Swett y agenda antiabusos: “Es muy importante que el costo de hacer mal sea muy alto”

Sobre la menor violencia en las calles, el presidente de la CPC llama a ser cautos. “Se requiere una nueva normalidad”, dice.

El presidente de la Confederación de la Producción y el Comercio (CPC), Alfonso Swett, valoró este martes 10 los anuncios hechos por el Presidente Sebastián Piñera la noche del lunes, respecto de la agenda antiabusos. En cadena nacional, el mandatario planteó la necesidad de combatir de forma más severa prácticas como la colusión y los abusos en los mercados, así como también los delitos tributarios y el uso de información privilegiada. Para esto anunció, entre otras propuestas, el fortalecimiento de la Fiscalía Nacional Económica. Pero además, Piñera planteó la idea de mejorar la protección de los consumidores en diversos ámbitos. 

En conversación con PAUTA Bloomberg, el líder empresarial asegura que es una buena noticia que los delitos de cuello y corbata tengan penas “efectivas y duras”. “Claramente era muy difícil de digerir para cualquier persona, para cualquier ciudadano y me incluyo, que una persona que vendía compact discs en la vereda termine preso en la cárcel de San Miguel –y termine quemado y muerto en la cárcel de San Miguel–, cuando teníamos negocios de colusión en los que en definitiva no había penas efectivas importantes”, sostiene Swett.

“Creo que esa mirada, de esa realidad, no resistía mucho tiempo más. Por lo tanto, nosotros valoramos esta agenda antiabusos”, dije. “La confianza en Chile había sido abusada. Y la forma de ir recuperando confianza –que nos va a tomar mucho tiempo a todos– es justamente siendo muy duro con los abusos”, plantea.

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Swett aboga porque esta agenda que promueve el Ejecutivo no solo sea firme con delitos como el de la colusión en productos de primera necesidad, sino que también lo sea en cualquier tipo de colusión, así como en los casos de uso de información privilegiada. Eso sí, Swett enfatiza en que hasta el momento lo que se conoce es solo un anuncio, por lo que planteó la necesidad de esperar a ver todo el contenido que proponga el Gobierno. 

“Bueno para el sector”

Swett también asegura que este proyecto beneficiará al empresariado. “Yo creo que es bueno para el sector”, dice, ya que, afirma, hay empresarios honestos que se ven perjudicados por quienes cometen este tipo de abusos y afectan la imagen de todo el rubro. Respecto de si la figura del empresariado está en entredicho, Swett sostiene que estas prácticas no se dan solo en el mundo de la empresa. “Yo creo que el abuso tiene que ver con poder y no es exclusivo del sector empresarial”, plantea.

“La verdad es que yo creo que más que decir que el abuso ha provenido del sector empresarial, yo creo que el abuso, la sensación que hay, es que ha provenido de quien tiene poder”, insiste el dirigente. “Toda esta agenda yo la recibo no solamente con una buena esperanza de que nos va a mejorar la confianza, sino también con una tremenda esperanza de que vamos a tener mejores mercados, mejor Estado, más transparencia”, comenta.

El timonel de la CPC se refiere también a la idea de dotar de una mayor protección a los consumidores. En esa materia, asegura que hoy en día el Sernac cuenta con capacidad sancionatoria en términos de multas. “A lo mejor hay que revisar las multas. Es muy importante que el costo de hacer mal sea muy alto”, agrega Swett.

Nueva normalidad

Durante los últimos días, en las calles de Santiago se han registrado menos episodios de violencia en comparación con las semanas pasadas, percepción que Swett también comparte y considera una buena noticia. “Los efectos de la violencia en la economía, en la inversión, en el empleo, la verdad es que son dramáticos. La inversión en la incertidumbre se posterga; en la violencia, se va. Y eso en cualquier parte del mundo. Entonces es una buena noticia, pero creo que hay que ser cuidadoso cuando uno dice: ‘se acabó la violencia, se acabaron los problemas, volvimos a la normalidad’. Yo creo que eso es súper peligroso”, sostiene Swett.

A ojos del empresario, aún están latentes dos conflcitos que considera importantes: por una parte, persiste entre la gente el miedo a perderlo todo; pero también persiste el miedo a que no pase nada. “Ese conflicto de estos dos miedos sigue vigente. También hay un conflicto social que sigue vigente, que es entre quienes claman con mucha fuerza por paz social y quienes claman con mucha fuerza por justicia social […] Tenemos que entender que esos conflictos en la sociedad aún están. Entonces, yo creo que efectivamente es una buena noticia, pero hay que ser cuidadosos y prudentes. La verdad es que lo que vamos a tener que entender es que necesitamos una nueva normalidad”, dice.

Impuestos y crecimiento

El líder del gremio empresarial asegura que si hay algo que lo preocupa es que la discusión de la agenda social se ha dado por separado de la agenda económica. “Estamos hablando de la agenda social para producir justicia social, pero necesitamos también entender que la agenda social y la agenda económica van de la mano. El mejor funcionario de Impuestos Internos es el crecimiento económico”, sostiene Swett. El empresario pone como ejemplo que un punto porcentual de crecimiento económico significa unos US$ 10.000 millones en un plazo de cinco años. Mientras tanto, si se sube en un punto la tasa de impuesto corporativo, la recaudación llega a US$ 800 millones al año. “Este fue, por ejemplo, el error que se cometió en la reforma tributaria anterior, que lideró el ministro Alberto Arenas, donde se quedó con una tasa muy alta, pero con una recaudación muy baja”, asegura.

“Es muy importante entender que la bencina para que se mueva el auto de la justicia social, la pone el crecimiento económico, la ponen los impuestos. Los impuestos se generan en mayor cantidad en la medida en que la economía ande bien”, dice Swett.

Sin embargo, la agenda social que se ha planteado requerirá financiamiento y diversos expertos han sugerido la necesidad de realizar una nueva reforma tributaria para aumentar la recaudación. Sobre la idea de un nuevo aumento en los impuestos, el empresario sostiene que primero es necesario preguntarse cuál es la recaudación que se requiere y quién la debe financiar. Luego, dice, es necesario darle el espacio a los técnicos. “Yo creo que aquí faltan miradas un poquito más sistémicas, un poquito más de largo plazo”, asegura.

“Esto tiene que tener un análisis bien profundo. ¿En qué sentido? Primero, en un principio básico: que los que tienen más paguen más. Eso es fundamental en todo sistema tributario. Y una vez que nosotros discutamos esto, tenemos que ver también que si respondemos mal esta pregunta podemos terminar perjudicando inversiones. No se olvide que Chile recibe mucha inversión de afuera, mucha inversión extranjera. Entonces nosotros también tenemos que cuidar la inversión”, concluye.

Vea la conversación completa en PAUTA Bloomberg acá: