Colegio de Matronas protesta frente a La Moneda por cambio normativo que reduce su campo laboral
La norma técnica 150 del Ministerio de Salud elimina la atención diferenciada en urgencias gineco-obstétricas y neonatales, lo que generó una masiva movilización de matronas y estudiantes.
Una masiva manifestación liderada por el Colegio de Matronas y Matrones de Chile se tomó la Alameda este jueves frente a La Moneda, en rechazo a los cambios introducidos por el Ministerio de Salud a través de la resolución exenta N° 243, que modifica la norma técnica 150 y redefine la estructura de las unidades hospitalarias.
La protesta, que reunió a profesionales, estudiantes y hasta alumnas de enseñanza media, fue convocada tras la publicación de la nueva norma, la que, según el gremio, reduce de forma drástica el campo de acción de las matronas en áreas históricas como la urgencia obstétrica, la neonatología y la salud sexual y reproductiva.
Matronas acusan invisibilización de su rol y advierten riesgos para la salud materna e infantil
“Podemos aumentar la mortalidad infantil con esta normativa, y por ende también, la mortalidad materna”, advirtió Lucy Rojas Santander, vicepresidenta del Colegio de Matronas, en TVN, quien además entregó una carta dirigida al Presidente Gabriel Boric en la que solicita revertir la medida y abrir un espacio de diálogo.
Desde el gremio acusan que no fueron consultadas en la elaboración del decreto, y que la implementación se realizó sin una mesa técnica previa. “Sale la norma sin que haya mediado una mesa de trabajo con las matronas. Eso es un hecho”, denunció Rojas.
Este miércoles, representantes del Colegio de Matronas fueron recibidas por el Ministerio de Salud, pero aseguran que no obtuvieron soluciones concretas y que sólo se agendó una mesa de trabajo para el 12 de julio.
La movilización frente a La Moneda fue replicada en distintas ciudades del país, en lo que el gremio calificó como una protesta nacional por la defensa de su rol en el sistema público de salud.
Riesgos y consecuencias
Uno de los principales cuestionamientos a la nueva normativa es la eliminación de la atención diferenciada para las mujeres en urgencia. A partir de la nueva categorización, una paciente en trabajo de parto podría ser atendida en la misma sala que alguien con un infarto o con una herida de bala.
“No va a tener una atención específica, y eso nos preocupa. Un trabajo de parto puede estar al lado de una persona baleada. Va a pasar por un triage, y eso es peligrosísimo para los hijos de nuestro país”, agregó la dirigenta.
Además, la medida establece que las funciones de las matronas en neonatología, quedarían restringidas o directamente reemplazadas por pediatras, y los controles y atenciones en salud sexual y reproductiva pasarían exclusivamente a manos de médicos gineco-obstetras.