RED Movilidad alcanza casi 4.000 buses eléctricos y posiciona a Santiago como líder mundial fuera de China
La incorporación récord de buses eléctricos durante 2025 marca un punto de inflexión en el transporte público capitalino, y consolida así una década de avances, posicionando a la ciudad como referente global en electromovilidad.
Durante 2025, el sistema de Transporte Público Metropolitano alcanzó uno de los hitos más relevantes desde el inicio de la electromovilidad en 2017.
En solo doce meses se incorporaron 1.344 buses eléctricos, el mayor ingreso anual registrado, lo que permitió que la flota total de este tipo de vehículos llegara a 3.849 unidades.
Con ello, casi seis de cada diez buses que hoy circulan por la capital son cero emisiones, una cifra que refleja la magnitud del cambio estructural vivido por la ciudad.
El mayor avance en electromovilidad desde el inicio del sistema
El impacto de este avance se proyecta aún más lejos. Las estimaciones oficiales indican que a marzo próximo los buses eléctricos superarán las 4.400 unidades, alcanzando cerca del 68% de la flota total.
Este crecimiento sostenido consolida a Santiago como la ciudad fuera de China con mayor cantidad de buses eléctricos en operación, un logro que trasciende lo simbólico y se traduce en beneficios concretos para millones de viajes diarios.
Infraestructura, equidad y mejor experiencia de viaje
El despliegue de la electromovilidad ha sido acompañado por una expansión significativa de la infraestructura.
Actualmente operan 44 electroterminales en distintos puntos de la ciudad, número que aumentará a 55 hacia marzo de 2026, muy por encima de las 10 instalaciones existentes al inicio de la actual administración.
Esta red ha permitido extender el estándar moderno del sistema a más de 30 comunas, muchas de las cuales cuentan hoy con más del 90% de su flota renovada.
A ello se suma una mejora tangible en la calidad del servicio. La casi totalidad de los buses dispone de aire acondicionado, junto a tecnologías como wifi, cargadores USB y sistemas de seguridad.
Más allá de las cifras, 2025 queda marcado como el año en que la electromovilidad dejó de ser una promesa para convertirse en una realidad cotidiana en toda la ciudad.