresó con urgencia simple en julio de 2018 al Congreso, pero aún no se vota ningún artículo. En este tema, el Gobierno se la jugó como el “gran proyecto” para perfeccionar la institucionalidad, reducir los componentes políticos y agilizar la tramitación de grandes proyectos de inversión.

Pero su discusión en la comisión de Medio Ambiente de la Cámara de Diputados se ha concentrado en decenas de audiencias y, luego de meses de revisión, aún no tiene avances ni acuerdos. De hecho, el proyecto ha sido criticado por varios sectores, incluido gremios empresariales y ONG ambientalistas, quienes en sus exposiciones han hecho públicas sus dudas en temas como el proceso de la consulta indígena, la inclusión de criterios de cambio climático en los proyectos y en cómo se generan las consultas ciudadanas anticipadas, entre otras.

“El proyecto va en el camino correcto, pero necesita mejoras, concretar ciertas cosas. Por eso, la invitación que le hemos hecho al Congreso es votar la idea de legislar e ir mejorándolo después” comentó a PAUTA el diputado (RN) Sebastián Torrealba.

Además, Torrealba, quien también es miembro del comité asesor de la COP 25, destacó que las modificaciones al SEIA “están al mismo nivel de importancia que la modernización tributaria y la reforma de pensiones” y aseguró que, si no se llega con varios productos legislativos aprobados o en vía de aprobarse a la COP, “será un fracaso para el Congreso”.

Algo más dura es la posición del senador Girardi. El presidente de la comisión de Medio Ambiente de la Cámara Alta dijo que “no ha visto ningún avance de este Gobierno en materia ambiental, todo lo contrario” y agregó que la propuesta para modificar el SEIA “es una vergüenza”.

El senador Guido Girardi considera “vergonzosa” la reforma al SEIA. Créditos: Agencia Uno

“Los proyectos que el Ejecutivo ha presentado al Congreso, más bien, son más un retroceso que un avance. Ya tenemos una institucionalidad ambiental que es vergonzosa, que no tiene dientes ni muelas”, señaló el parlamentario PPD a este medio. 

La negociación interna

Además de sacar adelante su agenda legislativa, la ministra Schmidt deberá negociar los temas que los propios diputados y senadores quieren poner en tabla, aunque desde el Ejecutivo no haya apoyo.

“Todos reconocemos que hay necesidad de perfeccionar la institucionalidad ambiental. Sabemos que se avanza a pasos de tortuga, pero hay que destacar la oportunidad que va a significar la COP25 en nuestro país, para que todos los sectores políticos entendamos que hay que tratar estos temas en materia de cambio climático”, explicó el senador Sandoval.

No es un secreto que en la Cámara Alta, la titular de Medio Ambiente tiene la difícil misión de negociar Girardi, quien tiene agenda personal. Por ejemplo, impulsó la tramitación de un nuevo proyecto de protección de glaciares y anunció la presentación de su propia propuesta para una Ley marco de Cambio Climático.

“No somos un buzón. Somos protagonistas y vamos a presentar nuestras propias iniciativas y las fusionaremos con las del Gobierno. Ahora, si el Ejecutivo tiene voluntad, estoy dispuesto a colaborar de manera activa y leal para que tengamos la mejor COP, pero también tenemos que avanzar en políticas reales en Chile. Sé que el Gobierno y el Presidente Piñera va a tener una enorme presión de sectores empresariales para que no haya avance”, agregó Girardi. 

Incluso, el senador PPD fue un poco más allá y dijo que “quizás la ministra Schmidt si tiene interés de sacar ciertos temas, pero está en un contexto, que también ocurrió en la Nueva Mayoría, de que los ministros de Hacienda, de Economía y de Energía son verdaderos actores que tienen derecho a veto sobre las políticas ambientales”.