El singular aterrizaje del ministro Fontaine en Economía
El economista instaló un “mando único” para evitar duplicidades con el subsecretario Guerrero y apuesta a fortalecer su liderazgo técnico con una mayor cercanía ciudadana.
Desde que el 18 de junio llegó a las oficinas del Ministerio de Economía tras jurar como el nuevo titular de la cartera, Juan Andrés Fontaine, ha marcado su instalación con su personal mirada de cómo deben funcionar los ministerios y cómo impulsar las políticas públicas. Un mando único, equipos consolidados, asesoría política y la apuesta a una mayor cercanía ciudadana aparecen como los aspectos más característicos de esta partida.
Todo ello, dicen quienes conocen al economista, fruto tanto de su propio análisis sobre su primera experiencia en ese cargo en 2010 y su abrupto término, como de lo aprendido en su paso liderando el Ministerio de Obras Públicas (MOP). Esto, hoy, implica compatibilizar su mirada técnica con un buen manejo político y tambien comunicacional, que podrían estar a la base de la salida de su antecesor, José Ramón Valente.
En esa línea, lo primero que hizo Fontaine (independiente, cercano a la UDI) fue traer a Economía al equipo más cercano que lo había acompañado en el MOP. Entre ellos destacan la economista y jefa de asesores Joanna Davidovich, quien ahora asume similar función y que lo acompañó también en su primer paso en Economía; y el abogado Francisco López, quien fue su jefe de gabinete en el MOP y ahora será el asesor en temas jurídicos y legislativos.
Se suman el también abogado José Luis Uriarte (UDI), quien dirigió Sercotec en 2010, fue el “hombre de los conflictos en el MOP” como encargado territorial y de participación ciudadana y quien ahora ha sido nombrado entre quienes podrían asumir la vicepresidencia ejecutiva de Corfo. Cierran este grupo la abogada Macarena Pivcevic, quien fue asesora de gabinete en el MOP y ahora asumió como jefa de gabinete, y la periodista Paula Godoy en el área de comunicaciones que lidera Sandra Burgos.
“Fontaine no despidió a nadie, pero quedó claro que su equipo de confianza será la columna vertebral en su gestión. Y que a diferencia de su paso por Economía 2010, entendió que no solo es necesario tener un buen desempeño técnico: por eso ahora tiene asesoría política directa y también está preocupado de hacer un buen papel en lo comunicacional”, comentó un funcionario de Gobierno que pidió reserva de su nombre.
Un mando único
Una de las primeras medidas que Juan Andrés Fontaine tomó en Economía fue replicar el modelo que ya había ejecutado en el MOP: tener un único equipo que apoyara la tarea del ministro y subsecretario, evitando duplicar roles y estrechando así la coordinación.
En Economía, que tiene tres subsecretarías (Economía, Turismo y Pesca), esta definición abarcó solo a la primera entidad, que dirige el subsecretario Ignacio Guerrero (Evópoli), quien había desplegado una acotada agenda de difusión regional de la modernización tributaria y la Ley de Pago a 30 días. Fruto del cambio, se quedó solo con su jefe de gabinete, ya que sus asesores se sumaron al equipo ministerial y su periodista al de comunicaciones.
Consultado el Ministerio de Economía, informó que al unir los dos gabinetes que estaban separados cambió la forma de trabajar, se sacó el foco en el gabinete y se amplió al ministerio en general.
Aunque fuentes de la cartera añaden que de este modo Guerrero “tomó más preponderancia, algo que nunca ocurrió en la era Valente”, otros ven este ajuste como una forma de control y de concentrar toda la visibilidad comunicacional en la figura del ministro. Como muestra de lo anterior, señalan como algo inédito que Fontaine haya anunciado que el Servicio Nacional de Pesca (organismo fiscalizador sectorial que depende de Economía) presentará tres denuncias en contra de la salmonicultora Nova Austral, que opera en Magallanes.
Un factor que incide en la diferencia de visiones es que el anuncio del ministro ocurrió el mismo día que se informó oficialmente la renuncia por razones personales del entonces subsecretario de Pesca, Eduardo Riquelme (RN), con cuya salida se especulaba desde antes del cambio de gabinete. La partida del abogado representa un desafío importante, debido a la complejidad de los temas de pesca y a que, con todo, la renunciada autoridad logró desactivar la “crisis de la jibia”, el conflicto más fuerte en esa área en lo que va de Gobierno.
La ausencia de un subsecretario sectorial lleva los temas de pesca directamente al ministro. Ejemplo de ello es la reunión sostenida el 11 de julio con dirigentes del sector pesquero artesanal e industrial, acompañados por los diputados Sergio Bobadilla (UDI) y Francisco Undurraga (Evópoli) para postergar la puerta en marcha de la ley de la jibia.
Cultivando la cercanía
Con una extensa trayectoria como economista, director de empresas, consultor e integrante de los comandos económicos de varios candidatos y precandidatos presidenciales de centroderecha (entre ellos Hernán Büchi, José Piñera, Joaquín Lavín, Andrés Allamand y Sebastián Piñera), Juan Andrés Fontaine no es una cara muy conocida por la ciudadanía.
Tanto él como su equipo son conscientes de la importancia de llegar más alla de los círculos económicos y técnicos, por la petición de La Moneda de cultivar mayor cercanía ciudadana. Se trata de una exigencia compleja para una autoridad que, más allá de quien sirva el cargo, siempre ha sido comunicacionalmente opacada por el ministro de Hacienda.
Pero Fontaine está dispuesto y dio un paso en esa dirección esta semana al crear una cuenta en Instagram para compartir su mirada sobre los temas en que está involucrado. Se suma a la que tiene en Twitter, que es seguida por 43 mil personas y en la cual comparte temas económicos y también de obras públicas.
Una muestra de la naciente ductilidad comunicacional del ministro pudo apreciarse el 10 de julio en una visita a una panadería con el titular de Desarollo Social, Sebastián Sichel, para conmemorar el Día de la Sopaipilla Pasada. Allí, premunido de un delantal pero sin soltarse la corbata, Fontaine metió las manos en la masa, compartió con las emprendedoras y terminó degustando con tenedor y cuchillo esos dulces.
Fuentes de Economía comentaron que además de darle “una bajada ciudadana” al pulso de la economía comentando las cifras de crecimiento, el ministro tendrá como focos de su gestión las materias asociadas a los consumidores (recuerdan que fue el precursor del Sernac Financiero), las pymes y emprendedores, además de remover trabas en materia de competencia e inversión.