20 miembros de la FACh son sancionados por negarse a abordar un avión: uno está vinculado a red de tráfico de ketamina
Los uniformados, entre ellos pilotos alumnos y sargentos, señalaron discrepancias en los indicadores de combustible y riesgos operacionales, y solicitaron no participar en la campaña aérea programada. Según los informes, las condiciones de la aeronave podrían comprometer la seguridad de los vuelos, por lo que insistieron en ser dispensados de la misión.
20 funcionarios de la Fuerza Aérea de Chile (FACh) fueron sancionados tras rechazar, uno a uno, la orden de abordar un avión institucional que, según denunciaron, no estaba en condiciones de volar.
Así lo dio a conocer La Tercera, que reveló que el 2 de diciembre de 2024, el Comando de Combate emitió una “Orden de Operaciones” a la II Brigada Aérea para su participación en la campaña Polar Científica Conjunta Glaciar Unión 2024.
Las labores se centrarían principalmente en el transporte de carga y pasajeros desde y hacia el territorio antártico, utilizando para ello, entre otros medios, el avión de transporte militar C-130 Hércules (N° 995).
No obstante, el 15 de diciembre de ese mismo año, 20 miembros de la dotación del Grupo de Aviación N° 10 y del Grupo de Mantenimiento N° 52 presentaron informes al comandante de la Escuadrilla de Operaciones de dicha unidad en los que alegaron fallas en la aeronave y pidieron no realizar los vuelos.
Los uniformados, entre ellos pilotos alumnos y sargentos, señalaron discrepancias en los indicadores de combustible y riesgos operacionales, y solicitaron no participar en la campaña aérea programada. Según los informes, las condiciones de la aeronave podrían comprometer la seguridad de los vuelos, por lo que insistieron en ser dispensados de la misión.
La respuesta de la Comandancia: “Un hecho sin sustento concreto”
Tras esta situación desde la Comandancia en Jefe de la II Brigada Aérea explicaron que “tal como puede advertirse la simple lectura de los informes, todos los funcionarios que suscribieron tales documentos utilizaron fundamentalmente los mismos argumentos para fundar su petición, los cuales además en gran parte de los casos están incluso transcritos de manera literal en más de un informe”.
En tanto, añadieron que “todos ellos se fundan en los siguientes supuestos: primero, que la aeronave C-130 N° 995 estaba previamente determinada para ser empleada en la ejecución de la campaña Glaciar Unión 2024 (aún cuando ello en la práctica no resultaba efectivo); segundo, que tal determinación se habría mantenido aún cuando dicha aeronave presentaba discrepancias en sus indicadores de combustible que la dejaban fuera de vuelo (cuestión que tampoco es efectiva); y tercero, que se habría ordenado ejecutar la misión ‘de todas formas y a pesar de ello’, cuestión que a su juicio justificaría su solicitud en el sentido de no participar de la misma (lo que tampoco resulta efectivo)”.
Asimismo, explicaron que, aunque se realizó una reunión para analizar las condiciones de la misión Glaciar Unión 2024, los informes se presentaron de todas formas y, en algunos casos, los funcionarios mantuvieron su negativa a participar. Por ello, la institución calificó la negativa como “un hecho anticipado y sin sustento concreto”.
La Comandancia aclaró además que, al momento de presentarse los informes, “no se había determinado aún qué aeronave(s) se emplearían concretamente para la campaña Glaciar Unión 2024″. La Orden de Operaciones únicamente señalaba que se usaría “una aeronave C-130”, sin individualizar ningún avión en particular, lo que refuerza la conclusión de que el rechazo a participar carecía de fundamento.
De todas formas, expusieron que el avión C-130 N° 995 presentaba discrepancias en los indicadores de combustible de sus estanques principales. Por ello, el 15 de diciembre se realizó una reunión técnica para analizar los resultados de los vuelos de prueba y definir un posible plan de acción que permitiera corregir las fallas encontradas. En esa instancia, se determinó finalmente “no autorizar la operación de la aeronave C-130 N° 995″.
“Se ha configurado en la especie una falta a la disciplina por parte de los funcionarios”, cerró la Comandancia en Jefe de la II Brigada Aérea.
Sanciones
Como consecuencia de estas conductas, los uniformados recibieron tres días de arresto militar con todo servicio, una medida disciplinaria militar que los mantiene en su unidad o dependencia, pero les permite seguir cumpliendo sus funciones y actividades habituales mientras dure la sanción.
Uno de los involucrados está vinculado a red de tráfico de ketamina
Uno de los sancionados es Elías Villalonga Martínez, el cabo que formaba parte del Grupo 10 de Aviación y que estaba vinculado a una organización criminal interna de la FACh dedicada al tráfico de ketamina desde Tarapacá hacia Santiago.
Actualmente es imputado por el Ministerio Público como autor de los delitos de tráfico de drogas y asociación ilícita, caso que se conoció en julio en la Base Aérea Los Cóndores, en Iquique.
Villalonga es señalado como líder de la organización, y según las acciones judiciales, se encargaba de la coordinación de las operaciones, la logística de los traslados y la asignación de tareas a cada miembro.
A él, también se le aplicó la medida disciplinaria de tres días de arresto militar con todo servicio, ya que con su conducta contribuyó “a un ambiente de desconfianza en las tripulaciones, evadiendo el cumplimiento de una Misión Institucional, la que en definitiva se materializó con éxito con medios aéreos asignados, quebrantando y eludiendo sus deberes militares, produciendo una falsa alarma, desorden o confusión en las tripulaciones, incumpliendo órdenes permanentes del servicio que alteraron el régimen imperante en la unidad de desempeño”.