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¿Qué pasa con Calama?

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Agencia Uno
POR Fernanda Monasterio |

Algunos culpan a la industria minera, otros a que las cuarentenas llegaron demasiado tarde, pero una cosa es clara: la situación del Covid-19 en la ciudad de la Región de Antofagasta parece todo, menos mejorar.

El pasado 5 de julio se dio a conocer un nuevo informe epidemiológico por parte del Ministerio de Salud, en el cual se contabilizan 29 comunas donde la cantidad de fallecidos producto del Covid-19 superan el centenar.

Solamente una de ellas se encuentra fuera de la Región Metropolitana: Calama, donde hasta el momento de publicación de dicho informe los fallecidos llegaban a 117.

“Todo esto lo anticipamos, eso es lo que nos indigna desde el norte. Prácticamente gritábamos a Santiago para que el ministro de Salud entendiera la situación y generara medidas preventivas, pero se hizo oídos sordos. No se nos escuchó, como tampoco se nos está escuchando ahora” comenta un dejo amargo en sus palabras el alcalde de Calama, Daniel Augusto, en entrevista con Pauta Final, de Radio PAUTA

Los principales números de la zona

Desde que en Calama se confirmaron los primeros casos de contagio de Covid-19 -el 12 de marzo- la cifra ha aumentado hasta alcanzar a 4.891 personas. Asimismo, esta comuna es la que presenta una mayor cantidad de casos confirmados en su región, al igual que cantidad de personas fallecidas. 

Los términos “leve mejoría”, “pequeña mejoría” e incluso “incipiente mejoría” se han vuelto comunes por estos días durante el reporte matutino que realizan desde el Ministerio de Salud, pero el alcalde de Calama comenta que su zona ha quedado ajena a estos sustantivos y adjetivos. 

“La verdad es que nosotros no tenemos ninguna mejoría”, reflexiona. 

“Estamos ya en la cuarta semana de cuarentena, vamos a entrar ya a casi un mes de cuarentena, y las cifras no parecen bajar, están entre los 120-200 personas por día. Solo en Calama estamos sobre los 5.000 y en la región sobrepasamos los 10.000 casos”, agrega. 

Revise a continuación algunas de las principales cifras disponibles en el último informe epidemiológico del Minsal:

Número reproductivo efectivo

Una de las formas en que se puede medir el avance de un patógeno en cierta zona es mediante el número reproductivo efectivo. Llamado Re o Rt, refleja la cantidad de personas que, en un cierto momento del brote, es capaz de infectar alguien que contrajo el virus. Lo ideal es que este número se encuentre en niveles inferiores a 1, lo cual indicaría que la expansión de la pandemia se podría estar controlando. 

No basta con que en un día específico este número se encuentre bajo 1, sino que es necesario que perdure antes de emitir algún juicio sobre el futuro del brote epidémico. “Se requiere una baja sostenida de 14 días (Re < 0,8) para que epidemia se contraiga”, asegura Tomás Pérez-Acle, subdirector de la Fundación Ciencia y Vida, a través de un hilo explicativo de Twitter. 

Asimismo, Pérez-Acle explica que cuando el número reproductivo se encuentra entre 0,8 y 1, la epidemia está estable y que, cuando este supera el 1, significa que aún está en expansión. 

En Calama, según los datos de la Fundación Ciencia y Vida, el Re sería de 0,93.

¿Movilidad en la zona?

Pero uno de los parámetros fundamentales si se quiere controlar la expansión de un virus es controlar la movilidad de las personas en la zona. Mientras menor sea esta movilidad -y acompañado de medidas como trazabilidad, testeo y aislamiento-, las probabilidades de contagio también deberían disminuir.

Un factor relevante para revisar estos criterios es la movilidad de las personas. Según un informe que divulgan periódicamente la Universidad del Desarrollo en asociación con Movistar y Cisco, la movilidad en Calama se ha reducido un 27,5% entre la primera quincena de marzo y el pasado 22 de junio.

Ciertamente conocer un solo número puede no ser muy clarificador de la situación, pero si se compara este porcentaje con el que han experimentado otras comunas durante el brote de Covid-19, puede dar algunas luces que reflejen el panorama que dicha comuna del norte vive. 

Por ejemplo, en Providencia, en la Región Metropolitana, la reducción en materia de movilidad ha sido de un 62,1%, mientras que en la comuna de Santiago el porcentaje de disminución alcanza un 59,1%. Es más, dentro de la misma región de Antofagasta, la comuna de San Pedro de Atacama ha sido testigo de una disminución en su movilidad de un 67,7%.

Aquí es necesario esclarecer un punto: la movilidad se puede medir de diferentes maneras, y la Universidad del Desarrollo hace su seguimiento a través de un método que mide la interacción entre celulares y antenas repetidoras. Hay también otros mecanismos -como el utilizado por Google Mobility Data– que mide a través de GPS el movimiento realizado por sus usuarios.

Eso sí, estos datos ofrecidos por Google se encuentran solamente a nivel regional, pero tienden a mostrar mayores disminuciones en la movilidad si se compara con los resultados de la metodología aplicada por la UDD. Por ejemplo, al 3 de julio, en la Región de Antofagasta se había reducido en un 70% la movilidad hacia tiendas y espacios de ocio, mientras que el tránsito hacia supermercados y farmacias había disminuido en un 56%.

“Pareciera que cuando se habla de movilidad, hay que reducirla en otros sectores, pero aquí como que no se quiere reducir la movilidad, y hay que seguir con el tránsito al aeropuerto, hay que seguir con las faenas, hay que seguir produciendo cueste lo que cueste”, cuenta sobre este punto el alcalde de Calama, y agrega que el 44% de los casos activos que existen en la zona están asociados a la gran minería. 

Pero dichos como estos se contraponen a la opinión de otras autoridades de la zona. Hace solo días el intendente de la Región de Antofagasta, Edgar Blanco, indicó en una rueda de prensa que “decir que la actividad minera completa es un foco de contagio no creo que sea responsable. Entendemos que existen algunas faenas en particular e incluso algunos sectores dentro de las faenas que tienen mayor cantidad de contagio, y eso es lo que analiza la Seremi de Salud para adoptar medidas de carácter local”.

“Ha sido la tónica de las autoridades. Si estamos con las cifras de contagio como estamos, es precisamente por la inoperancia de las autoridades, por el grado de indiferencia con el que han actuado”, responde Daniel Augusto ante tales dichos. 

Las camas críticas 

“Si nosotros hubiéramos visto que en este casi mes de cuarentena hubieran ido los casos a la baja, podríamos entender, pero estamos igual y peor, porque en definitiva también nuestra red de salud está al 100%”, comenta con preocupación Augusto. 

“Recuerde que, hechos concretos son que están teniendo que trasladar pacientes desde nuestra comuna a otras comunas del país y casi el 100% está muriendo. O sea, ni siquiera se salva en otros lugares, están llevando gente de aquí a morir a otras ciudades del país. Todas esas cosas pareciera que no las quieren ver, o las quieres suavizar, relativizar, como ha sido la tónica constante”, agrega. 

Y, según la Encuesta nacional sobre ocupación de unidades criticas durante contingencia Covid-19 -realizada por la Sociedad Chilena de Medicina Intensiva– al 7 de julio las regiones de Antofagasta y Metropolitana son aquellas que tienen una mayor proporción de sus camas UCI en uso.

Solamente el 8% de las camas en la Región de Antofagasta se encuentra disponible.

Revise a continuación la entrevista completa con el alcalde Daniel Augusto: