Cardiólogo por aumento en el sedentarismo infantil en Chile: “Esto se debe al libre acceso a las pantallas”
El vicepresidente de la rama de deporte de la Sochipe advirtió que el 90% de los menores de edad del país lleva una vida sedentaria, lo que agrava problemas como la obesidad infantil, trastornos metabólicos y de salud mental.
La inactividad física entre niños, niñas y adolescentes en Chile se ha convertido en una preocupación creciente, según reveló la Encuesta Nacional de Actividad Física y Deporte 2024, presentada por los ministerios de Educación, Deporte y Salud.
En Pauta de Análisis, el doctor Paulo Valderrama, pediatra, cardiólogo y vicepresidente de la rama de deportes de la Sociedad Chilena de Pediatría (Sochipe), advirtió que apenas un 26,4% de los niños mayores de 5 años realiza actividad física de forma regular.
En el contexto escolar, la cifra desciende aún más: solo un 18,5% es físicamente activo.
“Creo que hay distintos ámbitos que deben mejorar, y uno de ellos es el hogar. Los padres tienen que generar instancias para la actividad física”, sostuvo Valderrama, señalando que el tiempo libre dedicado a moverse también ha disminuido: del 16,5% en 2019, se redujo a un 10,5% en 2024.
El especialista subrayó que el sedentarismo tiene un impacto profundo en la salud integral de la infancia y adolescencia. Según detalló, el 90% de los menores en Chile lleva una vida sedentaria, en gran parte debido al acceso irrestricto a las pantallas.
“Lo que me preocupa como cardiólogo pediatra es que el 90% de nuestros niños, niñas y adolescentes son sedentarios, y esto se debe al libre acceso a las pantallas”, alertó.
Este estilo de vida no solo afecta la salud cardiovascular y metabólica, sino también la salud mental, aumentando el riesgo de hipertensión, triglicéridos y colesterol elevados, alteraciones en la glucosa, ansiedad y depresión.
Además, la obesidad infantil, vinculada tanto a la inactividad como a una mala alimentación, agrava aún más el escenario. Según Valderrama, el 47,7% de los niños en edad preescolar presenta malnutrición por exceso, es decir, sobrepeso u obesidad.
“Los niños menores de 18 años no deberían tener acceso a bebidas artificiales ni a alimentos ultraprocesados, porque estamos creando hábitos que se consolidan a largo plazo”, enfatizó.
Estos patrones poco saludables, combinados con el consumo de comida chatarra y bebidas azucaradas, sientan las bases para problemas crónicos en la vida adulta, como hipertensión pulmonar e insuficiencia cardíaca en casos extremos.
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