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Repetto por dichos de Presidente Boric sobre Banco Central y sueldo mínimo: “No es un comentario metodológico; está defendiendo la política pública”

POR María Alejandra Gallardo Contreras |

En Radio Pauta, la economista Andrea Repetto valoró el trabajo técnico del Banco Central, pero remarcó que la discrepancia del Mandatario con el informe sobre salario mínimo y 40 horas “es de carácter político, no metodológico”.

En Pauta de Análisis de Radio Pauta, la economista Andrea Repetto, directora de la Escuela de Gobierno de la Universidad Católica, abordó el debate generado por el último IPoM del Banco Central, que advierte un impacto negativo del alza del salario mínimo y de la reducción de la jornada a 40 horas sobre el empleo.

Tensión entre análisis técnico y decisiones de política pública

“Por supuesto que es todo un trabajo técnico. El Banco Central tiene un equipo de primer nivel y acceso a datos únicos”, destacó, aunque subrayó que no se trata de un estudio académico con revisión de pares.

Repetto diferenció tres planos: el rol del Banco Central, la evaluación metodológica y la discusión normativa. Explicó que la institución debe analizar el mercado laboral para proyectar precios, pero que “quizás debió explicar mejor por qué hacía este recuadro, para que no se leyera como una evaluación de políticas públicas”.

Sobre las palabras del Presidente Gabriel Boric, sostuvo que la discrepancia “no es un comentario metodológico”, sino que apunta al fondo de la política laboral. “Creo que su discrepancia es que estas políticas tienen un objetivo beneficioso, mejorar las condiciones laborales y riesgos, y no se puede decir que todo es malo”, afirmó.

Efectos en el empleo y próximos desafíos

Consultada sobre los efectos de las medidas, advirtió que “los costos laborales subieron. Es razonable pensar que van a presionar sobre el empleo”, aunque precisó que la evidencia internacional es “muy mixta”, ya que las empresas pueden absorber el mayor gasto de distintas maneras, como traspasarlo a precios, mejorar su productividad o reducir utilidades.

Repetto añadió que eventuales nuevos aumentos del salario mínimo o una negociación ramal “deben evaluarse con cuidado”, porque podrían profundizar la fragilidad del mercado laboral, especialmente en sectores con menor calificación o en empresas que operan con márgenes más estrechos.