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Chile se pone a la cabeza de la ciberseguridad en Latinoamérica: ¿Qué impacto puede tener en el sector del casino online?

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POR Manuel Saavedra Ayala |

El juego online experimenta un crecimiento sostenido desde hace varios años en Chile.

La Ley Marco de Ciberseguridad aprobada el año pasado en Chile y cuya puesta en marcha sigue hasta hoy en día, no solo marca un hito legislativo, sino que también podría convertirse en un punto de inflexión para industrias con alta exposición digital, como el casino en línea.

Mientras los ciberdelincuentes le sacan punta al lápiz con ciberataques que son cada vez más sofisticados, potenciados con inteligencia artificial, contar con una regulación que ayude a prevenir es una noticia bienvenida para los operadores de plataformas de juego, especialmente aquellos que se enfocan en usuarios chilenos.

Una ley pionera para un entorno digital más seguro

A través de la ley promulgada el 26 de marzo de 2024 se crea la Agencia Nacional de Ciberseguridad (ANCI) y se establecen obligaciones concretas para todos los proveedores de servicios esenciales, como son las telecomunicaciones y la energía.

El foco se pone en esas estructuras porque son críticas para el funcionamiento del país, pero la norma obliga a todo tipo de empresas a reportar incidentes al CSIRT Nacional, lo que representa un avance notable en la coordinación público-privada frente a amenazas cibernéticas.

Además, introduce principios como la seguridad y privacidad desde el diseño, medidas que benefician tanto a operadores como a usuarios, reforzando la confianza en los servicios digitales como los casinos online o los sitios de poker, entre otros.

¿Qué implica para los jugadores de casinos online?

El juego online experimenta un crecimiento sostenido desde hace varios años en Chile, con un impulso reciente en plataformas seguras que ofrecen títulos como tragamonedas, ruleta en vivo y mesas de póker multijugador.

La confianza en el servidor se vuelve fundamental en un contexto donde los ciberdelincuentes se dedican con mucho cuidado a duplicar páginas originales y estafar a través de promociones falsas.

Si bien una buena parte de los sitios que operan desde jurisdicciones extranjeras (casinos internacionales) ya aplican protocolos de cifrado y auditorías independientes, el entorno normativo local ahora ofrece un marco más sólido para que los jugadores puedan contar con la prevención ante conflictos y la respuesta ante posibles incidentes.

Esto es relevante especialmente para los jugadores que, hasta ahora, podían dudar de la protección de sus datos o de la respuesta ante un posible ataque.

Las entidades privadas ahora están obligadas a adoptar medidas proporcionales al nivel de riesgo, lo que puede interpretarse como una mayor protección de los datos de los jugadores, en los casos donde se aplique.

Más allá de la ley: medidas de autocuidado en Internet

Aunque las regulaciones sobre privacidad, ciberseguridad o verificación de identidad en línea avanzan a nivel estatal en Chile, nada reemplaza al autocuidado y la “higiene de datos” en internet.

La era de la inocencia online se terminó hace rato y en 2025 los fraudes, las suplantaciones de identidad y los accesos no autorizados son el pan de cada día. Por ese motivo, los usuarios no pueden andar desprevenidos y tienen que asumir un rol activo en la protección de su información personal.

Contraseñas complejas, cuentas seguras

La primera barrera de acceso a los datos es la contraseña y aún así muchos siguen usando combinaciones de su nombre o su apellido o incluso cometiendo la imprudencia de acceder con claves de tipo “contraseña123”.

Una buena contraseña es larga, única y difícil de descifrar. De acuerdo a información recabada por Kaspersky, lo ideal es usar combinaciones de letras mayúsculas, minúsculas, números y caracteres especiales son altamente recomendables.

Además, conviene actualizarlas periódicamente y evitar usar datos personales como fechas de nacimiento o nombres de mascotas.

Evidentemente, cuanto más difícil de adivinar es una contraseña también se vuelve casi imposible de recordar. Por eso, sobre todo para quienes manejan múltiples cuentas, un gestor de contraseñas puede ser una herramienta de utilidad.

Doble autenticación

La verificación en dos pasos, también conocida como autenticación de dos factores, también es otro cortafuegos a los accesos no autorizados.

En ocasiones puede resultar engorrosa, ya que se requiere una segunda aprobación además de la contraseña para acceder a la cuenta. Este segundo factor de verificación puede ser un código enviado por SMS, una notificación en una app o hasta una llamada telefónica.

Aunque sea tedioso, una protección sencilla de implementar y muy efectiva para prevenir hackeos. Se trata de una práctica que ya muchas empresas que gestionan datos sensibles (banca, salud, etc) aplican por defaut, debido al nivel de vulnerabilidad que tiene una posible filtración.

Actitud vigilante, sobre todo al teléfono y en la casilla de correo

Los ataques de phishing o suplantación de identidad no solo llegan por correo electrónico. Hoy también circulan por mensajes de texto o de Whatsapp, llamadas o aplicaciones de mensajería instantánea.

Por eso, una recomendación simple puede ayudar a “salvar las papas”. Desconfiar por defecto. Si un familiar pide dinero urgente o una promoción parece demasiado buena para verdad, es posible que se trate de un intento de estafa.

Dudar y frenar antes de hacer clic en un enlace o dar datos personales a desconocidos puede ser una buena idea, dependiendo el contexto. Verifica siempre la dirección de correo del remitente y, si es necesario, contacta directamente a tus familiares o a la entidad en cuestión por sus canales oficiales.